𝙞𝙣𝙨𝙩𝙖𝙜𝙧𝙖𝙢𝙚𝙧 • ❛ 𝐡𝐨𝐩𝐞𝐯 ❜

Parte 13

TaeHyung se lleva al lado derecho del cuello, donde tiene aquél tatuaje que hace menos de seis meses atrás se había hecho. Un hermoso manda la que abarcaba tanto padre d su cuello como su hombro, y que, no iba a negar, lo hizo llorar de dolor.

Tal vez lo hace por instinto, ya que siente la pesada mirada de Jung, su compañero de trabajo, clavada en aquella área.

Había pasado ya una semana desde que llegó a su hogar y se encontró a JiSoo. No había intercambiado más que cortas frases y monosílabos con su (jodidamente atractivo) compañero.

Y eso hacía a Jung activar todas sus alertas. Su pequeño acosador no había estado acosándolo en diez días, y eso era muy, muy extraño.

¿Pero quien contaba los días? Por supuesto que HoSeok no, no señor.

Sin embargo, no pudo evitar mirar detalladamente al chico pelirrojo, pero su atención quedó clavada en ese precioso mandala del cual podía ver una buena parte gracias al corte bajo del cuello del uniforme. Mandalas, mandalas; esa palabra le hacía ruido.

“Me encantan los mandalas.”

Una vocecita suena en su cabeza diciendo esa frase, pero por más que intenta rascar entre las capaz de su memoria para encontrar al dueño de esa voz, no lo encuentra.

Tal vez sólo está soñando.

Sale de su pequeña ensoñación cuando TaeHyung lo llama.

—Hobi-hyung. —Un sentimiento de calidez lo embarga como cada vez que TaeHyung le dice “hyung” junto a ese soso apodo, pero esta vez con cierto toque de amargura por lo apagada que suena la voz del contrario. Ese no era TaeHyung—  Tenemos descanso. Es hora del almuerzo.

—Vamos juntos —dice sin detenerse a pensar lo que ha dicho, le ha salido tan espontaneo—, conozco un buen lugar. Yo invito.

La propuesta toma por sorpresa al más joven, pero no se niega. Al contrario, una pequeña chispa de emoción se hace notar en su mirada, y HoSeok se obliga a suprimir una sonrisa.

Es tan lindo volver a ver esa sonrisa geometrica.

Él no pensó eso, ¿o sí?

—Iré por mi abrigo. —informa TaeHyung, quien no tarda en desaparecer por la puerta que da hacia el area trasera del local.

Minutos despues ambos se encuentran caminando a la par en un silencio que se siente tenso e incómodo por las calles Sinsa-dong, Gangnam.

Terminan llegando a una hamburguesería que tiene muy buena fama en el área, y los ojitos de TaeHyung se iluminan. HoSeok puede jurar que incluso hay ángeles cantando sobre su cabeza de tomate.

Pues resultaba que las hamburguesas eran una de las comidas favoritas de TaeHyung, y aquel improvisado almuerzo juntos parece haber subido su animo.

Una vez ambos con sus respectivas bandejas, se sientan en una mesa. Uno frente al otro.

TaeHyung da la primera mordida a la hamburguesa, y su rostro es de puro placer.

—Parece como si estuvieras teniendo un multiorgasmo. —dice HoSeok, con una ligera sonrisa mientras moja una papa en salsa y se la lleva a la boca.

—Lo estoy teniendo. Es el mejor multiorgasmo del mundo.

—¿Mejor que en el sexo?

—Mejor que en el sexo —asegura. Toma su vaso y da un largo sorbo a su coca-cola—. Las hamburguesas son la razón de mi existencia.

—Pensé que esa era acosarme en instagram y robar mis estados en WhatSapp.

—También. —La sonrisa de TaeHyung no tiene precio, y es contagiosa, haciendo a HoSeok sonreír también.

Diablos, ese chiquillo estaba ablandando su corazón.

HoSeok estaba a punto de decir algo más cuando la atención del pelirrojo es robada por otro chico que parece entró al local cuando reconoció al de cabellos rojos.

—¡Hyung! ¡Vaya, cuanto tiempo!

—¡Kookie!

TaeHyung se levantó de un salto y prácticamente brincó sobre el recién llegado.

Un muchacho de cabello negro tinta, con la piel clara y ojos de bambi. TaeHyung parecía muy emocionado de verlo, por como se aferra al fibroso cuerpo del contrario.

Tenía cara de bebé, pero cuerpo de Daddy.

HoSeok ahoga sus pensamientos en sprite. Pobre del que hiciera enojar a ese muchacho, se quedaría con un buen recuerdo.

HoSeok desvía su mirada cuando la del recién llegado se clava en él. Intenta ignorarlo, pero es casi imposible pasar por alto que esos ojos negros y brillantes tienen toda su atención en su persona.

—¿HoSeok? ¿Hobi-hyung, es usted?