La Tua Cantante (La Sangre que llama)

Capitulo V. El principe Oscuro

Linkanesan85 Nadiia_Valdivia AnyiiUchiha-Sempai AnyiiuchihaS berenicefragos

Sasuke no podría dejar de observar tras la cortina a aquella muchacha que había acudido al castillo para entrevistarse con su tío, el era un vampiro de mas de un milenio, podría ser joven en apariencia pero ya no lo era tanto, entonces ¿por que se sentía tan atraído hacia la joven? Sus instintos cobraron vida en cuanto inhaló el aroma de la chica, sintió tantas ganas de beber su sangre como si fuera un vampiro joven recién transformado, eso no era ya posible pero ese férreo impulso de saltar sobre ella y saborearla, siguió presente, vio el vehículo de su tío salir de la instancia, Yahiko era un fiel servidor de su familia, su tío le había encomendado que cuidara de la joven, lo cual le tenia sin cuidado pero... ¿y si el también se sentía atraído por la sangre de la joven? Estaba seguro que no podría controlarse y le mataría porque nadie podía tocar algo que era suyo, -suyo- medito esas palabras, como era posible que la considerara suya si ni siquiera le conocía, es mas no la había visto bien, solo sabía que tenia el cabello rosa, era mas baja que el y delgada.

-Sasuke ¿que haces? - su tío le llamo sorprendiendo al príncipe.

-Nada... Lloverá -afirmó, tratando así de justificar inútilmente el porque observaba tras la ventana.

-Si, lo se, cuando estas molesto haces llover, se que fue de tu desagrado que te diera los libros para la reunión de esta noche, pero al menos hubieras esperado a que mi preciosa invitada llegara a casa -sonrió maliciosamente, provocando descaradamente así a su sobrino.

-No te metas en mi cabeza, ya no soy un niño - le recrimino el príncipe, odiaba que su tío se metiera en su cabeza y leyera sus pensamientos.

-Para mi siempre seras un niño Sasuke y si aun no puedes lograr mantener a los demás lejos de tu mente, sigues siendo un niño débil, ella vendrá seguido al castillo, espero que controles tus impulsos idiotas y no molestes a mis visitas, puedes descansar hoy de la reunión pero la próxima semana tendrás que acudir a ella - Madara se retiró y dejo solo a su sobrino quien volvió su vista al horizonte, la dirección en que Yahiko había llevado a aquella joven.

-¿Le molesta la lluvia? - pregunto Yahiko a la pelirrosa, pues tras el espejo la vio inquieta.

-La lluvia en si no, pero odio los relámpagos, creo que son ruidosos y tenebrosos - afirmo logrando hacer sonreír al chofer.

-No se preocupe señorita, la tormenta pasara rápido.

-¿Como lo sabe? ¿Acaso es meteorólogo o algo así? - la respuesta de la chica lo hizo reír a carcajadas.

-Por supuesto que no, pero sabe en Rumania hay muchas leyendas ¿quiere que le comparta alguna?

-Realmente no estoy segura de querer saberlo, pero una de mía debilidades es ser curiosa así que si, supongo que si.

-Bueno, ¿ha escuchado hablar sobre el príncipe oscuro? - la chica negó - bueno, digamos que es el príncipe de las tinieblas.

-Dios, eso suena horrible - la chica se persignó - ¿esta hablando del diablo?

-No, que va, aunque molesto podría llegar a ser el mismo propio, el príncipe oscuro es el heredero a la corona de los vampiros, dicen que es de temperamento frío y que no muestra jamas sus sentimientos, pero cuando esta molesto hace llover lo suficiente para crear una tormenta.

-¿Entonces por ello es que lloverá? Eso es ridiculo.

-Quiza lo sea -se encogio de hombros el hombre.

-¿Y entonces porque me ha contado eso?

-Me agrada usted señorita Haruno, y al conde Madara por lo visto también le simpatizo, así que solo me queda decirle que tenga cuidado, trate de no hacer molestar al...

-¿A quien?

-A nadie en particular, me refiero a quien sea, ya sabe después de todo solo son leyendas pero uno nunca sabe quien o quienes esconden algo en esta ciudad.

-Lo dice como si usted fuera un hombre lobo, vampiro o algo así - comento incrédula ocasionando que aquel hombre riera y Sakura se uniera a su risa.

-Creo que hemos llegado, ha sido un placer traerla, pase buena noche.

-Gracias, igualmente - la joven se despido y entro a su apartamento.

La pelirrosa cerro con llave su apartamento, se quito su abrigo y dejó la libreta de notas en un sillón de su sala, entro al baño para lavarse las manos y escucho un ruido, se asusto y salio a ver que era.

Miau, miau, miau - un gato negro salto de la mesa de la cocina al piso.

-Estupido Sharingan, me has dado un susto de muerte gato tonto - la pelirrosa sonrió al ver su gato que ahora ronrroneaba sobre sus pies.

Después de la cena, subió a su habitación, la tormenta había cesado tal y como Yahiko había comentado, sin embargo los relámpagos seguían presentes, Sakura apago la luz de su habitación y se recostó en su cama, no podía conciliar el sueño, entonces vio que su ventana estaba abierta se levanto para cerrarla y vio una sombra, se asomo pero ya no vio nada, cerro la misma y volvió a acostarse, era obvio que era su imaginación dado que con la tormenta y a esa hora no podía haber nadie afuera.