I Love You

Epílogo

La mañana a continuación fue exausta, llena de emociones y lágrimas de por medio.
Seokjin ya no se sentía atado a Ken, y eso le alegraba mucho. Por ello, cuando despertó, se extrañó al no ver a su esposo en la cama, así que bajó y lo encontró tomando café, mientras veía por la ventana. Se tiró a sus brazos cuando este lo notó y le extendió sus brazos tomándolo con  fuerza.

- ¡Primer día en nuestra nueva vida!

- Lo sé Jinie, yo también estoy muy feliz.

- ¡Te amor Nam!

- Yo también Jinie, yo también.

Al fin se habían mudado a aquella casa cerca del mar, con vista al gran océano y un pequeño poblado. Todos eran amables y muy amigables, Seokjin simplemente era feliz.

- Eres mí otra mitad, Nam - lo besó - y me escaparía feliz contigo siempre, ¡siempre!

- Gracias Seokjin - rió - muchas gracias por esto, por esta vida juntos. Quién sabe que sería de mí sin ti.

- Namjoon yo te am...

Se despertó.
Seokjin refregó sus ojos mientras se levantaba e iba detrás de aquel hermoso olor que provenía de parte de la cocina. Al ver a su esposo intentando cocinarle le llenó el corazón de alegría.

- ¿Qué pido hoy? - comentó en voz alta, provocando que su esposo se girara.

- Lo que tú quieras, mí príncipe.

- Pues... - avanzó y le besó la mejilla - huevos revueltos y tostadas, por favor.

- Exigente - le susurró el alfa.

- Así me amas - le contestó sentandose en una de las sillas del desayunador - por cierto, ¿te ha llamado Jackson?

- Sí, vendrán para tú cumpleaños.

- ¿Me harás fiesta?

- Solo si tú lo quieres cariño.

Seokjin asintió y sacó su nuevo celular, que no era el más lujoso o bueno, pero le servía y eso era mucho.

- Jimin vuelve mañana en la noche - advirtió - le diré a Yoongi que se le acaban sus días de soltería.

- Que cruel - tomó una taza - pero tienes razón. Además, el pequeño Jimin necesita a su alfa debido a su gestación.

- Me dijo que va a ser niño - aclaró el omega dejando el aparato de lado - ¿te imaginas a un pequeño Jimin con genio de Yoongi?

- ¿Qué tiene el carácter de Yoongi?

- Tiene mal carácter, y no es un secreto - recibió su café - pero si tiene cara de Jimin lo disculpo.

- Si que no tienes límites - inquirió Namjoon mientras servía el resto de comida.

- Ven acá.

El alfa se acercó y lo besó dulcemente en los labios, compartiendo una pequeña sonrisa secreta entre ellos.

- Deberías llamar a Jungkook.

- No - objetó - Namie, Taehyung dijo que regresa de su luna de miel pasado mañana, ¿les damos la bienvenida?

- Claro - se sentó en su frente - acabo mí turno y arreglamos todo, ¿si? - tomó su mano.

Volvió a asentir y le compartió sus fresas con crema batida, mientras proseguía picando. A Namjoon le gustaba ese ceño fruncido de su esposo cuando no le gustaba algo o cuando se enfadaba por mínimas cosas.

- Namie...

- ¿Si príncipe?

- ¿Cuándo... - lo miró - ...tendremos un cachorro?

Se detuvo, para luego besarle las manos y darle una suave sonrisa.

- Pronto cariño, y cuantos tú quieras.

- ¿Prometido?

- Prometido.

Lo alevantó y lo sentó a horcadas en sus piernas.

- ¿Q-Qué pasa, Namie?

- Te quiero cantar algo... - lo miró - vamos a mí estudio.

Lo cargó y lo llevó hasta ese pequeño espacio en donde, a veces, ambos solían ir a disfrutar de composiciones que hacía Namjoon. Este se acercó a el piano y empezó.

"Tu y yo
Somos como fuegos artificiales y sinfonías
Explotando en el cielo
Contigo, estoy vivo
Como todas las piezas perdidas de mi corazón
Finalmente colisionan..."

Esos ojos tan brillosos le hicieron sentirme mejor cuando llegó a la última estrofa.

" Eres la melodía perfecta
La única armonía
quiero oir
Eres mi parte favorita de mi
Contigo de pie a mi lado
No tengo nada que temer"

Y fue cuando se abrazó por su cuello mientras sollozaba en silencio. Lo acarició lentamente mientras le susurraba cosas al oído para calmarlo al ver el anillo en su dedo.

- ¡Namie! - suspiró - ¿serás siempre mi otra mitad...?

- Siempre - lo besó - en esta, y en la otra vida ¿si?

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I promise you.