–Oh~–gimoteo mientras hacía un puchero–Vamos, debes cumplir con el reto– ánimo–Será divertido.
–No lo creo–dudó, no quería subirse a un árbol y gritar que era el rey del mundo–¿Y si me quedan raspones o algo así?, mamá se molestaría mucho–razonó– Lo sabes Hyung.
–Porfa–suplicó el mayor– ¡Prometo recompensarte!.
–Sólo lo haré si me das tu postre–negoció el menor con una gran sonrisa en su rostro–Me lo darás por dos semanas.
–¡¿Qué?!–gritó enojado, tanto que asustó al más bajo–Tu ganas–suspiro mientras suavizada su semblante, cambiandolo de enojo a picardía, algo que tomó por sorpresa al castaño.
Se tomó su tiempo meditando cual sería su intercambio.
No sabía si pedirlo o no, pero el no dejaría pasar una oportunidad así.–Está bien, pero a cambio me darás algo más–sonrió con perversión.
–H-hyung–habló con nerviosismo, aveces y sólo en algunas ocasiones, su hyung podía ser un pervertido a tal grado de asustarlo–Me éstas asustando.
–No es nada del otro mundo Kookie–sonrió–¿Éstas listo para oírlo?.
–Tae...Tengo miedo... –confesó, mientras pensaba si era conveniente oir al mayor– ...Pero no me queda otra si quiero tu postre–respondió.
–Debemos darnos nuestro primer beso en este momento– habló sonrojado hasta las orejas, tan sólo pensar que después de tanto tiempo, al fin podría probar ésos labios rosados que lo volvían loco con cada sonrisa que sus tonterías causaban.
–N-no quiero obligarte–alzó sus manos mientras mostraba incomodidad en sus acciones– n-no tienes que hacerl...–se vió interrumpido por unos tiernos labios q se unieron a los suyos. Jungkook lo estába besando, ¡El lo estaba iniciando,el lo hizo!.
Taehyung cerró sus ojos, dejándose llevar por ese lindo y tierno beso. Sintiendo como enormes mariposas causaban cosquillas en su estómago.
Jungkook estába nervioso, sintió sus piernas temblar y su algo extraño en su estómago, jamás había besado a alguien, mucho menos a su Hyung. Lo había hecho, si, en forma de saludo, pero éstos eran besos en la mejilla, besos inocentes, jamás fueron besos que solo realizaban los adultos.
Tenía miedo de no estar haciéndolo bien, y se asustó aún más cuando no recibió respuesta alguna por parte del azabache. Estába a punto de separarse, cuando sintió una mano acariciar su nuca, dando pequeños masajes en ella y a su vez, sentía como esos labios gruesos comenzaban a corresponder aquel inocente gesto, haciéndo movimientos suaves, haciéndolo más cálido, dándole su toque juguetón.
Se separaron por la falta de aire mirándose a los ojos sintiendo miles de cosas inexplicables, con la ahora presente, timidez por parte de ambos.
Ése pequeño gestó había dicho más de mil palabras a dos niños de tan sólo nueve y diez años, pero ambos eran muy jóvenes como para entender lo que sentían. Querían aprender aún más, pero no lo podían desir, la timidez les ganaba y ninguno podía mirarse.
Esa tarde de juegos siguió como si nada hubiera pasado, ambos decidieron algo que podría cambiar sus vidas. Dentro de algunos años lo volverían a intentar, y si el destino tenía preparado algo para ellos, no había duda alguna que lo esperarían con ansias.
~💞~
Ese recuerdo atormentaba su mente, no quería admitirlo, no quería aceptarlo, el quería cumplir esa promesa q ambos realizaron cuando eran niños.
Hoseok llegó a el junto con Mark y habló a su pequeño –Jungkook...–suspiro con pesadez al ver que el castaño se negaba levantar su cabeza para mirarlo a los ojos–Para, no llores más.
