La Frialdad De Sus Ojos || Tom Hiddleston ||[Terminada]

Capítulo 19

2 días después.

Necesito unas vacaciones, aunque no me he quedado hasta altas horas en el trabajo, pero ya necesitaba descansar, hoy me tocaba pagarle la renta a Hiddleston, así que estaba en la computadora haciendo la transferencia de dinero de mi tarjeta de Débito a su cuenta bancaria, cuando Lucille entró a mi oficina, primero se toca sabes, pensé.

-Tienes que venir rápido, no preguntes, solo ven.

Debía ser algo urgente, Lucille me guió hasta la sala de juntas, donde estaba casi toda la oficina y Hiddleston, mire a todos lados para entender que pasaba, mire a Christine que tenía los ojos rojos e igual su cara.

-Una de las cosas que no soporto sobre todo es que estén rumores falsos sobre mi en la empresa, pueden hablar de ustedes, pero me molesta que se estén metiendo en mi vida. -No entendía de qué hablaba. -No tengo idea de quien esparció la mentira y no me pondré a investigar, pero es un rotundo no, no estoy en una relación con Christine y jamás hemos estado en una, no daré más detalles de mi vida privada, es lo único que tienen que saber, que no estoy en una relación amorosa con ella.

Ahora entendía todo, Hiddleston se hizo paso entre los empleados y cuando me vio al final de todos ellos me llamo.

-La quiero en mi oficina. -No parecía nada contento.

Fui detrás de él a su oficina.

-Cierre la puerta.

Dijo y yo hice lo que me pidió, sacó de su mini bar una botella de whisky con dos vasos, se sentó en su silla y sirvió en los dos vasos un poco de whisky, yo estaba sentada en una silla y Hiddleston me acercó el vaso.

-Jamás lo he probado.

-Es algo fuerte, por eso te serví un poco.

-Pero... estamos en el trabajo.

-Solo será un trago, además no vamos a conducir, no hay problema.

-Ok. -Tomé el vaso y me lo tomé, hice muecas, muy fuerte para mi gusto.

-¿Qué tal?

-Muy fuerte.

-Lo es.

-¿A qué se debe el trago?

-No tengo otra forma de iniciar una conversación personal contigo.

-¿Quiere desahogarse?

-No, solo quiero hablar un poco, ya casi cumples un año aquí.

-Si.

-Lo último que se de ti es que te mudaste.

-Pues realmente no tengo una vida tan emociónate, no tengo nada nuevo. -Miraba mi vaso con un chorrito de whisky mientras se lo decía.

-¿No has pensado en interesarse en alguien?

-Creo que eso no se piensa, simplemente llega o se presentan los sentimientos.

-Bueno... en ese caso, ¿se han presentado en ti los sentimientos para con alguien?

-No me siento cómoda hablando esto con usted, al final del día es mi jefe.

Me miró atenta por unos segundos, desvié la mirada, me ponía nerviosa.

-En este momento piensa que no soy tu jefe, soy solo Tom, ese Tom que te presto los brazos para llorar hace casi un año.

Puse cara pensativa, recordé por un instante ese momento.

-Bueno... sí, digamos que sí, últimamente me ha llamado alguien la atención, me pongo muy nerviosa cuando estoy en su presencia, es algo que no puedo explicar tan fácilmente.

-¿Entonces es un sí?

-Si.

-Quien diría que alguien como tú se enamorara.

-¿Cómo yo?

-No quiero ofenderte, solo no te podía imaginar enamorada.

-No es nada del otro mundo, además prefiero no pensar en él, es un amor imposible.

-¿Es casado? -Frunció el ceño.

-Oh no, no es casado, más bien dicho... es complicado, es tan reservado, tan cortante, puede tener a cualquier chica a su lado, ¿Por qué tenerme a mí?

-Creo que tienes unas expectativas sobre ti muy bajas.

-Eso parece.

-¿Has pensado en decírselo?

-No y no lo haría, no me atrevería a decir ni insinuar nada, de hecho, ni siquiera debí enamorarme de él, somos tan diferentes, no funcionaría lo nuestro.

-¿Entonces te rendirás a ese amor?

-Si, es lo mejor.

Desvié la mirada y vi a través de la gran ventana detrás de Hiddleston.

-Es lo mejor. -Dije sin mirarlo.