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Los tres caminábamos a paso lento, con Larry en medio de Sal y yo.
Minutos antes al castaño se le había ocurrido la brillante idea de invitar al peliazul a su apartamento en los AD siendo que yo le había dicho que necesitaba hablar con él a solas.

Cuando entramos a la primera planta me quedé unos pasos atrás, observando como los dos seguían caminando, conversando animados.
    —¿___?— pregunta Larry, deteniendo su andar y volviéndose a mirarme— ¿pasa algo?
    — ¿Podemos hablar un minuto?— susurro dando dos pasos hacia él...
Se limita a asentir y se voltea hasta quedar frente a Fisher.
    —Hey dude, danos unos minutos, ¿vale?— le sonríe— ve abajo, te alcanzaremos de inmediato...

El peliazul pasea su mirada desde Larry hacia mi con lentitud, mantiene su mirada fija en la mía durante unos segundos y, luego de asentir, se aleja de nosotros.
Suspiro aliviada.

Al parecer me quedo durante unos segundos más viendo al contrario bajar por el ascensor, porque para cuando reacciono, la mano de Johnson se pase frente a mis ojos.
    — ¿Estás bien, no es así?— lo miro a los ojos y de inmediato una sensación cálida me recorre... Siempre me ha encantado la mirada de Larry— ¿Por qué odias a Sally, ____? Veo que lo miras cómo si quisieras darle un disparo...
    —No lo odio— susurro— Solo no lo paso desde esa vez, eso es todo.
    —Sally y Ash ya no están juntos, dude— dice riendo— Dejen ese odio de lado, ¿vale?

Entorno los ojos, él ríe y posa su mano en mi cabeza para comenzar a despeinarme el cabello.
    —Bueno, ¿qué era eso tan importante que querías decirme?
    — ¿Recuerdas eso que hablamos hace unas semanas?— desvío mi mirada de sus ojos, producto del nerviosismo— cuando Fisher se fue de viaje y nos quedamos conversando en tu casa del árbol...
    — Lo recuerdo...
    — Me gustas, Larry Johnson— suelto de una vez, sintiendo el calor apoderarse de mis mejillas— No me sentí capaz de decírtelo ese día pero te lo digo ahora, ya cumplí mi misión así que me largo...

Necesitaba huir antes de que todo mi rostro quedará cubierto por un suave tono carmín. Pero luego de dar algunos pasos sentí sus delgados brazos rodeándome por la cintura.
    — No tienes que huir ____, en serio— me suelta y yo me giro sobre mis pies lentamente para mirarlo de frente— No es como que no supiera que sientes algo... Te conozco hace años— ríe suavemente, acaricia mi mejilla— tú también me gustas, ¿vale?... Pero ahora realmente estar con alguien no está entre mis planes...

Mi expresión de emoción se va apagando hasta pasar a ser de tristeza, me limito a quedarme en silencio mientras los ojos comienzan a picarme.
     — No me malentiendas... La verdad es que no estoy muy bien, creo que eso lo sabes— sonríe melancólico— Prefiero sentirme tranquilo conmigo mismo antes de darme una oportunidad en eso de estar con alguien... Si no solo estaré contagiándote mi tristeza y eso es justamente lo que no quiero

Mi labio inferior tiembla levemente, en medio del impulso término dándole un abrazo, él acaricia mi cabello y suspira.
    — Vamos abajo, dude ¿bueno?— me sonríe y da unas palmaditas en mi espalda.— No quiero que estés rara..., Realmente tengo mucho miedo de llegar a perderte, de que nuestra amistad se arruine... Dame un tiempo...

Sonrío levemente y doy un pequeño golpe en su hombro
    —Está bien, hombre... No nos compliquemos más— hago un movimiento con la cabeza indicando el ascensor— ¿vamos?

Purpose || Larry FaceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora