Las joyas del fútbol Argentino, Varonil y Femenil están por toparse en el club italiano que creyó en ellos, pero estar tan lejos de casa no será fácil.
Romi, ¿cómo te sientes ante el partidazo que has firmado? –Me dijo la periodista-
Te juro que no he sabido como lo hice, solo sentía el balón en mis pies y daba todo lo que tenía, estar acá sola, sin mi familia a pesar de los años sigue siendo difícil y esto es por ellos que nunca dejan de creer en mí –dije emocionada-
Es la mejor que existe –dijeron Becca y Florencia robando cámara y entregándome el balón, seguido de esto las chicas llegaron a bañarme y hasta la periodista resultó mojada, me despedí de ella rápido y fui con mis amigas al vestuario-
Nos tomó un poco más de tiempo por la emoción que teníamos todas, al final salimos y los chicos ya nos esperaban para ir al camión.
Te juro que Messi es poco con lo que tú eres –me dijo Paulo dándome un abrazo- felicidades crack.
Gracias Paulo –dije feliz y comenzamos a caminar juntos al camión, me ayudó a sostener el balón que habían firmado todas las chicas. Al salir del estadio había bastante gente intentando hacerse foto con nosotras o los chicos.
Eh, Paulo, Romi, he venido desde argentina a verles –gritó un chico y por su acento era claro que era argentino-
Gracias, gracias –dijo mientras le firmábamos la camiseta y le pedíamos al guardia que lo dejara acercarse, me abrazó con fuerza y luego a Paulo.- los admiro tanto –dijo casi llorando de la emoción y me reí de ternura-
¿Foto? –le animé, tal vez ni se acordaba y en un rato se iba a arrepentir-
Se sacó una foto conmigo y luego con Paulo y terminamos pidiéndole al guardia que nos hiciera una foto a los 3, nos despedimos y luego de otras fotos con más fans subimos al camión, nos sentamos igual que cuando venimos al estadio, pero esta vez Becca y Florencia se sentaron frente a nosotros.
Tenemos que celebrar, ah –dijo Becca, mi amiga era una argüendera-
Eso es seguro, los chicos juegan hasta mañana por la noche y seguro los dejan salir con nosotras –habló esta vez Florencia-
Pues yo me apunto a todo –dijo Paulo y chocó manos con mis amigas-
El camino de regreso fue muy divertido, las chicas venían cantando y divirtiéndose y demás esta decir que sí nos habían autorizado salir en la noche.
Eh, Romi –me dijo Paulo tapando su celular- Es Anto y te quiere felicitar, ¿tomas la llamada?
Seguro –dije amable y tomé el celular de Paulo. Agradecí a Antonella por sus buenas vibras y felicitaciones y devolví el teléfono a Paulo bajo la fuerte mirada de Becca. El resto del camino de regreso estuvo hablando con ella.
Llegamos todos al hotel y luego de las advertencias de los técnicos sobre las borracheras fuimos a arreglarnos. Como estaba en la habitación sola me estaba haciendo algunas fotos cuando tocaron la puerta.
Eh, pasa –dije viendo a Paulo quien se veía realmente guapo-
Ya espero a los chicos para bajar pero se tardan años –dijo sentándose en la cama-
Yo termino de recoger –dije levantando de la cama el maquillaje y del piso la ropa-
Vení odiosa –dijo levantándose y poniéndose frente al peinador- hay que hacernos unas fotos –dijo y yo reí. Me pasó su celular y luego de varias fotos volví a terminar de recoger mientras él se quedaba clavado en el celular-
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PauloDybala10. Con esta crack que no quiere pasarme un poco de su talento⚽️, toca celebrar! 🎉 Te quiero Romi. ❤😚
Paulo había posteado en Instagram una foto conmigo y reímos juntos por su descripción. Luego bajamos juntos y los chicos comenzaban a llegar de apoco y finalmente nos fuimos a un antro de la ciudad que los chicos frecuentaban cuando estábamos acá.
Romi, Romi, Romi –comenzaron a corear Paulo y mis dos amigas mientras intentaban convencerme de empinarme la botella de vodka-
Están locos –dije riendo- pero daleeee –grité y ellos emocionados comenzaron a contar los segundos-
¡15, 16, 17, 18, 19, 20!–gritaron y alejé la botella de mi boca callándome unas gotas sobre mi ropa y todos gritaron emocionados, lo siguiente fue la botella con Becca, Florencia, Eunice, Paulo, Mario y Emil, gritábamos por cualquier cosa levantando las botellas y finalmente fuimos a bailar, los chicos se quedaron bebiendo y en cambio nosotras comenzamos a encender la pista de baile con buenos pasos de reggaetón, la mejor sin duda era Becca que atraía muchísimas miradas, me sentí un poco mareada y fui a sentarme pero solo estaban Paulo y Emil, no sé a dónde se habían ido los demás. Emil no le sacaba los ojos de encima a Becca más que para ver feo a los hombres que la miraban.
Ya vuelvo –nos dijo para ir a la pista de baile y nosotros solo asentimos-
¿Un poco? –dijo Paulo ofreciéndome más vodka y acepté, comenzamos a reírnos de cualquier cosa, se notaba la borrachera-
No pasamos mucho tiempo más cuando volvimos al hotel, a todos se nos notaba que se nos había pasado la mano con el alcohol pero intentábamos disimular.
Te acompaño –dijo dybala cuando el ascensor se detuvo en el piso de mi habitación, él estaba en otro piso-
