Capítulo 64

3.8K 304 7
                                    

Los presos regresan a sus celdas y Juan nota la actitud de su amiga

- Ya que te resignaste a que los malos ganaran, haciendo que tu te quedes aquí por muchos años es mejor que pienses en realizar algún trabajo

- No gracias - agarró la foto que le entregó el capitán el primer día y la observó con detalle

- Sino es trabajo puedes enseñar

- ¿Enseñar qué?

- A cantar, ya que lo hacías tan bien en Colombia según tu

- No, para eso debería ser Poché, ella fue quien me enseño que se canta mejor desde el corazón que desde la garganta… yo no podría enseñar nada

- Piensatelo, así no vas a enloquecer aquí

Unas horas después los policías entran a la celda

- Daniela Calle, colocate el chaleco, tienes visita autorizada

- ¿Quién es?

- Si supiera se lo habría dicho ¿No cree?

Le lanzó el chaleco y ella se lo colocó, luego dio la espalda para que le colocaran las esposas mientras miraba a Juan

- Si es nuevamente Mario de esta si no creo que salga vivo

- Tranquilizate, no busques problemas

Se despidieron y Calle fue llevada al cuarto de visitas. Al llegar ve al sargento a cargo de su caso salir de ahí

- ¿Quién es?

- Es una buena visita - pasó por su lado y le dio unos golpecitos en el hombro - una hora tienen

Calle no entendió y siguió hacía el cuarto, cuando entró le parecía que era una alucinación, que su mente ya estaba empezando a jugar en su contra, sin embargo le fue inevitable no salir corriendo hacía su visitante pero fue sujetada por los guardias para quitarle las esposas, nuevamente fue a correr pero la sujetaron para quitarle  el chaleco antibalas, ahí si pudo ir a abrazar a su peliazul

- Eres tu mi amor

- Soy yo

Se separaron y Calle le tomó el rostro para después besarla

- Estás hermosa amor

- Tu estás…

- Dejémoslo así mejor

Ambas sonrieron para después tomar asiento. Poché le contó de los trámites que hizo para ir cuando la voz empieza a temblarle, así que Calle la abraza y prefiere cambiar de tema

- ¿Qué te ha parecido la ciudad?

- Enorme, muy bonita. He tenido algunos problemas con el idioma pero he logrado darme a entender

- Esa es mujer

- ¿Tu estás bien? ¿Por qué tienes que usar ese chaleco?

Calle notó preocupación en su voz y no quiso darle motivos para que empeorara su angustia, por lo cual no le contó del atentado

- Todos los debemos usar, es como uniforme, aunque solo a Juan y a mi nos lucen

- ¿Tu amigo está?

- Si, buen comportamiento de él y una ayudadita del capitán de mi caso, nos tienen juntos

- Pero que bueno

- La verdad si, algún día lo conocerás

- Eso esperó… por cierto aquí te mandaron nuestros amigos - Le entregó un sobre el cuál Calle abrió - son fotografías de todos, las cartas te las entregan luego de que las examinen, juntó con las demás cosas que te enviaron

- Son lo máximo ustedes… Adrián y su pequeña

- Ya ha crecido

- Eso veo… Juana y su cara de puño

- En la siguiente está sonriendo

Calle miró la siguiente y efectivamente estaba sonriendo, Poché la empezó a sentir triste por lo cual le pidió que las terminará de ver luego

- Sustente el trabajo que me ayudaste hacer para recuperar la materia… saqué 10

- ¿Qué? -Calle se levantó de su silla para ir a su lado y abrazarla - felicidades mi amor

- Quería conseguirlo para que estuvieras orgullosa de mi

- Tu hagas lo que hagas, yo siempre voy a estar orgullosa de ti

Siguieron hablando de todo hasta que Calle recordó su situación

- Amor tu tienes una vida por delante, sacale provecho

- ¿A qué te refieres?

- Ayer tuve mi audiencia y pronto me van a dictar sentencia y va a ser muy larga

- No amor, está injusticia contigo debe acabar

- No amor no va a ser así

- Entonces ahorraré lo más que pueda para viajar y verte nuevamente

- No voy a permitir eso

Calle se levanta y se aleja de ella dándole la espalda

- No de nuevo - Poché empieza a sentir el llanto en su rostro y se acerca a ella - no puedes separarnos, ¡No puedes dejarme!

- Si puedo - se da la vuelta y quedan de frente

- No es justo

- Claro que es justo… contigo, porque debes vivir, no pasar días en un hotel de quinta cerca de está prisión

- Es mi vida y yo decido - respiró profundo para controlar su llanto

- Te equivocas, yo decido si recibo las visitas… no te recibiré más nunca

- ¡No! Amor no lo hagas - el llanto regresó con aún mas fuerza - no

Calle le sujetó el rostro para verla a los ojos

- Tampoco me escribas porque no las leeré y las regresare

- No lo hagas

- Esa es tu mayor prueba de amor hacía mi, dejarme ir. Yo lo hice cuando te dejé en aquel pueblo y me capturaron, abandoné al amor de mi vida… ahora te toca a ti

- No, claro que no, jamás te dejaré

- Tu corazón es muy grande y tu eres… eres todo, encontrarás a quien amar nuevamente y vas a tener una bella família

Los intentos de Poché por dejar de llorar eran nulos, sin embargo seguía protestando ante la petición de Calle

- Tu eres mi mundo

- Y tu el mio pero ya te dejé todo dicho Poché… y voy a cumplir mi palabra

En ese momento entraron los guardias para anunciarles que se había acabado el tiempo pero Poché tomó a Calle entre sus brazos y no se apartaba, así que fueron por el sargento.

- Sargento a este rompecabezas le hace falta una pieza

- Si capitán pero no tenemos ni la mínima idea de donde buscarla y con todas las pruebas apuntando a Daniela, incluyendo su testimonio, estamos remando contra la marea

- Así es, pero no quiero tener en mi consciencia a una persona inocente en prisión por mi culpa

- Ya se ¿Y si le preguntamos a Poché?

- ¿La novia de Calle?

- Si, ella esta 100% segura de la inocencia de Daniela, tal vez porque sabe la verdad detras de todo esto

- O tal vez porque está ciegamente enamorada

- Bueno si… no sería un testimonio objetivo

- ¡Mi sargento! - entró un oficial corriendo a la oficina

- ¿Qué pasa?

- La señoríta Garzón no quiere irse

- No puede ser, me lleva…

- Vamos con la supuesta ayuda que íbamos a tener - le dijo el capitán

Mi Ángel CantanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora