Stay Strong |SIN EDITAR| ©

Capítulo tres.

Cuando llegué de Festy'S mi mamá ya estaba en la casa, estaba sentada en el comedor con la mesa repleta de carpetas y papeles en total desorden, por su cara pude notar que tenía mucho sueño.

Pero claro que eso no es suficiente para Loren Feysson irse a descansar.

Siempre su puto trabajo por encima de todo.

Traté de subir a mi cuarto sin hacer el mínimo ruido que lograra avisarle que ya había llegado, no quería para nada preguntas que vinieran de ella.

¿Por qué Riley? Porque no le importan las respuestas.

—Riley ya te vi.

Escuché justo al tocar el primer escalón de la escalera hacia mi cuarto.

Me volteé y me acerqué un poco a ver que quería mi amada madre.

—Hola.

—¿Cómo te fue?

Preguntar sin verle a la cara a la persona a la que te diriges cae mal, aún seguía con la mirada en sus papeles.

Vamos, le interesa mi día.

—Mejor que estar aquí en casa, voy a darme una ducha, adiós.

Fingí una sonrisa y subí a mi cuarto sin esperar respuesta de ella.

Al parecer decirle que estuve mejor que en casa fue suficiente para que quitara la vista de sus papeles y me diera una mirada asesina.

¿Por qué mierda pregunta si no le importa lo que hago o dejo de hacer? Al fin y al cabo nunca le ha importado.

Fingir que somos una excelente familia a pesar de un divorcio gracias a una infidelidad por parte de ella no ayuda a mejorar las cosas.

¿Que la hace pensar que sí? Lo jode aún más.

Suelto un suspiro y me tumbo en mi cama. Siento que ella y yo si no cruzamos palabras nos llevamos mejor, hay veces que pienso que exagero en la forma en la que me molesto por sus comentarios pero es algo que no puedo controlar.

Quizás tengo mucha rabia guardada aún.

Quité pensamientos relacionados con nuestra relación madre e hija de mierda y me concentré en si ir o no a la fiesta de los Thorton.

Los Thorton eran los hermanos mas ricos del instituto.

Después de Sander claro.

Ellos darían una fiesta sin siquiera un motivo de festejo, la hacen una vez por mes. Digamos que solo quieren ver chicas por doquier y hacer competencia de quien liga más.

Si, así eran los Thorton.

Por mi parte mi autoestima de mierda sé que iba a joderme si iba, pero el saber que estaría con Sander y Nate me consolaba un poco. Claro que al encontrar chicas se perderían por unos minutos.

Digamos que estoy acostumbrada ya.

Tenia dos opciones, ir y distraerme un poco o quedarme un sábado en casa lidiando con mamá ya que estaría libre.

Espera ¿Qué?

Había olvidado por completo que ella estaría libre mañana.

No, sin duda alguna iré mañana a esa fiesta.

Ni de coña me quedo un día completo con mi mamá y su maratón de películas de los años 80.

Le llamaré a Sander.