The Sorcerer's Apprentice (El Aprendiz de Brujo)

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¡Hola!

Muchísimas gracias por toodos sus comentarios, me alegra que les siga gustando esta historia DaianaVelazquez, MaryPlaza8, Mkijud, RebeFernandez5, JessyHdl, AngelicaArrazolaHern, MaraGilMartnez, JennyR-73, crisalecbloom, GladysElizabethGrego, kari890212, ElizabethHernande381, BiancaCarrillo1, Marialuli66, iAkasha, SamanthaAndy1807, AliceKaeru, VanyMa3, WeiYingGusuLan, montirroch, IlmrTolkien, alba830404, CiomyBane, SoledadReyes709, Vany5ita, akumaquee, GrisslyMarquez, Mara_pudin, user30239949, Malecmine99, YilingLaozuLan, Beautiful-die, no_ytumama 💜💙💜

Y también muchas, muchas gracias a quienes dejan sus votos 💛💙💛

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Continuamos con el fin de semana libre y una charla importante entre Alec y Magnus. Un descubrimiento importante.

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Después de un día completo en el sol, la piel de Alec estaba ardiendo y su cuerpo estaba frío y hormigueando. Sabía que era una quemadura de sol. Magnus lo había acosado varias veces durante el día para que se aplicara el protector solar, pero no lo había hecho. El aire fresco de la montaña le había dado una falsa sensación de seguridad, pero ahora, mientras se examinaba en el espejo del baño, parecía que había pasado el día tumbado en la playa. Debería haberlo sabido, especialmente a esta altura.

Cuidadosamente abotonó su camisa blanca de algodón más suave y suelta, dejando abiertos los dos botones superiores para que la tela no rozara su piel. No quería escuchar un 'Te lo dije' durante la cena, pero cuanto más tiempo pasaba en el baño preparándose, más rojo se veía su rostro. No se atrevió a afeitarse, por miedo a agravar la quemadura. Así que dejó la barba ligera, esperando que pudiera enmascarar un poco el enrojecimiento. Su cabello aún estaba ligeramente húmedo mientras lo peinaba cuidadosamente con sus largos dedos.

Alec siempre había sido un tipo de persona sin complicaciones cuando se trataba de su apariencia, pero desde que conoció a Magnus, había tratado de mejorar su juego un poco. Había empezado a usar productos de alta gama para el cuerpo y el cabello, que sorprendentemente disfrutó. Nunca había notado que tenía la piel seca, pero la exfoliación con sal marina de Magnus y la crema corporal de hierba de limón se estaban convirtiendo rápidamente en un elemento básico de su rutina. Le gustaba la forma en que olían, especialmente porque se sentía como tener un poco de Magnus con él todo el día. Cuando terminó de vestirse, parecía una langosta. No se podía ocultar esta quemadura.

Alec salió del baño y vio a Magnus sentado en la mesita junto a la cama, pintándose las uñas- "Entonces, ¿a dónde iremos a cenar?"- preguntó, con la esperanza de mantener la conversación lejos de su deslumbrante estupidez.

-"Aquí mismo, he hablado con el chef y está preparando algo especial solo para nosotros" dijo Magnus mientras doblaba su mano con cuidado para soplar suavemente sobre el esmalte húmedo.

'Por supuesto que sí', pensó Alec. ¿Había alguna duda de que la cena sería algo exagerado y extravagante? Alec sólo esperaba que no hubiera cerrado todo el restaurante para los dos.

Magnus levantó la vista y finalmente notó el estado en el que se encontraba- "Oh, Dios"- jadeó, con los ojos muy abiertos- "Eso no puede sentirse bien"

-"Estoy bien"- se quejó Alec, mirando a sus pies, sintiéndose un poco avergonzado. Algo bueno sobre la quemadura de sol, era que no se notaba si te sonrojabas.

Sinfonía Agidulce - Bittersweet SymphonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora