Finalmente agarré confianza con Ezra, inclusive le llegué a tener un cariño muy grande.
Dejando mis terapias de lado me estaba yendo relativamente bien.
Llegué a hacerme un par de amigos, los del club me cuidaban bastante dado a que era el menor ahí.
Aunque Morinozuka y Ootori eran algo difíciles siempre fueron buenas personas.
¿Y el rubio teñido?
Pues era el alma de la fiesta, muchas risas me sacó con sus estupideces y ocurrencias.
Llegué incluso a tener un par de novias, aunque nada serio.
Comenzaba a verme como un chico normal, o bueno, un chico normal de clase alta.
Me vi obligado a subir mi rendimiento escolar, no me costó mucho en realidad.
Estaba organizando un poco mi vida.
Ya me estaba acostumbrando a la mirada de odio de Kaoru, mi psicólogo me recomendó no centrarme en él y eso intenté hacer.
Visité lugares preciosos, conocí gente interesante, descubrí muchas cosas que me gustaron.
Inclusive adopté un pequeño perrito al que llamé Hades, no sé porqué pero al verlo fue lo primero que se me vino a la mente.
Me costó mucho convencer a mi mamá de eso, pero al final accedió ya que vió una oportunidad de que me sintiera acompañado mientras ella viajaba por su trabajo.
Me hizo muy bien, era el perro más inquieto que había visto en mi vida, a demás dormir acompañado de él me hacía sentir seguro en cierto sentido.
Él mejoró mi vida en muchos sentidos.
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sᴜ ᴍɪʀᴀᴅᴀ | ʜɪᴛᴀᴄʜɪɪɴ ʜɪᴋᴀʀᴜ¡!
Random¿Alguna vez has sentido esa sensación de que hay alguien observandote constantemente? De estar convencido que no hay momento en el que ese ser no esté ahí. Muchas veces no sabes quién es, porqué está ahí, porqué tú. Pero yo si lo sé, él es mi herma...
