7-. Te Encontraré

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**MyungSoo**


Ayude a SungYeol a ponerse de pie, sus brazos y piernas temblaban a causa de los somníferos que le fueron administrados durante el día, sin embargo lo veía hacer todo lo posible por mantener sus extremidades bajo control.

- ¿Estas bien? - lo cuestioné después de también ayudarlo a ponerse la sudadera, cubriendo su rostro con la gran capucha; aunque ahora el hospital estuviera sumergido en un gran caos, por nada del mundo quería que lo vieran y menos tratando de huir.

-Creo que sí. -los huesos de su cuello tronaron cuando él lo movió de un lado al otro y dio un par de saltos.

- Bien, porque tenemos que salir rápido y sin que nos vean, especialmente el doctor Song o SungJong. -fui hacia la pequeña ventana que había en la puerta y revise que ninguno de ellos estuviera rondando por el lugar, pero solo encontré personas ir y venir a gran velocidad, huyendo de algunos infectados que misteriosamente corrían libres por el lugar, aunque para mí no era un misterio y sospechaba quien era el causante de semejante alboroto. - Vamos. - de inmediato fue hacia mí, manteniendo sus pasos inestablemente seguros, sin duda era un chico fuerte y no temía enfrentar lo que sea con tal de huir exitosamente, aun cuando su cuerpo no tuviera la fuerza suficiente para luchar.

Salimos de la habitación y camínamos a pasos rápidos pero cautelosos, todos parecían ajenos a nuestra presencia y mucho más a nuestra huida. Veíamos infectados pasar de largo e irse contra enfermeras, soldados y médicos que corrían desesperados gritando. SungYeol se sostenía de mi hombro pero sin pedir en ningún momento que nos detuviésemos mientras yo comprimía entre mis dedos el juego de llaves que robe de una de las unidades médicas que había en el campo, yo sabía bien lo débil que se encontraba pero también que lo último que quería era estar más tiempo en ese lugar.

Podía ver la salida solo a unos metros y fue entonces cuando mis pasos se hicieron mucho más veloces, jalando a Yeol para poder llegar lo antes posible,sin embargo algo paso a nuestro lado, lo vi golpear las cortinas de plastico que funcionaban como puerta y caer sobre el césped que había fuera del improvisado centro médico.

-¡Doctor Kim! - canturreo SungJong de lejos y cuando gire mi rostro me encontré con sus ojos puestos en mí.

- SungYeol...corre... - lo empuje fuera del lugar poco antes de que SungJong me alcanzara y me estrellase contra una de las paredes de falso concreto.



**SungYeol**

Ni siquiera tuve tiempo de quejarme, las palabras del doctor Kim habían sonado más como una orden que una petición y entonces comencé a correr, tropezando con todo; cayendo un par de veces sobre el césped y tierra. Había caos en todas partes, sangre fluyendo a borbotones de cuerpos destrozados, vi personas suplicando y corriendo en todas direcciones, hasta que llegue a las grandes rejas que custodiaban el hospital y caí de rodillas ante ellas.

Mis piernas temblaban y la fuerza que tenía minutos atrás se desvaneció, me sentía tan lejano a la horripilante escena que estaba viendo; como si se tratara de una película de terror y yo fuera tan solo un espectador.

Hace menos de veinticuatro horas era todo tan distinto, Gyu me regañaba por llegar a las tres de la mañana y tropezar con la mesita de la sala por no prender las luces para evitar despertarlo, cosa que había sucedido y también empeorado por el tremendo susto que se llevó ante tan escandaloso ruido. Sin poder controlarlo, comencé a llorar al recordarlo e imaginar su destino,¿estaría bien? ¿el oficial Nam habrá podido sacarlo de todo este infierno? Quería creer que sí, porque si yo tenía la suerte de salir bien librado de esto, no podía imaginar mi vida sin Gyu en ella.

