Dreizehn

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Ambas estábamos ya acostadas cada quien en su cama cuando un estruendo hizo que Irene saltara de su cama.

—¿Estas bien Joohyun? —pregunté cuando me pare para ir hasta su cama

—No, los truenos me dan miedo, y no puedo dormir —cubrió su cuerpo completo con las mantas

—¿Y que sueles hacer en estos casos?

—Mi hermana dormía conmigo cuando llovía, ella me ayudaba a conciliar el sueño —respondió desde abajo de sus sábanas

—¿Quieres que duerma contigo? —

—No, no te preocupes, estaré bien —otro trueno más fuerte sonó haciendo que Joohyun gritara

—Dormiré contigo–tomé mi almohada y mi manta y me recoste a su lado

—No tenías que hacerlo, ahora pensaras que soy una cobarde —

—Claro que no, ven, te abrazare para que no tengas frío y puedas dormir —Ella dudó un poco pero lentamente fue acercándose a mis brazos

—Estas cómoda... Gracias por dormir conmigo Seulgi... —Joohyun cerró los ojos, podía sentir su respiración y los latidos de su corazón.

—¿Joohyun?

—¿Mhm? —contestó aún con los ojos cerrados

—Puedo sentir tu corazón latir... Late muy rápido... ¿Aun tienes miedo? —

—No... Ahora que estas a mi lado no lo tengo— Sonreí por su respuesta y deje un beso sobre su frente

—Descansa Irene... — solté en un susurro y sentí como Joohyun escondía su cabeza en mi cuello.

No pasó mucho tiempo para que mi cuello se humedeciera y no precisamente por estar sudando, si no porque Irene estaba dejando uno que otro beso en él.

—Joder! Irene... ¿Q-Que haces...? — mi respiración comenzaba a sonar anormal

—Seulgi, necesito de ti... Te necesito... — su mano vagaba por mi cuerpo

No entendía lo que trataba de decir por lo que me incorporé rápidamente.

—No creo que debamos hacer esto, no aquí... — jadee un poco

—¿Que acaso no te das cuenta? ¿No te das ni una maldita idea de lo que siento por ti? — subió a mi cuerpo apoyando sus manos sobre mis hombros impidiendo que escapara recostandome nuevamente en la cama

—No te entiendo... — solté liberandome de mi ropa

—¿El incidente de esta mañana te ayuda algo? —responde sobre mis labios —Seulgi ya no puedo más, me...me gustas...—

—Estas bromeando ¿cierto?— contestaba al mismo tiempo que accedía a lo que me pedía

—Veremos si después de esta noche piensas lo mismo — tomó mi rostro y me beso con desespero

Recorrí su cuerpo con mis manos disfrutando de cada parte de su pequeño cuerpo, sin duda alguna me encantaba ver la reacción que mi tacto provocaba en el mismo.

—Me volveras loca si no lo haces pronto— A esta altura ya sabía perfectamente lo que ella quería

—Aguarda un poco, quiero alargar el placer...solo...espera...—besé su cuello, bajando lenta y savemente por éste llegando a su clavicula en donde dejé un par de marcas, seguí bajando escabullendome entre ese par de hermosos pechos que me esperaban por ser atendidos.

esparcí caricias por sus piernas y a la vez, atendia con mi boca sus pechos, aleternando mis movimientos. descendí un poco mas pasando su abdomen , baje tan solo unos cuantos centímetros la parte superior de sus bragas...decidí terminar de retirarlas por la parte frontal con ayuda de mis dientes y la parte trasera con mis manos.

Antes de seguir con el acto me paré de inmediato tomando un condón de uno de los cajones de mi mesa de noche, ella me observaba desde la cama con confusión solo bastaron un par de minutos para reincorporarme con ella.

Acerqué su cuerpo a la orilla de la cama atrayéndolo hacia el mio, tomé mi miembro, y lo introduje en su entrada. Ella cerró los ojos conteniendo el dolor pero una vez que estuve totalmente dentro de ella esperé a que se acostumbrara a tenerme dentro. Comencé el vaivén despacio,  me encantaba ver como mordía su labio inferior tratando de no gemir. Conforme aumentaban sus jadeos y apenas audibles gemidos embestí con mas fuerza.

—Seulgi...Ya...Ya casi...— al escuchar eso bajé la velocidad del vaiven, ella pareció molestarse

—Pídeme que haga que te corras, ¡Pídelo!— Ordené con mi voz ronca

—Por favor seulgi, hazme llegar...— sin necesidad de escuchar otra cosa reanude la velocidad de mis embestidas, ambas ahogamos nuestros gemidos con un beso...¿Cómo podría mañana ver a los ojos a Irene? Sin duda las cosas no serían igual...

BESTE SÜNDE || SEULRENE G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora