Capítulo 1: "Mortel"

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Di una patada al aire ya que Scar la había esquivado a la perfección. Justo después, mi hermana lanza un puño a mi cabeza, alcanzo a esquivarlo y aprovecho esto para tomar su mano y girarla en una llave simple pero dolorosa. Su rostro demuestra un ápice de dolor y el mio una pequeña sonrisa. Todos los espectadores (que no eran más de 15) ahogaron un grito cuando ella revirtió mi llave. Estaba segura de que el gesto en mi cara era igual al que ella había emitido segundos atrás. No tardo en zafarme de su agarre y nos separamos unos metros mirándonos a los ojos con aire obstinado...

—¡Suficiente! —grita la entrenadora Jessica, quien supuestamente, es la experta en enfrentamiento cuerpo a cuerpo de la academia.

Su grito hizo que todos los alumnos se pusieran derechos mirando al frente, como robots. Casi al instante, Scarlett y yo nos enderezamos con las manos entrelazadas atrás, en señal de respeto. Aunque lo que sentía por ella y por su clase no era precisamente eso.

La profesora comienza a dar un discurso de lo mal que lo habíamos hecho, dando explicaciones completamente ridículas. En mi opinión, ella no era nada profesional. En un impulso repentino, Scar lanza una mirada de completo fastidio mientras refunfuñaba que era una maldita resentida. Yo obviamente concordaba con ella, a nuestra "superior" le molestaba que nuestros combates nunca tuvieran fin.

Jessica gira la cabeza como un búho, lo cual me hace perfectamente consciente de que se escuchó lo que Scar dijo. Jessica se acerca lenta y peligrosamente con su "vara disciplinaria" en mano.

Odiaba todo esto, la odiaba a ella y odiaba esa maldita y endemoniada vara.

—Debería ser más respetuosa señorita Stark —dice la maldita perra acercándose a mi hermana, mientras golpeaba su mano suave pero firmemente con la vara —no entiendo el porqué soy una maldita resentida. No es como si esta absurda pelea hubiera sido impecable, porque a esa ridiculez que acaba de hacer no se le puede catalogar como lucha —escupe cada palabra con asco, con rabia y a la vez con satisfacción, como si fuera un juego y ella estuviera ganando. Siento mi cara arder de la rabia —la hubieran matado muy fácilmente, Señorita Stark. Su primer error... —no termina su frase y estampa con toda su fuerza la vara en la espalda de mi hermana —la postura, linda... —dice con falsa ternura.

La "vara disciplinaria" era una vara de un metro aproximadamente, de madera en el centro pero envuelta en caucho rugoso. De ese que te deja una marca por días. Ella la utilizaba como "herramienta educativa", la maldita estaba loca.

No lo dudo dos veces. Avanzo a paso decidido hacia la mujer que se encuentra dándome la espalda. Vamos a ver quién muere fácilmente.

No alcanzo a dar ni dos pasos, cuando siento un brazo rodear mi abdomen y una mano en mi boca. Scarlett no se mueve ni un milímetro, estaba quieta mientras la golpeaban. Era otra de las maravillosas reglas de este lugar. Los ojos de mi hermana miran con agradecimiento a quien me detiene, luego posa su mirada en mí con súplica; ambas éramos completamente consientes de que, si yo hacía algo contra Jessica, una simple golpiza iba a parecer una suave caricia en comparación con lo que me esperaba. Estaba segura de que ella no quería eso... Y en el fondo yo tampoco.

Siento como un nudo comienza a instalarse en mi garganta. No tengo planeado llorar, de eso estoy segura, por lo menos no frente a todos. Me enderezo y neutralizo mis facciones, mirando como Jessica le lanza golpes a diestra y siniestra a Scar, gritando una serie de errores sin sentido.

Toda persona con un poco de lógica o algún conocimiento, por básico que fuera, en combate cuerpo a cuerpo; sabe que ninguna cometió alguno de esos errores, si no al contrario, nuestra pelea estuvo muy bien realizada. Jessica solo los dice para tener una excusa y golpearla, no soportaba ver que alguien fuera mejor que ella. Se encontraba tan concentrada en hacerle daño que no se dio cuenta de mis intenciones, de lo contrario yo me encontraría en una situación peor que la de mi hermana.

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