Felix entró prácticamente de puntillas. Todo estaba en silencio y tenía miedo de que al mínimo ruido alguien podría despertarse. No podía permitir que nadie se enterase de su pequeño secreto.
Así que deslizándose a través de la obertura de la puerta de sus hyungs se coló; sintiendo sus pies helarse por el frío suelo, contrastando con su pijama afelpado de ositos que lo rodeaba, creándole una sensación de calidez. Pero no era suficiente para dormir, Felix necesitaba de Hyunjin para dormir.
Se paró un momento para observar la habitación, comprobando que nadie lo había observado y después de afirmar que era así –sonrió por su logro- y se agachó a la cama donde quería llegar, tumbándose a su lado y abrigándose con las frazadas.
Suspiró aspirando el aroma dulzón que Hyunjin desprendía, sintiendo que lo envolvía lentamente, que lo acobijaba para dormir y que poco a poco sus párpados se cerraban y su boca se entreabría, dispuesto para dormir.
Porque cómo cada noche, Felix se colaba en la cama de Hyunjin y lo abrazaba, como si fuera su peluche; su pequeño refugio caprichoso. Y así noche tras noche.
***
Seungmin se levantó el primero ese día, destensándose los músculos estirándolos. Se talló suavemente los ojos antes de encontrarse dónde estaba.
Colocó las palmas de sus manos en el colchón antes de levantarse y bajar por la escalera de su litera. Aún Chan no había abierto las cortinas por la que solo una pequeña raja de luz se colaba en la habitación, así que la oscuridad aún consumía lentamente el ambiente.
Bajó poco a poco por las escaleras para quedarse un segundo mirando la cama de su compañero y ahora… ¿acompañante? ¿Qué hacía Felix ahí durmiendo?
Los observó, incapaz de apartar la mirada de ahí: Felix se encontraba envuelto entre los brazos del mayor, y si no hubiese sido por el inconfundible pelo del australiano no hubiera sabido que era el pecoso, pues todo su cuerpo se encontraba debajo de las sábanas.
Sintiendo algo picar en su interior, cómo un continuo raspon en sus mejillas, tensó la mandíbula, sintiendo escocer sus dedos y los cerró en un puño y entornó los ojos al ver la escena. No entendía por qué se sentía así, pero algo dentro suyo martilleaba pensando que él quería estar ahí también.
Su corazón dio un pequeño golpe cuando escuchó ese pensamiento. No era algo muy propio de él, imaginando escenas fuera de contexto: sí sabía que Hyunjin y Felix eran muy amigos, pero… no, Seungmin, no.
“¡no es lo que crees!” y palmeándose las mejillas con las palmas de sus manos se dijo que debía desechar esa idea que tanto ardor en su interior causaba.
Pero no pudo, se pasó todo el día pensando en ello.
Viéndolos en la distancia, disfrutando el uno del otro, regalándose tontas sonrisas que se alegraban mutuamente. Rozándose sin querer e inconscientemente buscando el contacto del otro.
Y Seungmin eso lo veía y no podía evitar pucherear al verlos. ¡Él también quería eso!
Así que frustrado por el día de hoy se fue a dormir, queriéndose olvidar de sus tontos pensamientos. Pero, aunque fue el primero en irse, dejándolos a todos un poco confundidos, no pudo dormir. De hecho, fue el último en mantenerse en pie.
Y con la cabeza carcomiéndole decidió intentar lo que llevaba tanto esperando. Bajando lentamente por las escaleras se agachó en el hueco de Hyunjin e imitando los movimientos de Felix se colocó a su lado, un poco tímido. Incapaz de mirar a su acompañante se giró, con literalmente sus mejillas ardiendo.
Cuando sintió unos brazos que lo rodeaban sintió hasta el último poro de su piel cremar en sus latidos acelerados e irrefrenables.
—¿hmmm...? ¿Seungmin...? —su voz ronca hablando en susurros aún lo desesperó más. —¿qué estás haciendo aquí?
Seungmin se apoyó en su codo, girándose para encararlo.
—y-yo... A-ah... ayer vi a Felix durmiendo contigo y... —continuó hablando en susurros, pues no querían hablar alto para no despertar a Chan o Minho. —yo también quería...
Hyunjin sonrió enternecido, dejandose caer en la cama suspirando. y cómo si fuese poco, en ese momento entró Felix.
—¿Seungmin? —el nombrado se escondió en las sábanas avergonzado, ¿qué debía decir en esos momentos?
—quería dormir con nosotros, Lix —el rubio se sorprendió dulcemente, apoyando una mano en el colchón para con la otra acariciarle el pelo.
—claro —Hyunjin lo destapó un poco dejando que las sábanas se deslizaran por su pelo cereza y lo descubriese.
Y dejandose mecer por la verguenza y la ilusión, Seungmin se acomodó contra el pecho de Hyunjin, con Felix delante suyo sonriendole.
La calidez de los cuerpos de ambos chicos inundó a Seungmin, y regresándole la sonrisa a Felix murmuró;
—descansen —sus ojos se cerraron, y no pudo evitar aumentar su sonrisa cuando los brazos de Hyunjin lo apretaron más contra sí.
Otro par de brazos lo rodeó, haciendo que su corazón se sintiera calientito y querido. Suaves caricias se hicieron presentes cuando la respiración de Seungmin se volvió tranquila y pausada.
—¿no es adorable? —entre susurros preguntó Felix hacia Hyunjin.
—lo es, en verdad me ha sorprendido un poco que quisiese dormir con nosotros —la voz de Hyunjin le hizo cosquillas en la nuca. Los mayores creían que ya estaba completamente dormido.
—¿por qué crees que haya sido?
—no pienses tanto y duerme, Lix —un sonido cansado salió desde la garganta de Jin— buenas noches.
—buenas noches
Seungmin creyó que todo terminaría ahí, y que por fin se irán todos a dormir, pero en vez de eso, sintió como Hyunjin se removía un poco y seguido unos esponjosos y cálidos labios se posaron en su mejilla.
—oye, a mi no me das besitos para dormir —apostaba a que el australiano tenía un puchero en sus labios en ese momento.
—duerme ya, es tarde —Hyunjin ocultó su rostro en la espalda de Seungmin.
Esperaba que ninguno sintiera lo acelerados que estaban los latidos de su corazón y le pequeña tensión que se formó en su cuerpo.
Felix se rindió y se acurrucó también contra él antes de dejar un cálido besito de buenas noches en su frente.
Desde esa noche, la cama de Seungmin era usada muy pocas veces. Los tres chicos tomaron la costumbre de dormir juntos y acurrucados, era como un pequeño secreto entre los tres, no tenían la necesidad de contarle a nadie más, porque mientras ellos tres estuviesen juntos, nada más importaba.
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y esta es la razón por la que -SoftHan y yo no podemos hablar xDDDD porque empezamos hablando de lo bien que debe oler Hyunjin y acabamos haciendo un AU xD.
