Capítulo 5 "Piedras"

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Valentina POV

Llegar a Los Angeles no es tarea fácil, Juls ha soportado a estar manejando por todo el trayecto, no ha permitido que yo tome el volante, dice que con mi pequeño problema de hipersomnia tal vez nos estrellemos. No discutiré con ella, tiene toda la razón. En nuestra travesía nos quedamos sin batería y ni siquiera pude publicar esa linda foto del letrero de Las Vegas.

Ambas acordamos quedarnos en mi apartamento ya que ella no cree poder aguantar el manejar hasta el otro extremo de la ciudad que es donde tiene su casa. El que se aloje en la mía no representa algún problema, eso ya es normal, incluso uno de los cuartos de visita es completamente suyo por la cantidad de veces que viene, ya hasta parece que vive acá. Aunque confieso que si, varias veces se queda en mi apartamento y es porque me ha ayudado a escapar de fiestas en las que termino algo pasada de copas, ella me salva de los paparazzi que durante mucho tiempo me han querido sacar trapos sucios inexistentes al sol. 

Esto de ser una figura pública no siempre es el paraíso, tiene su lado difícil tomando en cuenta que soy una de las presentadoras, por no decir la única presentadora menor de 25 años a la  cual han dado relevancia por ser la cara millenial de una gran televisora como lo es NBC, soy la frescura que le faltaba al medio televisivo estadounidense que parecía irse a pique por lo cotidianamente aburrido que se había vuelto su programación, o al menos así lo era hasta que hace 3 años y tras graduarme de UC Berkeley en Periodismo fui reclutada por la televisora local de NBC en California. Comencé como corresponsal en San Francisco y todo el área de la bahía, tras ver que el rating del noticiero se incrementaba durante mi segmento, fui ascendida al foro en vivo y así llegué a ser la presentadora del noticiero estelar, el cual he mantenido con excelente números por año y medio.

Uno de mis grandes sueños es lograr estar en NBC News, en la sede de Nueva York, sé que no tengo la oportunidad de liderar el NBC Nightly, pero ¿qué tal Today Show? Estar ahí es ser un comunicador en toda la extensión de la palabra, es ser afortunada de pisar el Rockefeller Center y codearse con eminencias en el ramo como Mateo Luna, yo me quiero ver ahí, en la cima. 

— La que normalmente se pierde en sus pensamientos soy yo, ¿sucede algo? — Juliana pasa su mano frente a mi cara para despabilarme.

— Mira — le muestro el correo electrónico que me ha llegado de la oficina central de mi trabajo unas horas atrás.

Estimada Valentina Carvajal:

Se solicita su presencia para el día Lunes en las oficinas centrales de NBC 4 Southern California sobre asuntos de relevancia para su relación laboral con la cadena televisiva, esperando su puntual asistencia a las 8:00 am PST.

Sin más por el momento quedo de usted.

Atentamente

Robert Stan

— Entonces es eso. ¿Qué crees que quieran hablar contigo? — Juls comenta mientras estaciona el automóvil en la cochera.

— No lo sé, pero no creo poder dormir bien sabiendo esto, ¿y si me quieren despedir? — la miro mientras un bolo imaginario obstruye mi garganta.

— Hey, no creo que sea eso, lo has hecho muy bien este tiempo. He visto todos los días el noticiero y puedo confirmar que eres la mejor, todos hablan de lo buena que eres— apaga el motor del auto y me toma el rostro entre sus suaves manos mientras sus ojos cafés no dejan de mirarme.

— ¿En verdad los has visto? — le dedico una pequeña sonrisa.

— Cada uno de tus 387 noticieros. No me pierdo ver a mi chica brillar en pantalla — la castaña señala con el rostro serio.

— Ni yo llevo la cuenta de los programas, comenzaré a creer que en serio lo haces — ambas reímos tras varios segundos de que la tensión de mi nerviosismo inundara el interior del vehículo.

— Claro que lo hago, incluso había pensado en sorprenderte llevándote a cenar a un lindo lugar para celebrar tus 400 programas — su gesto de orgullo no se puede ocultar.

— Ahno, ¡se supone que es una sorpresa! ¿por qué me lo dices? — le doy un leve golpe con el hombro, el cual no logro hacerlo en su totalidad porque abre la puerta antes y sale del auto.

— Te lo dije porque estoy segura que no festejaras tus 400 programas porque te van a ascender, ok? — replica asomando su cabeza dentro del auto.

—¿Tan segura estás? — respondo tras salir del auto y dirigirme a la cajuela abierta a sacar el equipaje.

— Muy segura ya te dije, eres la mejor, ya te imaginé en Nueva York — hace un movimiento con las manos como si estuviera viendo el futuro.

— Ay, eres la única que cree en mí, por eso eres mi 'best friend forever' — corro para abrazarla y apretarle los cachetes, cosa que logro por su retardada reacción.

— OK, ok, con el abrazo era más que suficiente... y Eva también cree en tí — trata de mover su cara de entre mis manos —, mejor ayúdame a meter tu valija que parece lleno de piedras.

— No son piedras, son cosas necesarias.

— Como... ¿kit de piedras calientes para masaje geotermal? ¿Ves? ¡Literalmente son piedras! — muestra la caja blanca de la que leyó la etiqueta.

— Shhh, sabes que me estreso, las iba a usar — la miro de reojo al cerrar la cajuela.

— Aja si, ¿igual que este... — revisa la etiqueta de otra caja ahora negra —... set de biomagnetismo para chakras? ¿Es en serio?

— Soy una persona espiritual, no me culpes por querer mantenerme como un ser de luz — una cara del gato con botas es mi único recurso para evitar su enojo, siempre funciona.

— Ahhhh, a la próxima que salgamos de viaje juntas revisaré tu pequeño equipaje — con las manos hace ademán de ponerle comillas a las últimas dos palabras.

Juliana carga dos valijas y me deja dos más, las más pequeñas y ligeras, o sea las de ella, siempre hace lo mismo. Esperamos a que el elevador regrese a por nosotras, llegar al piso de mi apartamento no es complicado, solo son 5 niveles, pero ninguna piensa usar las escalera y menos con el equipaje y cansancio que tenemos.

Al abrir la puerta solo tiramos las valijas a un lado y nos lanzamos al sofá, el relor del peque{o buró de la sala señala que son las 3:50 de la madrugada, tengo menos de 3 horas para dormir y luego ir a esa junta de trabajo. Por lo que sé Juliana igual tiene que presentarse a primera hora en el bufete de abogados para el que trabaja.

Ninguna se molesta en dirigirse a nuestras habitaciones, simplemente nos acomodamos en el sofá como muchas veces lo hemos hecho en este tipo de situaciones, el cansancio es extremo y con solo acomodar el respaldo del sofá este se convierte en una cama lo suficientemente espaciosa para ambas dormir. Mañana será otro día.

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NA: ¡Chanchanchanchaaaan! Capítulo tempranero, solo por esta vez en Lunes y no en Martes, es porque ando de buenas.
He leido muchos comentarios de que les está gustando mi historia y no saben lo feliz que me siento, me hacen sentir que soy útil en la vida:') miles de gracias.

Nos leemos el martes de la próxima semana, les amo!!

¿Debería quedarse en Las Vegas? [Fic Juliantina AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora