Capítulo 4

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Todo esto me resultaba un tanto interesante, era un raro al igual que yo...bueno...un "raro" para los ojos de los demás.

Siempre me gustaron esas cosas, bueno no exactamente lo wicca ya que ni sabia que existía, pero sí las cosas que tenían que ver con misterios y cosas así.

Suelo leer mucho un libro, en realidad son dos. Bastante interesantes por cierto, uno trata sobre criaturas elficas, una creencia muy popular que se tiene en Islandia, y el otro libro es sobre el bosque del suicidio en Japón, muchos creen que al entrar te suicidas, honestamente yo no creo eso, pero de verdad quisiera ir a ese lugar, y claro, algún día iré. Si es que mis padres no empiezan a joder diciéndome que me lleve a los monsters, enserio, sería el colmo. Soy su hijo no su niñero.










Me quedé repasando hoja por hoja el extraño libro, había cosas que me resultaban divertidas sobre todo aquellos hechizos. ¿Será que servirá alguno?

Suelto una carcajada.

Me levanto del sofá, rasco un poco mi cabeza y camino en dirección a mi habitación.

Justo antes de llegar una molesta voz me detiene.

—¡TAEHYUNG! —es la voz de mi madre, ruedo los ojos.

—¡¿Sí?! —contesto.

—¡Ven!

Mierda, está en su cuarto mirando la televisión o maquillándose...ruego por que sea lo primero, porque de ser lo segundo sé que saldrá, ella siempre sale cuando se maquilla.

Y eso significa cuidar a mis hermanos.

Entro a su cuarto y suelto un respiro de alivio al ver que está recostada en la cama viendo una serie de mierda.

—¿Qué pasa, mamá?

—Ten —alza la mano y me da un dinero y un recibo—, necesito que vayas a pagar la luz.

No protesto, simplemente me doy media vuelta y salgo de su cuarto, camino hasta la puerta de salida y después la abro. Suelto un suspiro pesado al mirar aquél recibo blanco en mis manos.








.............





[Once días después]








No sé por qué le dije a Jungkook que iría a ese extraño local a esperar a que volviera el chico, si es que volvía, claro. Pero Jungkook se aferró a ir para mi desgracia, incluso le dije que no iría pero sólo gané risas de él y que me dijera que yo no sabía mentir. Y es verdad, no sé mentir, jodida mierda.

Para mi suerte hoy era mi día de descanso, estuve con Jungkook jugando videojuegos en su casa y ya era un poco tarde así que me dispuse a venir hasta estos lugares, casi llegábamos, estábamos por la calle. Honestamente no entendía por qué me encontraba un poco nervioso, y aunque trataba de negarlo estos días estuve pensando en ese extraño chico, sí, sí...obviamente no le dije eso a mi querido amiguito porque ya sabría lo que me diría, de horas de burlas no me libraría.

—Mierda, ahora mismo estaría pateándote el trasero en Capcom vs SNK pero preferiste venir a llevarle el libro mágico al vampiro.

—Me siento mal por el manotazo que le di en la cara, aparte de que por mi culpa dejó este libro sin darse cuenta.

—¿Dime quién se preocupa por eso y vuelve para regresarle un libro?...solo Kim Taehyung —rueda los ojos—. Ese chico ya se olvido del libro, te puedo asegurar que tiene un millón de libros mágicos para hacer sus pócimas de brujo-vampiro.

Wiccan Boy ~yoontae~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora