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Les juro que si tardábamos un poco más en llegar, me iban a tener que alzar y traerme hasta acá –dijo Becca tirándose a la cama, Eunice y yo solo reímos. Generalmente era Florencia quien dormía con nosotras, pero ante su ausencia, alguien debía completar el trío, las habitaciones eran así-

Eres una vaga, Becca y más te vale no quedarte dormida porque no pienso –Eunice rió ante mi habla y me extrañé hasta que noté lo mismo que ella. Becca estaba dormidísima.- Es la más vaga que existe.

Y yo la más hambrienta –dijo Eunice- iré a buscar algo ¿Vas?

Claro –dije y ambas bajamos, no sin encerrar a Becca, quien dormía, para que nadie fuera a entrar a nuestra habitación en nuestra ausencia. Precauciones.-

Tanto el equipo varonil y femenil de la Juventus se quedaban en el mismo hotel. Nuestro calendario era como el de ellos, el mismo rival, no siempre viajábamos pues había un par de equipos de la liga que aún no tenían equipo femenil. Al llegar al comedor nos topamos a algunos chicos a quienes saludamos amistosamente.

Hola –dijo Dybala poniéndose a mi lado-

Qué hay –dije amable y él sonrió-

¿Cenas? –preguntó-

Claro. Estoy acá con Eunice –recordé y presenté a mi compañera. Se saludaron y me dirigí con Dybala a pedir la comida ya que Eunice se había quedado conversando con Paolo De Ceglie, ambos defensas del equipo e italianos-

¿Y cómo te sientes en el equipo? –Me animé a preguntar al de Córdoba-

Muy bien –dijo con una bonita sonrisa- bueno, es mi primer viaje con el equipo, pero los chicos se esfuerzan con el español ante las cosas que no entiendo en Italiano –dijo divertido-

Ya pasará, cuando menos lo esperes, olvidarás cómo se habla el español –animé-

A ti no se te ha olvidado –recalcó y ambos reímos. Seguido de eso nos entregaron nuestros platos y comenzamos a comer entre buenas charlas, se acercaron más chicos del equipo a saludarme con forme iban entrando al comedor-

Dónde está esa loca amiga tuya –me dijo Emil Audero, portero del equipo-

¿Becca? –él asintió- apenas llegamos y se ha quedado dormida la muy vaga –dije y los dos chicos rieron. Emil se retiró luego de una sonrisa y un pequeño golpe a la cabeza a Paulo-

Emil salió con Becca cuando ella llegó al equipo –conté a Paulo- pero no supieron manejarlo y mejor quedaron como muy buenos amigos con derecho –Dybala soltó una carcajada que hizo voltear a unos tantos, pero luego volvieron a lo suyo-

No conozco a otra chica del equipo que no seas tú, y tu amiga –señaló con la mirada a Eunice-

Descuida, ya las conocerás. Convivimos mucho entre todos –dije y él asintió- pero bueno, atente que apenas Becca te vea y no dejará de coquetear –el río-

Espero y no conocerla cuando esté Anto cerca –bromeó-

Por cierto, tu novia es bellísima –alagué y él sonrió agradecido- además tiene el bello acento argentino y me encanta porque me hizo sentir como si estuviera allá

¿Fue muy difícil para ti? –curioseó-

No te imaginas cuánto. Pero bueno, tenía 17 apenas cuando vine. Si no hubiera sido porque las chicas me hicieron sentir como si fuéramos familia apenas llegué, estoy segura que hubiera vuelto a Argentina para dedicarme a cualquier otra cosa –conté-

Bue, te entiendo –dijo Paulo- se me hace difícil estar lejos de todo, pero los chicos son geniales y hacen que se me olvide. Además es genial tener a alguien en el equipo que es Argentina también.

Claro. Podemos quedar con tu novia y preparar mates en los días libres, como si estuviéramos en América –animé y él asintió feliz-

Aunque continuamos comiendo, me vi molestada por un WhatsApp

Becca😻⚽️

-¿Dónde estás?

-Euni y yo bajamos a cenar.

-Oh, eres la más traidora que existe en el mundo. No hay forma que te perdone.

Escribiendo.

-Bueno, solo si me traes algo de cenar, no quiero bajar.

-Eres una tonta, pero sí, ahorita te llevo algo. Está bueno el menú.

-Geniaaal, no tardes mucho.

-Noop, ya subo.

Lo siguiente que hice fue pedir un platillo para Becca, cuando me lo entregaron me despedí de Paulo quien se incorporó a los chicos y Eunice y yo subimos a la habitación, podrían pensar que Becca era muy molesta y vaga, pero yo la amaba demasiado. Era mi mejor amiga, pues llegamos en la misma temporada al equipo, aunque ella era un año mayor que yo. En cambio Eunice tenía apenas una temporada pero era una gran chica.








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