Naruto: mira a las estrellas

Capítulo 151: Los altramuces.

Capítulo 151 - Los altramuces

Ver como los huesos se rompen y se remodelan a sí mismos es algo horrible de presenciar. Por más doloroso que pueda ser, no hay nada peor que algo que te esté sucediendo y que no puedas controlar. Comenzó cuando el viejo reloj del abuelo comenzó a sonar. Al hacerlo, Kiba sintió que su corazón se detenía momentáneamente, antes de que el dolor interminable se apoderara de él.

Akumaru gimió como un perro golpeado, sus pequeños huesos fueron rotos y remodelados, mientras su piel y pelaje se arrastraban y moldeaban. Kiba observó cómo sus garras se ennegrecían y sus dedos se alargaban, llegando a los aspectos más desagradables del extraño valle. El pelaje marrón oscuro brotó de su piel, un proceso doloroso cuando sus músculos comenzaron a contraerse, dejándolo inmóvil, pero no sin sentirlo, no, lo sintió todo.

No podía gritar, el tejido en su garganta se estaba expandiendo y cambiando de forma, bloqueando la capacidad de gritar o incluso respirar. La piel se rasgó, los huesos se rompieron, y Kiba estaba en el infierno. Si solo hubiera podido gritar, podría haber pedido ayuda, alertado a alguien de lo que fuera que le estaba pasando.

¿Por qué no puedo gritar ?, pensó frenéticamente el muchacho, aunque no tenía esperanza de que todavía estaba al tanto de lo que le estaba pasando, este cambio antinatural y doloroso. Su sangre hervía bajo su piel, mientras su cuerpo se convertía en arcilla, siendo moldeado por manos invisibles en una nueva forma, una forma horrible.

Sin embargo, el dolor y el sufrimiento no fueron lo peor, ni lo peor fue la cosa que estaba sobre él, esa cosa de lobo que se mantuvo erguida como un hombre, con las enormes alas de un murciélago o un dragón. Los ojos de un Apex Predator mirándolo fijamente, observando como si esta forma antinatural de carne y hueso no fueran más que una mera curiosidad.

Kiba, por razones que no podía saber, ni sabía qué era esta cosa feroz e imponente, y la llamó Ngirrth'lu, La cosa del lobo, El acosador en las nieves, El que caza. Y el Wolf-Thing solo vio estos cambios, no se movió, era como una estatua, rígida, inmóvil, sin parpadear, sin respirar.

Y cuando el Viejo comenzó a abalanzarse sobre él, Kiba sintió que el dolor se desvanecía, y cuando su garganta tomó una nueva forma, Kiba descubrió que podía hacer un sonido, aunque no era un grito. El distintivo aullido de un lobo salió de su garganta justo cuando el viejo reloj del abuelo daba las doce.

Naruto pensó más rápido que el humano promedio, una vez que escuchó el aullido, sus pensamientos se aceleraron. Podía decir que este era el aullido de un lobo, una criatura que no se veía en estas partes de la tierra de fuego, inmediatamente después de hacer esa observación su mente vagó a la siguiente fuente probable. El sonido provenía del distrito de Inuzuka, y no era extraño que importaran lobos, de hecho, era común, aunque nunca se quedaron con los lobos, solo les permitían aparearse con sus ninkin.

Así que la mente de Naruto vagó más, hasta que recordó algo, Kiba y Akumaru fueron mordidos por algo, y aunque Naruto nunca identificó qué fue lo que hizo el hecho, podía adivinar que tenía planes para Kiba. La única pregunta era qué dios consideraría que Kiba valía más su tiempo que la mayoría.

Kiba era un miembro del clan Inuzuka, un clan infame por su combate usando ninkin, Kiba también tenía el contrato de Invocación del Lobo y aunque era posible que Kiba convocara a uno de sus Lobos, no había ninguna razón para ello, nadie estaba atacando, y asumiendo que lo haría para demostrarle a su familia que indudablemente lo haría el primer día que llegaron.

Después de pensar todo esto, Naruto llegó a una hipótesis. Kiba fue atacado por Ngirrth'lu, la Cosa del Lobo, y si ese fuera el caso, sería muy probable que convirtiera a Kiba en uno de sus sirvientes de criaturas como el hombre lobo conocidas como los Lupin Ones.