Días de Descanso

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Todos estaban muy emocionados por pasar el fin de semana juntos, para poder divertirse como si estuviéramos en vacaciones, yo tenía que guardar reposo así que me quede en mi habitación a estudiar, Me asome por la ventana donde podía ver perfectamente a todos mis compañeros.

Toru y Jiro alimentaban pájaros con Koda. Ojiro, Asui y Uraraka preparaban aperitivos con Sato. Bakugo descansaba en la sombra de un árbol, el resto jugaba bolei, Tenya era el arbitro, Mineta espiaba a las chicas desde un arbusto y Shoto estaba en su habitación al igual que yo, aviso que no saldría por que se sentía cansado, tal ves debería de ir a agradecerle por ayudarme en el entrenamiento, no solo por que no me atraparan si no por curarme o para que no aplastaran las rocas, creo que si iré a darle las gracias.

Voy a su habitación y toco la puerta, no contesta, toco de nuevo, tal ves no este, toco por ultima ves pero sin nada de éxito así que decido asomarme para ver si lo veo, abro la puerta poco a poco y veo que todo esta oscuro pero escucho unos quejidos muy bajos, me da curiosidad entro a la habitación la cual esta decorada muy tradicional, veo a Todoroki acostado sobre su futón dándole la espalda a la entrada y es el que se queja en bajo, me pongo de rodillas para acercarme a el de manera discreta pero creo que no ha notado mi parecencia, me acerco hasta llegar a pisar la orilla de su futón con mis rodillas y le asomo por arriba de su hombro para ver si esta despierto. Creo que esta dormido pero se queja mucho y sale vapor de su boca, decido revisarlo y mi sorpresa es que su lado derecho que es de donde congela estaba hirviendo y el izquierdo estaba congelado como si se hubieran invertido sus poderes, creo que así es como se manifiesta si fiebre.

Izuku: No te preocupes iré a buscar ayuda.

Me levante rápidamente y corrí hacia la entrada cuando un camino que se creo en el suelo congelo por completo la entrada impidiéndome salir, Todoroki había volteado y con los ojos entre abiertos me miraba, la palma de su mano estaba sobre el suelo haciendo el camino de hielo, maldición ya nos encerró, creo que me quedare con el hasta que se sienta mejor y pueda abrir la puerta, busco cosas en su habitación que me sean útiles, por suerte tiene suficientes cosas como si le pasara constantemente y tuviera todo preparado.

Recargo su cabeza sobre mis piernas y lo coloco boca arriba y le coloco toallas húmedas en la frente. Anocheció y ya le había bajado la fiebre y logro dormir tranquilo, se veía demasiado lindo y la entrada ya casi estaba descongelada así que ya podía darle unos cuantos golpes para poder salir pero intentando no despertar a Todoroki.

Baje al comedor donde ya estaban todos esperándome para cenar y luego cada quien se dirigió a su habitación para descansar, yo iré a darme una vuelta a media noche a la habitación de Todoroki para asegurarme de que siga bien.



Yo por ti mi vida doyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora