Ese momento desde que el se fue, fueron cuestiones de horas pensar, pensar.
Anhelaba estar junto a el.
¿Pero a que costo? ¿Seria capaz de hacer eso? ¿De negarme la posibilidad de pasar mas tiempo a solas incluso a mi misma para criar bebes? Por todo el… ¿Y si eran gemelos? ¿trillizos?.
No, no sabia que decidir.
Pasaron los días y las semanas, y como le extrañaba incluso el momento en el que el lograba hacerme molestar con ganas.
Esa noche era viernes, finalmente.
Lucia últimamente estaba demasiado ocupada con vaya a saber quien, al parecer un amigo con el que se la lleva demasiado bien últimamente, conociéndola, terminarían por tener algo mas.
Trate de distraerme en otros asuntos, trabajos, comida, y definitivamente era imposible. Me fui a la tv y ahora si, era definitivo.
Era imposible
Estaban pasando mi película favorita, y para el aumento de mi dolor, la que me recordaba a Raul.
Mi Raul.
El fantasma de la opera. El que una vez fue mi fantasma y ahora amenaza con ser un espectro de mentira si lo dejaba ir.
Rei con muchas partes que no recordaba, y esa mujer tan horrenda con voz de sapo, como reia de su supuesto talento que realmente era un tormento para todos en ese teatro. Me fije entonces en los parecidos que realmente pudiéramos tener, Christine y yo, y era cierto… era como un borreguito indefenso y Raul quien buscaba la defensa… pero por mas que intentara verlo en el rostro del Raul de la película, siempre, siempre lo veía en el rostro de Eric, en el rostro del famoso fantasma de la opera.
Disfrute cada parte de la película e incluso aunque no lo creía llegue a relajarme. Disfrute cada momento de tranquilidad.
Hasta la escena donde ella debía arriesgarse a buscarlo en escena para que le apresaran.
El punto sin retorno.
Al verlo allí, Oh por todo el… era definitivo solo podía verlo como el fantasma, pero el fantasma que amaba.
En ese momento la puerta sono y camine rápidamente para abrir y volver. Pero quede paralizada al fijarme quien era. Era Raul.
Mire al televisor y luego a el, nuevamente mire al televisor y temblé caminando hacia adentro del apartamento nuevamente.
- ¿Por qué sigues haciendo esto? ¿Por qué? – sonreí.
- No puedo alejarme de ti…
Toque su rostro y oi a Christine las palabras mágicas.
- Sin otros sueños en su corazón, que el de amar… - susurre.
Mis ojos se volvieron lagrimosos y le di la espalda para que no viera que lloraba por su desdicha.
Le mire por instantes entonces el miro al televisor y sonrio, mientras se acercaba suavemente a mi y acariciaba mi columna. El fantasma cantaba y cada palabra se frotaba a mi piel marcándola a fuego como sus dedos.
“ Tu has venido aquí… a buscar tu mas profundo anhelo, ese profundo deseo que hasta ahora has vivido en silencio”
- En silencio… - susurro al mismo tiempo que la tv colocandome uno de sus dedos sobre mis labios para callarme mientras me llevaba tomada de la mano suavemente a la puerta de la habitación.
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Saga Delucios 1: Besos de un Inmortal (Completada) SE PUEDE LEER SIN EL EPÍLOGO
ParanormalAmelia, una perfecta trabajadora una chica bien portada de la sociedad, hasta que un extraño ser aparece irrumpiendo sin previo aviso en todos los aspectos que antes eran privados en su vida. Cada vez es imposible volver la página atras haciendo que...