Capitulo 29

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Pov Christian:

Hace una semana que nos mudamos a nuestro apartamento con Ana, a los padres de Ana, no les agrado mucho la idea, pero entendieron y aceptaron que lo que quiere Anastasia es estar acá conmigo. La policía sigue detrás de Jack, Leila dijo que iba a ayudar en todo lo que pudiera, ella es nuestra carnada, para contactar con el hijo de puta de Jack

-Un dolar por tus pensamientos - Una dulce voz, me saca de mis pensamientos, levanto mi vista y me encuentro a Ana en el umbral de la puerta de nuestra habitación.

Recorro su cuerpo con mi mirada y sonrió, al ver que aún se sigue sonrojando, como la primera vez que la vi. Esta vistiendo una de mis camisetas, se le a vuelto una costumbre usarlas y no me quejo, le quedan mejores a ella, que a mi

-Creo, que me tendrías que dar una fortuna - Ella se ríe por mis palabras y se acerca a mi hasta sentarse en mi regazo

-Estas pensando en Jack - No fue una pregunta, fue una afirmación, ella me conoce mejor que nadie y eso aveces e asusta - Se que estas asustado, yo también lo estoy, pero lo van a atrapar

-Quiero matarlo con mis propias manos por su culpa casi los pierdo. Estuve viendo en una agonía sin ti Anastasia, no dormía, pensando en lo que ese hijo de puta te estaba haciendo, no podía comer pensando en que posiblemente ese infeliz no te daba de comer, no podía respirar en paz porque me imaginaba a ese infeliz dañándote. Tenía pesadillas por las noches, era una puta tortura - Sus manos acarician mi rostro y yo cierro mis ojos disfrutando de su tacto.

-Estoy aquí mi amor, estamos aquí contigo - Sus palabras me reconfortar por completo, ella esta aquí conmigo y eso es lo que importa

Antes de que ella diga o haga algo me encuentro besando sus labios de una forma dulce apasionada, ella se acomoda en mi regazo rodeando mi cintura con sus piernas, el beso de aposo se fue volviendo mas intenso nuestras lenguas se abrazan con la otra, me separo de ella, quitando le la camiseta y tirándola a alguna parte de la habitación.

La recuesto en la cama y reparto besos, por todo su abdomen, provocando que suelte leves gemido de placer. Mi boca vuelve a sus labios y la beso, mientras que con mis manos recorro su cuerpo.

Sus gemidos y suspiros son música para mis oídos, su suave piel en contacto con la mía es un choque eléctrico de energía y el sabor de sus labios es mi droga. Una de mis manos desciende por el valle de sus senos, hasta llegar a su feminidad vestida solamente por su ropa interior. Sus gemidos son mas altos, al sentir que acaricio la parte mas sensible de su cuerpo.

-Estas lista, para mi bebé - Digo en sus labios, mientras hundo dos de mis dedos en ella.

Me separo de ella y me desvisto bajo su atenta mirada, Anastasia muerde su labio y sin pensarlo vuelvo a besar su boca, mientras me acomodo entre sus piernas y me hundo en ella de una manera lenta y placentera. Nuestros gemidos son lo único que se escuchan en nuestra habitación. 

De apoco mis movimientos se volvieron mas intensos y rápidos, Anastasia enreda sus dedos en mi cabello tirándome mas hacia ella para juntar nuestros labios. Siento sus paredes contraerse en señal de que su orgasmo esta por llegar. Llevo sus manos sobre su cabeza y sigo deleitándome de ella, haciendo que ambos lleguemos a nuestro tan esperado orgasmo. Esto es lo bueno de vivir con ella. Podemos follar donde queramos y cuando queramos.

***

Ustedes tienen que hacer una fiesta de inaguracion, ¿como es posible, que aún no conozcamos su casa? - Mia se sienta junto a Kate y frente a mi y Anastasia.

Ella nos mira de forma acusatoria, pero no me intimida. Estamos en la cafetería de la escuela tengo a Ana sentada en mi regazo, estamos junto a Jose, Alex Kate Mia y... Leila, resulta que Anastasia no convenció, para que le demos una oportunidad y se la dimos, aunque yo la tengo a prueba todavía. 

