I Love You

XXVI

Día 2:

A Namjoon le gustaría decir que vivir con Yoongi era encantador, pero, cada persona tenía su vida privada. Realmente agradecía que los Min lo recibieran siempre. Pero era hora de irse, de vivir su propia vida y darle a su hermano un lugar para llegar y quererlo siempre.

- muchas gracias señora - dijo apenado - esto es por el tiempo que pasé aquí.

- no te preocupes cariño - contestó la señora Min - ocúpalo en Tae y en tú mudanza: ustedes han sido amigos desde su infancia, ¿qué más puedo hacer por ti? Eres como mí otro hijo. Así que no te preocupes, esta bien.

- muchas gracias señora Min, se lo recompensaré, lo prometo.

- trabaja, estudia y cuida de Taehyung, de ese modo me sentiré más tranquila, ¿te parece?

- no se preocupe, esta bien, muchas gracias señora Min.

Fue cuando una leve silueta llegó con una tarta en sus manos a la ex casa suya, a la comida de despedida que había hecho la madre de Yoogi.

- pe-perdón por llegar tarde - dijo apenado - he traido un postre, espero ayudar aquí...

- ¿Jinie? - preguntó.

- si, perdón Namjoon, olvidé decirte que lo invité - aclaró Yoongi bajando las escaleras - ¿y Jimin?

- viene atrás, trae consigo las bebidas...

- iré a ayudarlo.

Namjoon se extrañó pero dejó el pastel en la cocina y atrajó a Seokjin por la cintura.

- señora Min, él es Kim Seokjin, mí novio - dijo sin rodeos y con una sonrisa.

- mucho gusto señora Min - respondió el nombrado - Namie me ha hablado mucho de usted.

- ese es mí muchacho - rió - cuídalo Jin, este niño es un cabezotas.

- Min, Min...no me averguenze por favor... - objetó el alfa.

- ¡Namie!

Seokjin siempre fue un buen cocinero.
Y lo demostró cuando, junto a Taehyung, Jimin y él prepararon el almuerzo con la señora Min en un abrir y cerrar de ojos; dejando con la boca abierta a los demás.

- wow, no conocía esas artes culinarias tuyas...Hyung...

- Ko-Kook aquí no - susurró - ¡estamos en la cocina!

Jungkook rió y besó en la mejilla a su novio.
Lo abrazó por la espalda y recostó la cabeza en el hombro del contrario, haciendo que este se sonrojara. Taehyung se dio la vuelta, con las manos llenas de pasta, Jungkook lo limpió con una toalla y le besó su nariz.

- ¿siempre debo cuidar de ti? - cuestionó.

- para algo eres mí novio, tonto.

- y para algo soy tú cuñado, Tae.

Era Jin, con los platos en mano.
Un pequeño silencio se empezó a instaurar sin mucho éxito, ya que el mayor se rió.

- ¡hyung! - exclamó Jungkook, abrazando al otro chico apenado.

- tranquilos, no le diré nada pero...ustedes se encargaran de decirselo a Nam.

Después de una rica comida y un poco de charla, la señora Min se excusó y junto a la nueva pareja salió a dar un paseo. Jimin y Yoongi fueron a comprar, dejando al alfa con su lindo omega.

- Namie, ¿vas a extrañar mucho a la señora Min?

- por supuesto, es como mí madre.

- hmn...y cuando yo ya no esté...¿me extrañarás?

- más de lo que te imaginas, Jinie.

Esta vez, el alfa se ocultó en los brazos del omega.

- Namie, no te asustes, yo te querré, siempre.

- lo sé, yo también pero...me da miedo, mucho miedo, de que te canses de esperarme o algo así.

- Namie, vamos - lo tomó del rostro - te quiero y te adoro, ¿cómo olvidarte? Eso no es posible.

- ¿y si te casas con tú ex?

- primero muerto antes que hacerlo.

Seokjin le dio un dulce beso en la frente y le sonrió.

- yo te amo, Kim Namjoon, y no me va a importar esperarte, ni ahora, ni nunca.