Del Odio Al Amor (LECHU)

Capitulo 35

Machu

Claudio me estaba ayudando subir las escaleras de la casa cuando escuché a mi madre hablar y le hice una seña a Claudio para que me acerque un poco más a la puerta de la cocina para escuchar mejor.

—No, Rosario. Confío completamente en Claudio y Machu. Muchas gracias por dejarme ver a Claudio. No hay de que, Rosario. No, pero de verdad, gracias por cuidar a Claudio mientras estuvimos en gira. Sí, pues no podía cuidar a Machu y a Claudio mientras estaba en gira con RBD. Pero gracias por adoptarlo, me da mucho gusto ver como los mellizos crecieron juntos. No le comenté a Machu que Claudio era su hermano, ella seguramente está dormida, no me escucha.— espera un momento. ¿Claudio es mi hermano mellizo? Claudio me vea y yo le veo a él. Él me carga como un costal de papas y me metió en mi cuarto y me acostó en la cama.

—A ver si entendí. Vos sos mi hermana.— pregunta Claudio.

—Así es.

—Nosotros nacimos en Madrid mientras hacían la gira de RBD.

—También es cierto.

—Miguel es mi papá y no es Javier.

—Sip.

—Nuestros padres nos han mentido toda nuestras vidas.

—Técnicamente yo sí viví con mis padres biológicos.— luego Claudio me mira como si quería matarme.— Pero me han mentido con lo de que no eras mi hermano.

—Entonces soy mexicano y no argentino.

—Pues....creciste en Argentina, pero naciste en España, y tus padres son mexicanos así que.....¿sabes que? Mejor me callo.

—Sí, calladita te ves más bonita.— me dice Claudio, bueno, mi hermano.

—Pues...siempre te consideré como un hermano, y ahora lo eres. Cosas de la vida, ¿no?

—Machu, ¿crees que esto es chistoso?

—Hermanito, estoy peda, ¿de verdad piensas que voy a tomar esto en serio? Tú ni siquiera tomaste así que...quédate aquí y cuéntame que somos hermanos mañana porque creo que me olvidaré de todo.

—Ay Machu, ¿que voy a hacer contigo, hermanita?— me dice.

—Por lo menos lo aceptaste.

—¿No vas a dormir con pijama?— me pregunta Claudio.

—Solo no me mires.— le digo. Él se cierra los ojos y me cambio y me meto en la cama.— Puedes mirar, hermanito.

—Bueno, buenas noches, loca.— me dice y me quedo profundamente dormida.

Por fin el gran secreto familiar se salió a la luz. Quería esperar pero ustedes querían otro capítulo y yo quería agregar más drama pero estoy segura que está muy mal escrito