CARAMELIZED LOVE ((MINV)) //FINALIZADA//

-8-

Min YoonGi estaba más que desesperado, estaba estresado y tenía muchas ganas de llorar.
Sabía de sobra que no era normal que su mejor amigo hubiera desaparecido así de la nada, incluso le extrañaba que ni siquiera le saludara por mensaje como lo hacía anteriormente.

Estaba seguro que alguien estaba atacando a su círculo cercano de amigos, a su familia, y si sus sospechas eran ciertas Park JiMin tenía algo que ver. Desde que aquel chico llegó a sus vidas se había desatado un caos.
Una amargura densa atacó su vida y la cubrió de colores obscuros quitando todo brillo y toda luz que le rodeaba. En TaeHyung y en SeokJin había encontrado una escapatoria, eran un escudo para cualquier mal que quisiera atacarlo, ellos eran su fuerte y él era un guerrero cansado de estar en el frente.
El chico se encontraba extremadamente perdido sin ellos dos, ambos estaban pasando por una situación difícil y eso empeoraba el estado de ánimo de Min ya que él no tenía ni la menor idea de dónde se encontraban ahora para ir a consolarlos y recuperar sus escudos.

Min tomó su chaqueta de cuero negra y se colocó sus botas militar antes de salir de su casa, no tenía ánimos para nada pero hacía días que no iba a visitar a su amigo al hospital y cada que iba una pequeña esperanza de que su amigo hablara sobre el tema nacía en él. El pelimenta tenía una fuerte creencia de que si Hobi hablaba le diría el paradero de Tae, y sabiendo dónde se encontraba sabría dónde estaba SeokJin.

—Hyung —Una vocecita al lado suyo le espantó en demasía, provocando que Min saltara de su lugar y acomodara una posición de defensa.

—Joder, Jeon no me asustes así. ¿Eres un maldito conejo que sale de cualquier hoyo del suelo o qué rayos? —Min se colocó su chamarra mientras veía molesto al menor que se encontraba frente suyo muriendo de vergüenza.

—Lo siento —Habló lentamente el chico—. Sólo quería saber si puedo acompañarlo a ver a Hoseok-hyung

—¿Cómo sabes que iré a ver a ese mocoso? —.

—Estaba pensando en fuerte, Hyung —. Jeon lo miraba con intensidad tratando de hacer ojitos de perrito para que le hiciera caso y lo dejara ir.

Min bufó y apartó la mirada, le hizo una seña a su menor para que se subiera a su carro y se pudieran ir.

—Nada de preguntas incómodas, Jeon —Cuando el menor asintió, Min se subió a su carro y lo encendió para encaminarse hacia el hospital.