☣ QUARANTINE ☣ (WOOGYU)-(MYUNGYEOL)

8.- Recuerdos.

*WooHyun*

Vi el rostro de SungGyu descomponerse hasta convertirse en la viva imagen del pánico y terror al ver al hombre frente a nosotros, quien se aproximaba a paso lento y con un sonrisa claramente divertida.

–Hola, cariño. Mucho tiempo sin vernos. –le hablo muy cerca del rostro, causando que Gyu se encoja en su lugar para poder alejarse tanto como le era posible. –Te extrañe. –hablo buscando sus pequeños ojos que lo evitaban y que se veian amenazados por un mar de lagrimas.

Miraba la escena con desconcierto, podía ver el asco en Kim y el placer del otro al tenerlo atrapado.

–Alejate de él. –exigi, hablando por primera vez después de ver al terror invadir a SungGyu, y de inmediato los enormes ojos del agresor se posaron en mi por unos segundos para regresarlos a Gyu.

–Mmmm, ya veo. –Observo al castaño con un sonrisa malevola. –¿Ya te cansaste de calentarle las pelotas a tu adorado SungYeol?  –cuestionó en tono burlón y el tembloroso cuerpo de Kim se sacudió mucho mas, al mismo tiempo que mis ganas de estrellar el cuerpo de ese idiota contra el piso aumentaban. –No olvides que tu y yo tenemos algo pendiente desde hace mucho. –me fue imposible soportarlo mas, así que como pude me lance sobre el tipo, golpeando directamente en su rostro con mi hombro y caer estrepitosamente a su lado al perder el equilibrio.

–Te dije que lo dejes tranquilo. –logre patear una de sus costillas y estaba a punto de hacerlo nuevamente cuando dos hombres mas entraron.

–Agarren a ese hijo de perra. –ordeno con fuertes gritos a los presentes, antes de escupir un chorro de sangre que brotaba de su boca, de no estar atado, sin duda alguna podría romperle la cara.

–MinHo, ya deja de jugar con la mercancia. El jefe llego y quiere verte.  –se puso de pie, emitiendo algunos quejidos pero antes de alejarse aprovecho para patearme en el estomago y costillas.

–Esto no se va quedar asi, tu seras el primero que esas cosas se coman y... –giro hacia SungGyu.  –Nosotros nos divertiremos mucho, cariño. –le guiño un ojos y salio de la habitación sin decir algo mas.

Gyu se arrastro de rodillas hasta llegar a mi, con el rostro lleno de preocupacion.

–¿Estas bien?  –pregunto sin poder hacer mas, el intenso dolor en el estomago y mi costado me hacían sospechar que tal vez me habia roto una costilla.

–Tuve mejores peleas en la academia de policía. –quise reír, sin embargo el dolor se agudizó y al final solo pude soltar un quejido. –¿Tu estas bien? –hizo un leve asentamiento de cabeza pero la tensión en su cuerpo me decía otra cosa.

**SungGyu**

Exhale con lentitud, tratando de calmar el temor que MinHo me causaba al estar en el mismo lugar. De todas las cosas malas que sucedieron ese día, esta era una de las peores. Y pense de nuevo en SungYeol, en todas las veces que me cuido durante nuestra infancia y las otras en las que tuvo que defenderme... ¿Estaría bien? Quería creer con todo el corazón que su astucia y empeño, lo mantenían a salvo.

–¿Quieres contarme? –desperté de mis pensamientos al escuchar de nuevo la voz de WooHyun. –¿Que paso con ese idiota? –suspire una vez mas y sentí como los recuerdo que me aferraba a olvidar, colmaban mi mente.

–Hace unos años, cuando comenzaba en la universidad, conocí a MinHo. –mire por un segundo la puerta por donde había salido minutos antes. –Nos hicimos buenos amigos, compartimos clases... –tome un poco de aire y mire al oficial. –Un día se me declaro y aunque el no me era indiferente, preferí declinar. En ese tiempo tenia en mente solo concentrarme en mis estudios y graduarme lo antes posible.

–¿Se enojo? –negué nuevamente y volví a exhalar, solo SungYeol sabia lo sucedido, era un secreto que manteniamos aun cuando el dijo muchas veces que era necesario buscar ayuda, sin embargo lo menos que quería era preocupar a nuestras familias.

–Me dijo que entendía y que esperaba que pudiéramos seguir siendo amigos – sonreír con pesar al recordar lo poco sinceras que fueron sus palabras. – Una tarde me invito a una fiesta, dijo que era una reunión que harían los de quinto semestre. Pensé que no era mala idea ir y relajarme un rato, no tenia idea lo equivocado que estaba. –mire a Nam, quien también me miraba con cautela. –Min Ho me dio una bebida, no tenia idea lo que planeaba. Te juro que jamás paso por mi cabeza, el era mi amigo y confiaba en el. Recuerdo que todo se empezó a volver confuso y lento, él me dijo que había bebido de mas pero yo sabia que no era así, soy bueno al beber y difícilmente el alcohol me aturde. –explique con mas calma de la que sentía en mi interior. –Me dijo que tenia que descansar y me llevo al fondo de la casa, donde se encontraban las habitaciones.

–SungGyu. –el oficial murmuró y yo sentí como un nudo se formaba en mi pecho, aunque lo recuerdos eran vagos, la mayoría habían logrado mantenerse en mi mente.

–Segundos después todo se hizo mas confuso, de un momento a otro estaba luchando por quitarme a MinHo de encima mientras el decía un sin fin de cosas desaagradables. – "Seguro SungYeol te folla todas las noches como la ramera que eres" vino a miente esa frase llena de veneno que MinHo me escupió mientras intentaba desnudarme y yo trataba de evitarlo. –Lo ultimo que recuerdo es que de la nada, SungYeol irrumpió en la habitación y lo aparto de mi antes de caerle a golpes, después de eso las luces se apagaron. Cuando recupere la conciencia me dijo que uno de sus amigos estaba también en la fiesta y que le había llamado después de que sin querer, había escuchado los planes que MinHo tenia conmigo... había echado alguna droga en la bebida.

–¿Lo denunciaste? Eso que hizo es un delito. – negué con vehemencia y sonreí lastimosamente.

–Se lo que me hubiesen dicho si iba a levantar la denuncia "Eso te pasa por maricon" "Por ir a esas fiestas libertinas que ustedes hacen" "Te lo buscaste" –hubo un momento que pensé en ir a interponer una demanda, sin embargo sabia que antes de si quiera ir a detener a MinHo o abrir una carpeta de investigación, me harían sentir culpable y me tacharian de un millón de cosas, menos de víctima.

–Gyu, mirame. –levante la mirada hasta hacer contacto con la del pelinegro. –Tu no tuviste la culpa, no es tu culpa que un idiota sin escrúpulos haya intentado aprovecharse de ti. –Yeol me habia dicho lo mismo y otras veces tuve que detenerlo para evitar que vaya a matarlo a golpes, sin embargo yo mismo me culpaba por no haber intuido, por haber confiado demasiado. –Te prometo que ese imbécil no volverá a tocarte.

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Buenas noches a todos... Siii, despues de un montón de tiempo estoy de regreso y espero que aun haya alguien que desee seguir leyendo esta historia. A los que aun esta aquí, les agradezco por esperar y espero que el capitulo sea de su agrado, les mando un abrazo gigante y pronto estaré actualizando "Noche".

Hermoso fin de semana.

Majho Kou. 😊