Prostíbulo♡JimSu

23

24 de diciembre. Ya hacia meses que no tenia comunicación con Yoongi, y al principio el se decía a si mismo que no le importaba, pero cuando penetraba a un sujeto siempre, siempre veía su rostro. No podía pasar un día sin olvidarlo, pues ¿como? Vivió momentos muy icónicos en su vida con el a tan poco tiempo conociéndose.

Hoy era navidad, un día normal sin duda, o eso creía. Quería hacer la misma rutina de todo los días, levantarse, trabajar, comer, e ir de casería para irse a su casa y volver a repetir el ciclo.

- Jimin - el pelinegro se encontraba firmando unos documentos importantes, alzo la vista y se encontró a su divertido amiga.

- ¿Pasa algo Tae? — este se recargo en su separador y sonrió.

— ¿Que harás hoy? — sonríe.

— ¿Hoy? Pues lo mismo de todo los días — sonríe.

— ¿No iras a visitar ah... ?— Jimin alzo la cabeza al escuchar el suspenso.

— ¿Ah? — pregunta frunciendo el ceño.

— Tu sabes — Le señala con la mano — A tu ex novia, novio — Jimin quería golpearlo en la cara por atreverse a decir eso.

— ¿Que dijiste imbécil? — hablo molesto.

— Oye no te enojes — contesta mas relajado — Sólo quería afirmar si pasarías navidad con el — guarda sus manos en  sus bolsillos.

— Pues no lo se — guardó un segundo de silencio y se puso a pensar, ¿seria tan malo darle una sorpresa de navidad? — ¿Crees que quiera que vaya?

— Por supuesto Jimin — insiste Tae — saliendo del trabajo date un baño, consigue un lindo regalo y ve tras el — sonríe echandole ánimos a su amigo.

— Pues realmente no es una mala idea — ambos carcajean y continúan con su trabajo. Pero Jimin solo pensaba en que regalo le daría a Yoongi. 

Sin duda tenía que ser muy especial

Se encontraba en un centro comercial en el centro de la ciudad, quería comprarle algo sencillo a Yoongi, pero significativo. Ya sea un collar o una pulsera significativa, o ropa, ¿a quien no le gusta la ropa? Mientras subía las escaleras eléctricas pensaba en como seria su encuentro, lo vería después de meses, y no de una buena forma. Pero también cabía la posibilidad de que Yoongi lo mandara a la mierda por lo que le hizo, o que el ya tuviera a alguien mas. Pero tenia que pensar positivo.

Miro cada una de las prendas y objetos tras el cristal de las tiendas, pensando en que le podía dar. Se puso a pensar.

— Si yo fuera Yoongi, ¿que me regalaría? — pensó en voz alta. Pero se puso a pensar que si el estuviera en esa situación lo único que quería seria estar con el, no con el regalo.

Así que con planificación se adentro a varias tiendas de ropa masculina, le gustaba — las pocas veces — que Yoongi vestía con cosas holgadas, así que compro algunas sudaderas y camisas de buen visto.

Bajó las escaleras eléctricas, yendo al primer piso, para adentrarse a la tienda de regalos.

— Muchas gracias señorita — se despidió amablemente de la cajera, saliendo de ahí con una gran caja de regalo. Sin duda le encantaría a Yoongi verlo, y también la ropa.

— J-jim-min.... J-jim-min... S-si no me a-mas a m-mi — rasguña con fuerza inhumana sus muñecas provocándole un sangrado severo — N-no seras de n-nadie.... ¡De nadie!