Como quieres que te escriba una canción

Barcelona es más bonita aún

P.O.V Irene

Son escasos los centímetros que me separan de ella, de aquel huracán que en cuestión de semanas se llevó todo de mi. Recuerdo cada uno de los segundo que me trajeron hasta aquí, recuerdo cómo empezó todo y como continuó hasta el dia de hoy. Todo está mucho más claro, pero no me atrevo a dar el paso. Siempre he sido una mujer lanzada, sin miedo a nada, era capaz de poner un pie delante, dar el paso y comerme el mundo, pero con ella todo es distinto, me hago pequeña a su lado, porque no he conocido mujer más fuerte ni valiente que ella, aunque ahora nos comamos con la mirada y ni ella ni yo seamos capaces de dar el paso. La miro de arriba a abajo, se muerde el labio, e instantáneamente le retiro un mechón de pelo, que suavemente se deja caer por su rostro. Pero nos mantenemos firmes, mirándonos a los ojos, aunque lo único que me produzca sean nervios por tenerla tan cerca, quien me iba a decir a mi que esos ojos marrones me dejarían sin palabras, que una canción de Extremoduro me uniría tanto a una persona y como me encuentro en el sofá de su casa, con su ropa puesta y sintiendo nuestras respiraciones tan cerca.

Es en ese momento cuando una racha de viento nos visitó, y ambas despertamos de aquel instante, volvimos a la realidad, donde aparentábamos ser solo amigas y donde ninguna estaba enganchada hasta las trancas de la otra, pero nosotras lo sabíamos, cojones, claro que lo sabíamos. Nos comíamos con la mirada y nos recorríamos cientos de kilómetros día si y día no por alguien por quien ¿no sientes nada?, cada vez que la veía me moría de ganas por besarla, pero no me atrevía a dar el paso, las dudas aún recorren mi cuerpo, ¿y si solo le caigo bien?, era imposible, pero no me llegaba a creer del todo que una persona como ella quisiera besarme a mí, seguro que tiene a cientos detrás de ella, ¿porque me iría a elegir a mi? Es una de las mujeres más preciosas que he conocido, le quedaba increíble el pelo recogido tras despertar, por qué si, ya hemos dormido juntas varias veces, estaba bonita con todo, después de llorar, después de unas copas de más o tras encontrármela empapada por la lluvia un día que me vino a buscar,  me daba igual. Habíamos vivido de todo juntas, y en tan poco tiempo nos conocíamos como si de toda una vida se tratase, y ahora lo único que quiero es toda una vida con ella.

Después de aquella racha de viento que nos transformó en realidad, tocaron al timbre, era nuestra cena. Mi restaurante preferido de Barcelona había llegado a su casa, que prácticamente se convirtió en mía. Continuamos bebiendo el vino que habíamos abierto tiempo atrás y nos pasamos hablando las horas que me quedaban hasta irme de nuevo a Madrid. Siempre que venia me paraba a pensar lo bonita que era esta ciudad, me fascinaba en ambiente que se respiraba y pasear por las calles era mi debilidad, ahora pienso que Barcelona es más bonita aún con ella.  Pasaban las horas como si de segundos se tratase, Dulce introducción al caos nos acompañaba en bucle durante toda la velada, era nuestra canción favorita. Mis palabras se entremezclaban con las suyas y vaya melodía tan bonita, nos considerábamos confidentes, nos dábamos la paz que necesitábamos, ambas habíamos pasado momentos no muy buenos y para las dos, llegamos en el instante perfecto, sabíamos como consolarnos en los peores momentos, dejarnos el tiempo que necesitáramos para pensar en nosotras mismas, y estar siempre la una para la otra, nunca es tarde para que una persona así aparezca en tu vida.

Ella es viento, es fuego, es pasión, ha roto todos mis esquemas, y en mi, eso es complicado, soy tan cuadriculada que nunca había sentido esto con nadie, no suelo ser tan intensa , porque pensaba que ya lo había sentido todo, pero es que nunca me había pasado esto.

Ahora entiendo porque los huracanes tienen nombre de personas, el mio se llama Inés.
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Espero que os guste, el capítulo es corto porque me gustaría ver primero vuestras opiniones y por tanto, si querríais que continuara.

SI SON