Possessive(Christian Y Ana)

Epilogo

Pov Christian:

Observo a mis hijos jugar felizmente por el enorme jardin mi pequeño Teddy ya tiene 5 años y mi princesita tiene 3 añitos, Phoebe es igual a Ana, con esos preciosos ojos azules y esa dulce sonrisa que tanto amo. Si hace unos años atrás me hubieran dicho que estaría felizmente casado y siendo un padre baboso no lo hubiera creído, pero ahora no imagino mi vida sin mi mujer y mis hijos.

He logrado muchas cosas en estos años, fundí mi propia empresa y ahora soy uno de los empresarios mas jóvenes y exitosos de todo Seatle, pero sin duda mi mayor logro es mi familia, compartir cada cosa con ellos, consentirlos y pasar cada momento con ellos hace que mi día a día valga la pena, las risas de mis hijos al jugar, la manera en la que me abrazan buscando protección, las caricias de mi mujer, sus besos y cada noche durmiendo junto a ella son mi mayor riqueza.

-¿Otra vez observando a sus hijos sr Grey? - Una sonrisa se apodere de mi al escuchar su voz, volteo a verla sin borrar la sonrisa de mi rostro

Se ve jodidamente hermosa con ese vestido azul que le resalta su enorme y hermosa panza de 7 meses, si bien me encanta tener hijos con Ana, decidimos que esta sería la ultima vez, ahora seremos padres de mellizos un niño y una niña, si bien la noticia nos tomo de sorpresa no pudimos evitar llorar de la emoción. Teddy y Phoebe son los mas feliz y es que están entusiasmado porque van a tener hermanitos con quien jugar

-No puedo evitarlo, así como tampoco puedo evitar mirarte a ti - Anastasia sonríe con ese dulce sonrojo tan típico de ella. Ella se acerca a mi y toma mi rostro, para acercarlo a ella y besarme de manera dulce, pero lujuriosa.

-Te amo - Ana me sonríe al decir esas palabras, palabras que nunca me cansare de oír

-Yo también te amo, mas de lo que puedas imaginar.

Vuelvo a besar sus labios y la atraigo mas a mi, nos separamos por la maldita falta de aire. Ana se gana frente a mi, mis brazos la rodean por la espalda y mis manos acarician su vientre sintiendo las pequeñas pataditas de nuestros bebés. Observamos a Teddy y a Phoebe jugar con el pequeño perro que mi padre  les obsequio, al principio no lo quería, pero mis hijos estaban feliz y no les puedo negar nada a ellos.

Mi vida a cambiado por completo desde que llego Ana a ella y es algo que no cambiaría por nada en el mundo, y es que cada día y noche junto a ella me confirma que yo soy completamente suyo y que ella es completamente mía.