Capítulo 30

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Pov Ana:

Christian ha estado raro toda la tarde, se que algo anda mal. Desde que salimos de clases su mal humor se hizo presenté.

-¿Me vas decir que te pasa? - preguntó con los brazos cruzados, mirándolo desde el umbral de la puerta de nuestra habitación

El hace una seña, para que me acerqué y así lo hago. Me siento en su regazo y acarició su cabello.

-Hoy me ha tocado un compañero algo particular - Su mandíbula se aprieta al decir esas palabras y yo lo miró con mi ceño fruncido.

-¿Particular?, no lo entiendo

-El te desea Anastasia, quiere lo que es mío y yo no lo puedo permitir - Su voz suena ronca y en menos de lo que imaginé lo tengo besando mis labios de una marena hambrienta y desesperada - Eres mía Anastasia, solo mía - sus labios van a mi cuello y lo lame y mordizquea provocando que gima en su oído.

Nuestra ropa poco a poco fue desapareciendo de nuestros cuerpos, sus manos acarician mis pechos provocandome altas olas de placer, mete un pezón a su boca y lo muerde hsciendome gritar de placer, su mano se desliza lentamente por mi vientre hasta llegar a mi feminidad.

El acaricia mi clítoris y yo arqueo mi espalda producto del placer. Christian besa mis labios mordiendo mi labio inferior a su pasó.

-Esto es mío - dice en mis labios, mientras introduce dos dedos en mi interior.

Christian sigue haciendo maravillas con sus dedos en mi interior y de un momento a otro me encuentro estallando en un alucinante orgasmo mientras gritó su nombre.

El se desvite rápidamente bajo mi atenta y hambrienta mirada, se acomoda entre mis piernas y poco a poco va a entrando en mi. Sus movimientos son lentos y suaves, es una tortura placentera.

-Eres mía Anastasia - sus movimientos se hicieron mas bruscos al decir esas palabras.

Tomo su rostro y lo beso con desesperación, ahogando nuestros gemidos con ese beso. Aprieto mis paredes vaginales en señal de que mi orgasmo está a punto de llegar.

-Juntos nena - Sus palabras hacen magia en mi, porque de solo escucharlo estallo en un alucinante orgasmo.

***

Estoy en la cocina, preparando la cena, decidí preparar algo simple y rapido. Macarrones con queso que sé que a Christian le encanta.

Sonrío al sentir sus brazos rodear mi cintura, el besa mi mejilla es un gesto tan dulce de su parte.

-Eso huele delicioso.  ¿Quieres que te ayude en algo? - por supuesto el sabe que le daré el trabajo más simple.

-Puedes preparar la mesa, en lo que yo sirvo.

La cena está deliciosa, Christian me a comentado que entrara a trabajar con su padre, es un trabajo de medio tiempo pero le pagarán bien

-¿Qué te pasa? - La voz de Christian me saca de mis pensamientos y me hace volver a la realidad.

-No puedo dejar de pensar en la muerte de Leila - Las lágrimas salen de mi antes de retenerlas - Ella realmente había cambiado, estaba arrepentida y llega Jack y le arrebata la vida.

-No pienses en eso por favor - El me sienta en su regazo y me abraza dándome la fuerza que necesito.

-Ella no merecía eso, se que nos hizo cosas malas, pero no sé merecía ese final. Solo espero poder hacer justicia... Por ella y por mi.

***

Los corredores de la escuela están vacíos, ya que están todos en clases. La maestra de inglés, me pidió que viniera por unos libros, de saber que eran tantos hubiera pedido ayuda. 

Mi cuerpo choca contra algo o más bien dicho alguien, provocando que todos los libros se cayeran. Me apresuró a recogerlos. Levantó mi vista al ver que alguien me está ayudando. Es un chico apuesto, su cabello negro hacen resaltar sus ojos verdes, su mirada me pone nerviosa, algo incómoda a decir verdad.

El me ayuda levantarme y me entrega los libros, me mira de una manera que me pone los pelos de puntas y sin decir palabra alguna el se va. ¿Qué rayos fue eso?.

***

*en algún lugar de Seattle*

Llegó a mi cuarto de hotel completamente agotado, pido servicio a la habitación y mientras espero decido llamar a mi jefe.

-¿Jack?, Está todo listo, me encontré con ella - Puedo sentir su sonrisa satisfactoria al decir esas palabras

-Muy bien, ahora solo tienes que ganarte su confianza, pero está vez ve por una presa más grande... - Mi ceño se frunce ante sus palabras 

-¿A qué te refieres? - Preguntó confundido.

-Anastasia es muy ingenua, te ganarías su confianza fácilmente, quiero que vayas por Christian. Quiero que te hagas su amigo, su confidente. Qué conozcas todo sus secretos , su punto más débil.

-¿Y cuando logré ganarme su confianza, que harás?

-Acabare con el, con él y con esa perra de Ana. Así que ya sabes, si quieres recuperar a tu amada Leila, vas hacer todo lo que yo te diga. Tienes dos meses, si en dos meses no logras acercarte a Christian tu amada Leila morirá y está vez habló enserio.  - Siento el pitido señal de que a colgada, lanzó mi teléfono a la cama fuertemente y gritó de frustración.

Jack es un maldito psicópata, tengo que recuperar a Leila, pero no quiero lastimar a nadie, no es lo que quiere Leila y no es lo que quiero yo.


Possessive(Christian Y Ana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora