Capítulo 25

3.9K 166 11
                                    

Capítulo 25 -"¿Dónde estás?"

Tini narra

Salí de clase, de la escuela, y me quedé en medio del aparcamiento. Poco a poco cogí mi teléfono, apenas era capaz de marcar los números debido al temblor en mis dedos. Presioné el teléfono contra mi oreja.

- ¿Tini? ¿Por qué me llamas en horario de escuela? - Respondió mi madre.

Tragué saliva. - ¿Puedes venir a recogerme?

Mi madre se quedó en silencio durante un rato. Nunca había llamado a casa en horario escolar antes, incluso ni cuando tuve fiebre o aquella vez que tenía varicela insistí en ir a la escuela.

- Estaré allí en diez minutos. ¿Vale? - Dijo, con ese tono maternal.

Asentí con la cabeza, aunque ella no pudiera verme, y colgué. Caminé de vuelta al frente de la escuela, y me senté en la acera, mirando el coche de Jorge. Él no había asistido a clase hoy... ni siquiera sabía que había venido a la escuela. Por lo general venía a mi casa todas las mañanas a recogerme y llevarme, pero hoy, no lo había hecho. Tal vez me estaba evitando.

Vi el coche de mi madre acercarse hasta donde yo estaba, me levanté y caminé hacia el coche, abriendo la puerta y metiéndome dentro. Cerré la puerta y me incliné contra la ventana.

- Oh cariño... ¿quién te hizo eso? - Se quedó sin aliento.

- No importa. - Apoyé la cabeza contra el cristal.

- ¡Claro que importa! - Exclamó.

- No mamá, mi pelo volverá a crecer, sólo... ¡no tengo ganas de hablar, así que déjame! - Le grité.

Ella retrocedió sorprendida, y se hundió en su asiento, haciéndome sentir culpable al instante.

- Lo siento... no era mi intención. - Balbuceé.

- Está bien, yo también sería una perra, si me hubieran cortado el pelo. - Sonrió con tristeza.

Sonreí. - Mamá... - Me las arreglé para decir.

- Por lo menos dime lo que pasó... - Mi madre comenzó a conducir, dejando ese infierno atrás.

- Me quedé dormida en clase y cuando me desperté... - Me callé, tocando mi cuello.

- ¿Dónde estaba Jorge? ¿No estaba contigo en clase? - Preguntó, mirándome.

Negué con la cabeza. - No fue hoy a clase. - Mentí.

Mi madre condujo todo el camino en silencio, y yo estaba agradecida. Cuando el coche se detuvo, salí primero caminando hacia la puerta principal. Noté a mi madre tocar mi nuca.

- No te preocupes cariño... vamos a arreglar esto. - Puso una mano sobre mi hombro, y luego abrió la puerta. Me dirigí a las escaleras, dando a mi madre un abrazo antes de desaparecer por el resto del día.

Abrí la puerta de mi habitación, me quité los zapatos y me metí en la cama. Me quedé allí durante horas, en la misma posición, como un ovillo, con la cabeza enterrada en la almohada. No había llorado. ¿Por qué aún no había llorado? Seguramente mis conductos lagrimales se quedaron sin lágrimas de tanto llorar. Cogí el teléfono de mi bolsillo.

5 llamadas perdidas. 3 de Jorge, 1 de Mechi, y otra de Cande.

Dejé el teléfono en la mesa de noche, iba a estar fuera de servicio durante un largo tiempo. Necesitaba pensar, pero no sabía qué pensar.

Suspiré, sentándome en la cama y encendiendo la televisión. Rara vez veía la televisión, cuando lo hacía era porque estaban echando algún documental interesante o algo por el estilo. Miré los canales un par de minutos, en busca de algo bueno que ver. Dejé un canal al ver que estaban echando "Mentes Criminales", uno de los pocos programas que toleraba, me gustaba descubrir los crímenes junto con los detectives.

El Proyecto Nerd Jortini (adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora