#2 Creo que siento alegria.

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Al dia siguiente me desperté temprano y fui al patio a caminar un poco pensando en todo el giro inesperado que termino dando mi vida, solo era un niño pero yo ya había vivido muchas cosas aun así  la señorita angela es buena pero no se por cuanto tiempo ya que nada es para siempre.

Angela se levantó en camisón estirandose para luego notar que Emilio no estaba, bajó lentamente llamandolo y el entró rapido viendola con ese camisón  color rosado que hacía denotar curvas grandes y perfectas.

-Dime ¿que haces afuera Emilio?-

-Perdón señorita no me sentía agusto, es la primera vez que duermo en una cama y mas con alguien.-

-No te preocupes-

Me abrazó  sientiendo tranquilidad y un olor bello a flores

-Ven te llevare a conocer la ciudad y de paso te dare ropa porque me importas mucho emilio.-

-Gracias -

Al paso de unas cuantas horas caminarón por las calles y Emilio se sentía asustado ya que esa gente en la calle lo conocía y se les hacia raro verlo con la sastre del pueblo, despues de tomarle medidas a Emilio en su negocio le hizo un traje a la medida de pantalón negro y camisa azul manga corta abotonada, zapatos y un  cinturon el cual le combinaba a la perfeccion.

-Listo Emilio, te ves precioso-

-G-gracias señorita Angela usted tambien se ve hermosa con ese vestido.-

Angela usaba un vestido color violeta con blanco, zapatillas y un velo. Después  de darle ropa a Emilio fue a un restaurante donde   probaron algo de sopa, luego  pan y por ultimo fuerón a camiar por el parque pero al dejar a Emilio solo una mujer se le acerca.

-Oye ¿eres el niño que me pidio  un pan hace semasnas?-

-Si... mm... no le pude agradecer por aquel pan que me regaló muchas gracias-

-No hay de que pero... es raro verte vestido asi, ¿a caso alguien te adopto?-

No queria decir quien era la que me adopto asi que todo se  torno a un silencio incomodo, la señora mas me insistia pero no sabia que hacer estaba aterrado hasta que llego Angela.

-oh... jijiji disculpe señora es mi sirviente-

-Mm... yo recuerdo que este niño vivia en la calle durante meses y...-

-No se preocupe lo adopte y me ayuda en mucho asi que no tiene porque enterarse de mas.-

Con una liguera risita se va con Emilio hasta su casa, Emilio nunca se sintió tan protejido en su vida y mientras mas se sentía seguro más se sentía feliz con Angela.
Al llegar a casa angela le enseño a limpiar la casa, y arreglar el jardin para que tuviera quehaceres y fuera un buen sirviente, al caer la noche  cenarón y tomaron un baño juntos, juguetearón con la espuma  y despues se  pusieron la pijama y despues durmiron de forma tranquila pero está vez Emilio durmio con una sonrisa.

A la mañana siguiente, Angela despertó muy temprano para darle una sorpresa a Emilio, lo dejó acostado en la cama, tan indefenso y tierno que daban ganas de pellizcar sus mejillas pero decidió ir a la cocina para preparar  unos panqueques para él, una  vez ya terminada la sospresa fue a despertarlo tranquilamente para verlo bostezar y mover su colita.

---buenos dias.--- Angela le acaricia el cabello.

---buenos dias señorita Angela, ¿durmió  bien?---

---si, pequeño, venn te prepare algo sólo para ti.---

Lo lleva tomandolo de su manita hasta la cocina y él se siente alegre de ver unos panqueques recien hechos con miel y mantequilla, Emilio pidió permiso para poder comerlos y su dueña accedio a ello, el se sienta poniendo una servilleta en su camisa y come de una forma adorable.

Mi ama y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora