El corredor del laberinto: la cura mortal.

Problemas:

Ethan se quedó ayudando a Gally y a Newt, tenían que conseguir el suero, inyectárselo a Newt y llevar a todos los inmunes al autobús que Brenda había robado.

Mientras tanto, Thomas, Teresa y yo nos dirigíamos al ala médica, donde tenían a Minho. Para llegar más deprisa nos subimos al ascensor. Se me heló la piel cuando Janson paró las puertas para subirse con nosotros. Afortunadamente, Thomas y yo teníamos la cara cubierta y no podría distinguirnos.

- Trabajas hasta muy tarde. – Le dijo Janson a Teresa, haciendo caso omiso a los dos "soldados" que estaban detrás suya.

- Sí. – Le contestó ella, dejando escapar una risita nerviosa, que Janson asoció al comentario que había hecho, pues no dijo nada al respecto, siguió con la conversación:

- Es increíble ver como trabajas para encontrar una cura. ¿Sabes? Cuando Emily trabajaba con nosotros era igual de decidida.

Me estremecí ante su comentario, aún quería encontrar una cura, pero nunca imaginé que hubiese empleado los mismos métodos que Cruel.

- Oye, de amigo a amigo, los drones han detectado a Thomas fuera de la ciudad. – Le dijo Janson a Teresa, lo que él no sabía era que estaba más cerca de lo que pensaba.

El rostro de Teresa se volvió más serio, miró a Janson con firmeza:

- ¿Le matarías si lo vieses?

- Probablemente. – Le respondió Janson con una ligera sonrisa que intentaba ocultar.

Noté como Thomas se pegaba más el arma al cuerpo y dirigía la mano hacia el gatillo, esperaba que fuese listo y no hiciese ninguna tontería.

- A quién no mataría sería a Emily, es muy útil; y seguro que si la vieses podrías convencerla de que volviese a trabajar con nosotros.

Esa vez fui yo la que estuvo tentada de disparar contra el perverso hombre que tenía en frente.

- Me bajo aquí. – Se despidió Teresa, dirigiéndole una furiosa mirada a Janson antes de salir del ascensor.

Le seguí tan rápido como pude, si me quedaba más tiempo ahí Janson no saldría vivo. Thomas tardó un poco más en seguirnos, se preocupó de darle un golpe a Janson a la vez que salía.

Ya estábamos en la misma planta que Minho, todo parecía ir de acuerdo a lo que habíamos planeado. Desgraciadamente, se nos acabó la suerte cuando nos volvimos a encontrar con Janson, esta vez rodeado de verdaderos soldados de Cruel.

- Debí haberlo imaginado. He de reconocer que os he subestimado, ¿de quién fue la idea? – Nos preguntó.

Nos apuntaba con una pistola, me costaba pensar en una escapatoria. Thomas se quitó el casco y cogió a Teresa mientras le apuntaba en la cabeza. Suponía que quería ganar tiempo, pero no sabía si así lo iba a conseguir.

- Adelante, dispara. – Le animó Janson. – No serás capaz. – Le dijo con una sonrisa.

Eso estaba claro, Thomas nunca sería capaz de matar a Teresa.

Cuando suponía que todo estaba perdido Teresa se soltó del agarre de Thomas, nos empujó hacia atrás y presionó un botón. Instantáneamente unas puertas transparentes se cerraron delante de nosotros, dejándonos a salvo de los disparos de Janson y sus secuaces. Teresa empezó a andar al lado contrario, no sabía lo que tenía en mente.

Thomas y yo salimos corriendo de allí, sabíamos que no se darían por vencidos hasta tenernos y debíamos encontrar a Minho antes de que eso pasase.