-Mía tiene razón, nadie conoce su apartamento, tiene que hacer una fiesta - Esta vez es Kate la que habla, joder si fuera por ella habría fiesta cada fin de semana

-Yo prefiero que sea algo mas intimo y privado. Solo ustedes y nuestros padres - Asiento con la cabeza, dándole la razón a Ana.

Se que un montón de adolescentes borrachos sería muy estresante para Anastasia, Mia y Kate hacen una mueca y luego de unos segundos terminan aceptando.

-Bueno, cambiando de tema ¿cuando sabrán el sexo de mi ahijado o ahijada? - Responde Alex con una sonrisa y en menos de lo pensado, los chicos se encuentran discutiendo sobre quien sera el padrino y la madrina de nuestro bebé. 

El timbre suena terminando con la disputa que había entre nuestros amigos, voy a dejar a Anastasia a su salón, ya que a ella le toca química y a mi lenguas. Solo compartimos la clase de matematica y esa es la unica razón, por la cual se a vuelto mi asignatura favorita.

-No olvides llamarme si te sientes mal - La abrazo por su cintura y ella pasa sus brazos sobre mis hombros

-Prometo que llamare, ahora ve antes de que llegue tarde - Ella besa mis labios y se separa de inmediato, dejándome con ganas de mas. 

Camino hacia mi salón, no sin antes asegurarme de que Ana este bien y segura, llego a mi aula correspondiente y me siento junto a un chico, que nunca había visto. Tiene el cabello negro, sus ojo son de un verde intenso, tiene un aro en su labio inferior, viste con unos jeans azule y una sudadera gris. 

Me siento a su lado y no me molesto en establecer una conversación con el de apoco el aula se va llenando de alumnos en espera de la maestra. Siento su mirada fijamente puesta en mi y eso me irrita

-Una foto dura mas - Digo, sin dejar de mirar al frente y con mi voz mas dura de lo que pretendía

Siento su risa en mi oído y eso me provoca golpearlo, ¿que mierda le pasa a este tipo?. Joder Christian respira, le prometiste a Anastasia que no te ibas a meter en problema, es solo un niñato en busca de atención

-Eres muy poca cosa para ella - ¿Que mierda acaba de decir? Joder que no sea lo que estoy pensando

-¿Que mierda dijiste? - Me paro de mi silla y de un solo movimiento, lo tengo agarrado sobre su sudadera acorralándolo sobre la pared - Repite la mierda que dijiste

El sonríe de una manera burlesca, provocando que la ira aumente en mi, sus ojos verdes de miran fijamente, pero esta lejos de intimidarme

-Eres muy poca cosa para ella Grey - No le doy tiempo a que reaccione, porque mi puño impacta contra su rostro, haciendo que pierda el equilibrio y caiga.

Siento la mirada de todos en nosotros, pero me importa una mierda, ellos sabe que no le conviene intervenir, el se pone de pie con la intención de seguir con la pelea, pero la llegada de la maestra arruina sus planes, vuelve a dedicarme una sonrisa burlesca, antes de ponerse la capucha de su sudadera y sentarse en su lugar.

***

La tarde se paso mas rápido de lo que pensé, no le he hablado a Anastasia, sobre mi pequeña pelea en clase y es mejor así. Se que ese imbécil se refería a Anastasia y por mas que me cueste admitirlo el tiene razón, soy muy poca cosa para Anastasia, pero si se piensa que la dejare, para que el o cualquier imbécil la tenga esta equivocado.

La puerta de nuestra habitación se abre rápidamente sacándome de mis pensamientos, me asusto al ver a Anastasia parada frente a ella, tiene el teléfono en la mano, su respiración es agitada y esta inmóvil en su lugar.

-La policía llamo - Me paro de inmediato y me acerco a ella - Encontraron el cuerpo de una chica a las afuera de la ciudad

-¿Y eso que tiene que ver, con nosotros? - Una mezcla de confusión y de miedo se apodera de mi

-Es Leila

Possessive(Christian Y Ana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora