La Tua Cantante (La Sangre que llama)

Capitulo VI. Su aroma

Linkanesan85 AnyiiUchiha-Sempai AnyiiuchihaS berenicefragos Nadiia_Valdivia

Sasuke no pudo evitar seguir a la joven, en cuanto su tío Madara había salido para reunirse con la orden del dragón, aprovecho para salir a buscarla, no le fue difícil seguir su rastro, dado que su aroma era inconfundible, era la primera vez en toda su vida de vampiro que se sentía tan atraído hacia una persona, sabia que su sangre no era rara, si no por el contrario era una simple orh+ la sangre común y universal, pero sin embargo, algo en ella le llamaba, no había probado aun su sangre pero sabia el tipo que corría por sus venas, se introdujo por la ventana, dado que ella no la había cerrado por completo, bajo con sigilo a pesar de su peso y estatura, entonces el pequeño gato negro se levanto y sus pelos se erizaron ante la presencia del príncipe, el azabache lo llamo solo con la mano y el felino se acercó obedientemente como si fuera su dueño, ronroneando y dejándose acariciar por el moreno, este lo levanto y coloco en sus brazos, Sakura se removió un poco y la sabana que la cubría se deslizo hacia la parte baja de sus piernas, Sasuke la observo atento entre la oscuridad, ella era pequeña y delgada, de cabello rosa ondulado y enormes pestañas que cubrían sus hermosos ojos, porque si bien los mantenía ahora cerrados, el príncipe apostaba a que eran hermosos, quizá azules topacio o unos verdes jade, sus labios rosados tan apetecibles y su cuello finamente delineado, tenia un pequeño lunar sobre el mismo y quiso besarle ahí.
Sasuke se acercó a la joven y aspiro su aroma una y otra vez, olía a shampoo y cerezas, pero el aroma latente de su sangre seguía ahí, tentándole a probarla a que incluso quizá le marcara.

Sakura se sentía cansada, durante la semana había intentado plasmar en su borrador lo que El Conde le había narrado, porque por alguna extraña razón sentía cierta empatia hacia el mismo, sobre todo después de que el le hubiera confesado sobre su amor fallido y un hijo perdido.

-Sakura - la voz de su editor en jefe resonaba por todo el estudio -Sakuraaaaa - volvió a insistir.

-Tan temprano y molestando -comento la pelirrosa, mientras dejaba su vaso de café en su escritorio y salia corriendo a la oficina del editor, ocasionando que su rubia amiga se riera.

-¿Me llamaba señor Azuma?

-Claro, he estado buscándola toda la mañana.

-¿Toda? Pero... Son las 8:15 y mi horario es a las 9:00 - comento la pelirrosa un poco exasperada.

-¿Enserio? Pero ¿y su reunión con El Conde?

-Son los jueves y... Hoy es martes, no teníamos nada agendado para hoy.

-Lo tiene señorita Haruno, le envíe un email explicándole todo.

-No, no lo hizo.

-Oh, pequeño detalle - menciono aquel hombre mientras observaba su ordenador - es verdad, lo olvide, bueno pero ya lo sabe, tiene una cita para la continuación de la entrevista dentro de 17 minutos.

-¿17 minutos? Pero, sera imposible llegar en dicho tiempo

-Pues si sigue aquí, le aseguro que sera peor, ande Haruno vaya y haga su trabajo.

Sakura salio de la oficina, tomo su bolso y se dirigió al castillo.

Al llegar al mismo El Conde la estaba esperando con una sonrisa tan distinguida de su persona, sería pero a la vez amable.

-Lamento tanto la demora, Azuma no me había dicho que había cambiado la cita para hoy - se justifico la joven.

-Descuide Sakura, llega justo a tiempo - comento El Conde cuando el príncipe entraba por la puerta principal -señorita ¿conoce usted ya a mi sobrino?