Encargado de otro mundo.

"encargándome de otro mundo" capitulo 25: Oposición.

Carecía de la información necesaria para entender la situación actual, sin embargo, mi deber como dios creador es presenciar y aprender de estas situaciones, con esto ocurriendo frente a mis ojos no era posible para mi alejarme y leerlo únicamente en un informe, por lo tanto mi elección era clara, dando la orden a Priscilla partimos rápidamente tras el dragón volador.

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Luego de un largo tiempo volando sobre praderas, bosques y colinas habíamos llegado a la ciudad, precisamente la capital de los hombres bestia lagarto. La capital se encontraba cerca del gran pantano que se hallaba en el continente, hogar de plantas y criaturas únicas de la región, esta posición podría resultar peligrosa para otras razas debido a la amenaza constante, sin embargo, los hombres lagarto habían sabido escabullirse y tender trampas utilizando sus habilidades de sigilo, las criaturas hostiles que pudieran presentarse solo entrarían en la boca del lobo al acercarse a la ciudad.

Las casas se encontraban hechas únicamente de roca, recubiertas de fango y musgo, haciéndolas parecer pequeñas protuberancias en el suelo, esto serviría como camuflaje en caso de que criaturas entraran en la ciudad. El peculiar diseño de estos hogares me hacía recordar el aspecto de los hogares hobbit, pudiendo tener múltiples habitaciones bajo tierra.

Cuando el dragón descendió llegamos a lo que parecía ser el castillo de la ciudad, el tamaño de la entrada de este edificio subterráneo era muchas veces mayor a las que lo rodeaban. Luego de la sorpresa al ver los niños lagarto realice algunos pequeños cambios a la leyes físicas, ahora el camuflaje completo de los lagarto no me afectaba, por lo que pude presenciar como múltiples guardias se hallaban posicionados por la ciudad, sin embargo, la mayor cantidad de ellos resguardaban meticulosamente el edificio en el cual ingresamos.

Luego de ingresar y descender por múltiples habitaciones habíamos llegado a lo que parecía una sala de operaciones, podían observarse múltiples pergaminos de cuero en mesas y paredes. En la habitación se hallaban diversos individuos de pie, la mayoría eran lagartos, pero también habían hombre bestias de otros tipos, incluso un enano se hallaba entre ellos.

"HEMOS VUELTO". Dijo uno de los niños lagarto, este no sobresalía en apariencia sobre los otros, pero pude reconocer que fue el primero en atacar durante la emboscada.

"¡HERMANA!". Grito una pequeña niña de los hombres bestia león, mientras corría a brazos de la princesa rescatada.

"BIEN HECHO HIJO, SABIA QUE PODRIAS CUMPLIR TU MISION, ESTOY SATISFECHO". Decía el hombre lagarto más anciano de la habitación, dirigiéndose al niño que había anunciado su regreso.

No pude evitar sorprenderme, La razón por la que el habla de los hombres bestia es torpe radicaba en la ley de comunicación, esta ley física aplicada al planeta permitía que las diferentes razas pudieran entenderse como si hablaran el mismo idioma, aunque claramente este no era el caso, esto era debido a que los hombres bestia se comunicarían con gruñido o bufidos, sería la ley impuesta la que los convertiría en palabra, el hecho de poder comunicarse con tanta nitidez significaba que se había invertido tiempo en aprender y expresar adecuadamente cada sonido para ser comprendido, durante este milenio probablemente la realeza bestia había dominado este arte.

Mientras me perdía en mis pensamientos la princesa cautiva y su pequeña hermana caminaron hacia la pareja de hombres bestia león frente a ellos, al verse estos se dieron un fuerte abrazo y lágrimas caían por sus mejillas, claramente eran los padres de la princesa que había sido capturada por los humanos.

"Rey Lirón, he cumplido mi tarea, espero cumpla con su promesa". Dijo una figura femenina acercándose al rey que aun abrazaba a su hija, esta era teressa, la mujer dragón que había vuelto a su forma humana.