Un Regreso Inesperado

CAPÍTULO 3

[FLASH BACK]

Al día siguiente, una mujer de cabellos rubios abría lentamente los ojos mientras observaba todo a su alrededor y se cuestionaba una y otra vez qué era lo qué había sucedido, de repente un par de ojos rojos vinieron a su mente e inmediatamente se puso a la defensiva y se incorporo de la cama dispuesta a salir de la habitación.
En cuanto abrió la puerta, se encontró con aquella misma mirada, sólo que ahora sus ojos se mostraba de un color negro intenso.

-¿Quién eres y qué haces aquí?.

Le pregunto aquel misterioso hombre de forma sería y sin expresión alguna, provocando una ligera molestia en la joven.

-¡¿Quién demonios eres tú y qué fue lo qué me hiciste, maldito bastardo?!.

La manera tosca en la que habló la rubia, provocó el enfado del Uchiha, que sin mediar palabra tomó su Katana y la posicionó directamente en su cuello.

¿Qué se había creído esa insolente para hablarle de ese modo?

Presionó con más fuerza el mango de la katana, provocado que el filo se incrustara en su cuello, la joven apretó sus labios evitando soltar algún gemido. Por más que aquello le doliera, no se permitiría demostrarlo.

-¡Sasuke!.

Grito Karin alarmada al presenciar la escena, llevaba consigo ropa limpia y un poco de comida, detrás de élla venía el resto de taka, que al igual que élla se mostraban preocupados.

Sasuke como siempre los ignoró y siguió amedrentando a la persona que tenía enfrente.

- Te lo preguntaré una vez más, ¿dime quién eres y qué haces en este lugar?

A regañadientes la joven contestó con algo de dificultad, tratando de ignorar el dolor que esa Katana comenzaba a provocar.

- Mi nombre es Lynn, soy ex ninja de la aldea de la arena. -lo miraba fijamente.
- No se que hago aquí, solo se qué estaba huyendo de un grupo de criminales, ellos mataron a mi hermano yo alcanze a huir, corrí lo mas qué pude y encontre esté lugar.

Seguía observando fijamente al Uchiha.

- Eso suena muy convincente. Al menos para mí.

La rubia fijó su mirada en la persona que había dicho aquéllo, Suigetsu le dedicó una sonrisa picara, y esta lo ignoró. Regreso su vista al pelinegro y volvió a dirigirse a él del mismo modo tosco.

- Ya te dije lo que querías saber, ahora aleja tu asqueroso pedazo de metal de mi cuello y entrégame mi arco con sus respectivas flechas, me iré en este momento de aquí.

-Aún estas muy debil hermosa, no llegarás muy lejos.

Volvió a hablar Suigetsu sin dejar de sonreir.

- No podras irte asi de fácil, nos has visto y eso podría significar un riesgo. Te mataré aquí y ahora.

Inmediatamente Sasuke activo su sharingan.