Hoseok estaría mintiendo si dijera que no le dolía ver a su amigo sentado, llorando, ocultando su rostro entre sus piernas. ¿Y a quien no le doleria ver a esa persona que es todo lo que más quieres?
Mark simplemente no sabía que hacer o desir, el era amigo de Jungkook, si lo era, pero no conocía los motivos ni mucho menos tenía idea de lo que el castaño vivió, sentía mucha impotencia al no saber cómo ayudarlo.
–H-hyung...–sollozaba más fuerte, haciendo que su voz saliera entre cortada–El...no me recuerda–su respiración se detuvo, sentía como su corazón se rompía y dolía aún más–¡El me olvidó!.
El pelinegro se acercó a el y lo abrazó de la manera más dulce que alguna vez lo ubiera hecho, si no podía aconsejarle al menos le haría saber que tiene su apoyo en todo y que no dudaría en ayudarlo. El castaño correspondió al abrazo sollozando aún más fuerte hasta que el pelinaranja habló.
–¿Cómo puedes desir que el te olvido?–cuestionó Hoseok
–E-el no me reconoció...–lo miró a los ojos mientras cálidas lágrimas salían de sus irritados ocelos– ¡Nisiquiera recuerda mi nombre!.
–Jungkook–habló el pelinegro–No puedes asegúrate de que el te olvidó, yo...no se con exactitud lo que pasaste–admitió con una tenue sonrisa–Pero algo debió haber pasado algo... no... no lo sé, ¿Qué pasa si esque tuvo un accidente o algo parecido que es incapaz de recordar?– cuestionó mientras miraba como el menor paraba de llorar–Éso tu y yo no lo sabremos si no se lo preguntas, pero de algo si estoy seguro–afirmó–Y esque nadie podría olvidar a una persona tan genial como tu Jungkookie.
El menor paró de llorar y observó a sus hyungs, asintió, dándole a entender que pararía de llorar.
–Inténtalo...–susurro Hoseok– Por más que duela, debes intentarlo.
Los tres se abrazaron mientras los mayores daban palabras de apoyo a su querido Jungkook.
~💞~
Ambos caminaban juntos hacía la cafetería, tenían tanta hambre que parecían ratas acechando cualquier migaja que callera al suelo.
Conversaban de cosas triviales, desde que pedirían para comer hasta lo que harían después de clases. Taehyung comentó algo que dejó sin palabra alguna a su mejor amigo, algo que no sabía si era bueno o malo.–Juró a verlo visto en algún lugar...pero no puedo recordar–suspiro con cansancio al no poder recordar en donde había visto ese rostro, ¿Cómo podía existir alguien tan adorable y familiar como él?.
–Taehyung–habló Jimin, notando su repentino cambio de humor–No te exijas demasiado podrías marearte o algo.
–Esque no lo entiendes– habló el más alto–Ese tal Jungkook, se que sonará tonto, pero cuando estába a su lado sentía una gran comodidad y una gran necesidad de estar con el–aseguró el rubio–juró que lo conozco de algún lugar... lo malo... lo malo es que no logró recordar.
–No te preocupes Tae–sonrió el pelirosa mientras pasaba su brazo sobre los hombros de su mejor amigo–se que con el tiempo lograrás recordarlo.
–Eso espero–asintió con una leve sonrisa. Tal vez la vida no era tan mala si volvía a poner un angel tan bello como Jeon Jungkook, el se aseguraría de nunca volver a olvidarlo.
Hola, espero que les este gustando este fic, si hay algún error ortográfico me aseguraré de corregirlo, desde ya muchas gracias❤✨.
Sin más, nos leemos pronto❤.
~M.J.A~
ESTÁS LEYENDO
"Nunca me olvides"-(TaeKook)
FanfictionJeon Jungkook y Kim Taehyung fueron mejores amigos desde niños. Pero son separados por el trabajo de los padres de Taehyung. ¿Podrá el tiempo destruir sus hermosos recuerdos? ¿Podrá Tae recordar a su fiel amigo? ¿Podrá recordar con quién fue su prim...