1 de septiembre.
Comienzan las clases.
Mi primer año en Hogwarts.
No estaba para nada nerviosa, ignoraba en que casa tendría que estar, pero aún así, me sentía bien, sin ninguna atadura.
Pensé que el Sombrero Seleccionador me mandaría a la que fuera más adecuada para mí.Mis padres me llevaron a la estación de King's Cross.
Nos dirigimos hacia las plataformas 9 y 10, donde detrás del muro se encontraría el tren que me llevaría a una de las mejores escuelas del mundo mágico.Me despedí de mi padre, estaría sin verle hasta junio, que es cuando finaliza el curso, sin contar con las vacaciones de Navidad y de Semana Santa.
Cargué mi equipaje y continué adelante con mi madre.
-Ve con decisión hacia la pared Cristina, solo así conseguirás pasar -me dijo
Juntas habíamos atravesado el muro.Me concentré, corrí hacia ella sin pensármelo dos veces, y sin darme cuenta, me encontraba ante el Expreso de Hogwarts.
Era enorme, de un color rojo escarlata bastante fuerte.
Nunca lo había visto tan de cerca, aunque sí por fotos que mi madre me enseñó alguna vez.Me besó en la frente y me dijo:
-Siempre hacia adelante cariño, nunca lo olvides
-¿Me escribirés verdad? -pregunté
-Por supuestoSubí al tren, era precioso por dentro.
Me senté en uno de los vagones más cercanos a la puerta por la que entré, me situé al lado de la ventana, y saludando a mi madre con entusiasmo y emoción, el tren inició su marcha.
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Expecto Patronum
FantasyCristina Cullen es una bruja de sangre mestiza. Fruto del amor entre un muggle y una bruja que le enseñó casi todos los secretos del mundo mágico. Once años después, Cristina recibe su esperadísima carta de admisión de Hogwarts. Muy ilusionada, esta...