I

35 5 0
                                    

Primer día

Nunca me he considerado especialmente buena en algo. Quizá en fútbol, porque me gusta. Pero sé si me esforzará un poco, podría subir mis calificaciones.
Nunca me he esforzado realmente, y por esa misma razón considero un verdadero milagro haber pasado a este último año.
Los mismos compañeros, y los mismos profesores, podría sobrevivir otro año ¿No? Fácil.
Llamaban a lista, no prestaba atención a ese detalle, ya conocía a todos allí por lo que preferí seguir haciendo garabatos en mis nuevos cuadernos. Oía el eco de nombres que se me hacían conocidos cuando doblaba y rasgaba el papel.

-Jean Jensen-decía el titular de nuestro grupo

-Presente-dijo ella

Así siguió igual, Michael García, Carmen Cruz, Pilar Medina, Noa Sanz, Hugo Marín, Paula Palacios... Uh, soy yo.

-¿Paula Palacios?-volvió a preguntar el profesor, parecía más irritado que de costumbre

-Aquí-respondí de mala gana, vamos profe, me levanté a las 6 para no llegar tarde.

-Bien... ¿Ella Cala Reyes?

Y se hizo el silencio. Ella, la recordaba. Cabello corto sobre los hombros, ondulado y castaño, ojos oscuros, perforaciones en las orejas, bajita y nefelibata. Su nombre se me antojaba largo, aburrido y de mal gusto, cuando escuchaba su nombre pensaba "¿Qué rayos esperaban sus padres con eso? ¿Acaso no la querían, fue un accidente y por eso la castigaron con aquello?" O al menos esa era mi impresión.

-Ella no vendrá hoy, profesor-dijo Noa, su pupitre estaba diagonal al mío, arriba a la izquierda. Delante del pupitre vacío, que estaba al lado de mí.-Hoy vuelve de un viaje

-Ya veo, gracias Noa-el profesor tachó algo en su lista y se levantó.

En ese momento dejé de prestar atención y me perdí en mis pensamientos. Conocía a Ella desde primero de secundaria, nunca habíamos hablando mucho a pesar de estar cada año en la misma clase, decir que no habíamos tenido la oportunidad sería mentir, ya que tranquilamente podíamos ir al pupitre de la otra y entablar conversación, por lo que me excusaré con el hecho de que nuestras personalidades e intereses eran muy diferentes.
Y ahora me pregunto, ¿A dónde habrá ido? ¿Por qué no lo anunció por todos lados, presumiendo que saldría de la ciudad? ¡A todos nos gusta ser el centro de atención por cinco minutos!
Aunque sinceramente no me imagino a Ella haciendo un escándalo, por lo que he visto estos años es bastante tímida, excepto en los debates, es como la tigresa de oriente cuando hay debates. También es una buena estudiante, con un buen promedio y es cosas de gente inteligente. Pero sí tiene amigos, como Noa y Hugo, yo diría que Ella sabe ordenar sus prioridades.
Justo por esto me extrañé. A Reyes no le gustaba faltar a clases ¿Lo haría por un viaje? Creí que no sería capaz. Es decir, yo lo haría, no me gusta venir a clases, pero nunca pensé que Cala también pensaba como yo.

Bien, creo que me estoy dando demasiadas vueltas al asunto. Ella Cala Reyes faltó el primer día de clase. No necesita mi atención.

Y así, el asunto quedó olvidado para mí.

Ella no me hizo falta en ningún momento, mi día pasó cómo cualquier otro, y entre comer, dormir entre las clases y hacer bromas con Carmen, mi mejor amiga, se acabó el día.

Mientras guardaba las pocas cosas que había traído en mi mochila escuché el eco de una conversación que, a pesar de no ser de mi incumbencia, le dí mi atención.

-...Ya debe de estar llegando-dijo Hugo

-Sí, estoy ansiosa-Noa guardaba cuadernos y lápices en su pupitre-¿Dos semanas, quizá?

-Pues yo lo siento como un mes.

-Supongo... ¿Has sabido algo de Maxine?-en ese momento comenzaron a bajar la voz, y solo me llegaban fragmentos sin mucho sentido.

Tocó el timbre, y Hugo y Noa salieron del salón.
Por lo que entendí, Ella y Maxine se conocían de Dios sabe dónde, y tenían unos asuntos muy importantes que resolver cuando se vieran de nuevo.

Pero, algo me dice que no es sólo eso.











-Fxckrxccxn



𝕸𝖊𝖓𝖙𝖊 𝕯𝖊 𝕮𝖗𝖎𝖘𝖙𝖆𝖑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora