Espada

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No estoy claro del corazón sabio, entre multitudes han descansado mis luchas, no hay sombra que me compare, el respeto de la noches los tengo en mis recuerdos, el cielo admira mi gloria, y en el mundo de los vivos tengo un lugar asegurado, la trivialidades son humanos, y yo con mi espada, busco acabarlos a todos, hay días en pausa y otros duermen cuando escuchan mi nombre, ahora estoy yo, el que no merece mi nombre y está él, digno de mi existencia.
Cree en mí, aquél que no merece ser llamado, pero, cree en el digno también, ambos no creemos en dioses, ahora no me juzguen los ignorantes.

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