Entonces desperté de mis vagos pensamientos, si realmente quería salir de ahí y sobrevivir a esta catástrofe, no podía quedarme sentado esperando a que la ayuda me caiga del cielo; Tenia que hacer algo y pronto, tampoco podía dejar abandonado al doctor Kim; él me había ayudado cuando más lo necesite. Así que me puse nuevamente de pie y fui de regreso al hospital, escondiéndome detrás de los grandes camiones militares que estaban estacionados a un lado; intentando pasar desapercibido. Aun me sentía débil, sin embargo ya tendría otro momento para lamentar mi cansancio y en algún futuro optimista,podría dormir por muchos días.

Pude escuchar al doctor Kim discutiendo y a alguien más riendo a grandes carcajadas, viendo un par de cuerpos apilados cerca del sitio de discusión. Al llegar, encontré al doctor Kim en el piso, sujetando su hombro izquiero y a un joven; casi un niño, sosteniendo lo que quedaba de algún ser humano, que fue lanzado hacia la montaña de cuerpos que había visto poco antes.

- SungYeol. - escuche al médico murmurar,mirándome con sus sorprendidos ojos oscuros. Y tan pronto hablo, también algo contundente golpeo mi cuerpo haciéndome caer de espalda.

- Así que aquí tenemos al niño especial.- las pupilas rojo sangre que tenía ante mis ojos parecían encendidas,no tenía duda; ese chico era SungJong, el joven de quien el doctor Kim me había hablado.

- Yo...yo no sé de qué me hablas - apenas logre articular y me removí intentando liberarme de la presión que ejercía sobre mí, pero tal como lo imagine a pesar de su cuerpo delgado, la fuerza de ese chico era impresionante; me tenía atrapado contra el césped y no parecía estar haciendo tanto esfuerzo para mantenerme quieto.

- Que gran coincidencia que los dos llevemos el apellido Lee, ¿no? Y que compartamos el mismo gen que podría salvar al mundo -mis ojos se abrieron de par en par y mi corazón no dejaba de latir rápidamente, ¿Qué quería decir con eso?

- SungYeol, no lo escuches; solo quiere jugar con tu mente. - alcance a escuchar al doctor Kim pero sin poder apartar mis ojos del par escarlata del delicado joven. - ¡SungJong, suéltalo¡

- ¿Crees que seamos familia? ¿Hermanostal vez? - y de inmediato negué con la cabeza, incrédulo de que mi padre pudiese engañar a mi madre o aun peor, abandonar a un hijo. Él es o era incapaz de algo así. - Sería una lástima que el único portador del gen que se encuentra libre del virus fuera infectado, ¿no?

Y comencé a luchar, recibiendo como respuesta grandes carcajadas y más presión sobre mis muñecas. Sin embargo no planeaba dejárselo fácil, defendería mi salud y mi vida tanto como me fuera posible.

Inesperadamente el cuerpo de SungJong cayó a un lado y sostenía su cuello,donde una jeringa se encontraba clavada.

-Te dije que lo soltaras. -mis ojos se desviaron hacia donde provenía la voz y vi al doctor Kim sosteniendo un frasco, de inmediato me aleje del cuerpo del chico y me levante, viéndolo retorcerse y quejarse. -Vámonos, antes de que alguien o algo más nos encuentre.

Mire de nuevo a SungJong y antes de que pudiésemos alejarnos los suficiente, hablo.

- A donde sea...que vayas o te escondas...te encontraré. - dijo antes de sucumbir a los efectos del tranquilizante, dejándome con el corazón hecho un nudo y un millón de interrogantes en mi mente.


*************

¡Hola a todos!

Se que ha sido un largo tiempo y que tal vez imaginaron que dejaria esta historia en el olvido, pero no; ya estoy de vuelta y esta vez tratare de actualizar sin demorarme tantos meses. (Ya lo he prometido antes pero esta vez cumplire, lo prometo)

¡Espero que este capitulo sea de su agrado y tambien que tengan un excelente domingo!

Majho. :3

☣ QUARANTINE ☣  (WOOGYU)-(MYUNGYEOL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora