Todo Lo Bueno Que Hay En Mi (sterek saga #2)

Chapter 6: La Teoría Del Caos 2ª parte

-     Hola Stiles. Me llamo Ian. ¿te acuerdas de mí?

El brujo no supo cómo reaccionar, era el chico al que había ayudado la primera vez que salió de la celda.

-     Tú. ¿Tú eres el que me ha estado dejando los origami?

El chico le sonrió acariciando la estrella de sheriff hecha de papel, que ahora descansaba en sus manos.

-     Así es. – su cara no abandonaba esa sonrisa. Stiles apretó el puño.

“¿Por qué coño sonríe tanto? Idiota” – se paró a respirar, sopesando si atacar o no.

-     ¿Por qué? – preguntó entrecerrando los ojos.

-     ¿Por qué no? – respondió el otro con cara de duda.

-     ¿creí oírte decirles a esos matones que no ibas a bajar a mi celda?

-     Yo dije que no bajaría a robar. – le sonrió, Stiles en cambio tuvo suficiente.

-     ¿te estás haciendo el gracioso? ¿me estas vacilando? – los nudillos del nigromante se tornaron blancos por la fuerza con la que apretaba los puños. – porque si es así…

-     Dhamel me libre, ¡NO! – río.

-     Pues entonces quiero que me mires muy fijamente y me expliques de qué coño va todo esto. – le apuntó con el dedo - ¿Por qué me dejaste las figuras?

-     Eso es fácil de responder. – elevó la estrella en el aire y se la acercó a Stiles. – lo necesitabas.

Esa respuesta pilló por sorpresa al nigromante, quien cogió la estrella y la miró dudoso, librándose un poco de la tensión del momento por la curiosidad.

-     ¿Que lo necesitaba dices?

-     Si – asintió sonriendo el chico.

-     ¿necesitaba papel? – dijo Stiles elevando una esquina del labio.

-     Esperanza. – dijo ignorando su comentario. – Recordar, quien eras. – Stiles le observaba detenidamente durante un rato, mientras daba un par de pasos pensativo.

-     Y se supone que tus figuritas me iban a ayudar a hacer eso. ¿A ser de nuevo, mejor persona? – dijo levantando una ceja y la estrella en su mano. – pues lo siento, pero no ha funcionado.

-     No exactamente. – Ian se recostó contra el tronco del árbol – esos – señalo la figurita de papel - tenían solo una función, afectarte hasta el punto de traerte hasta mí. Y amigo mío, como ambos podemos comprobar, – dijo levantando los brazos para remarcar la situación – eso, sí ha funcionado.

********************************

Al sonar el timbre, todos salieron al parking del instituto, cogieron sus vehículos y se dirigieron hacia la antigua mansión Hale.

Ya que Derek no quería ni acercarse por allí, mandó a Scott, Allison, los gemelos y a Lydia encargarse de la zona.

Al llegar y vislumbrar la casa, o lo que quedaba de ella, fueron frenando las motos y el coche de Lydia hasta aparcar delante del patio.

No podían evitar tensarse ante el recuerdo de lo que allí ocurrió hacía apenas un año, sobretodo Scott, quien seguía mirando la zona con una expresión entre tristeza y desolación.

-     Ya era hora – Jackson les esperaba sentado en el porche con expresión aburrida.

Aiden soltó un resoplido, ya era bastante tener que hacer lo mismo todos los días, como para que encima hoy decidiera apuntarse también Jackson whittemore. La mano en el hombro de Ethan le mandó apoyo y una orden silenciosa de que se calmara.