Cuando Donghae logró despertarse, miró al mueble con un reloj que estaba a su lado, mostrándole en pequeñas pero distinguible números verdes fosforescentes la hora. Eran las 6 y 30 de la mañana, aun se podía notar el dejo de oscuridad en la blanquecina pieza, y ese frío mañanero que traspasaba el cuerpo del moreno. Cuando Hae trató de pensar todo lo que había hecho en la noche, sus mejillas se calentaron al instante por el bochorno y la vergüenza de todas esas posiciones y todas esas veces que Hyuk había entrado en el sin ninguna restricción, más que un condón y lubricante. Podía recordar claramente las 5 veces que lo había hecho con Hyuk, y las palabras que este le había dedicado con cada estampida en contra de su cuerpo, con su miembro erecto y duro contra él, dejándole el pequeño agujero del menor más que ardiendo.-Auch! -gritó el moreno en un susurro, sin poder guardarlo en la garganta. Al tratar de levantarse de la cama se dio cuenta que el dolor era completamente intenso en la parte baja de su columna, pero aun así traspasando toda su espalda, desplomándose nuevamente en las tibias sábanas.
Al mirar a su lado, vio la espalda descubierta del rubio, con sus mechones esparcidos por toda la almohada, además de poder notar como en esa misma espalda, podían verse pequeños, pero hartos rojizos rasguños traspasando su blanquecina y cremosa piel, dejando al descubierto esos dejos de placer por parte del moreno en una parte del cuerpo del mayor.
Hae quería acercársele, tocar su espalda, pasar sus brazos por su cintura, y proporcionarle el calor corporal que el rubio necesitaba en esos momentos, esos momentos cuando tenía su espalda al descubierto, con un frio mañanero, con un temblor pasando por su columna de vez en cuando. El castaño quería que eso se fuera de Hyuk, y Hae quería ser como un oso, dándole el calor que necesitaba... Pero claro, eso era algo que no iba a suceder... jamás.
Cuando dejó pasar un tiempo, después de decidirse que ese abrazo jamás iba a pasar, ni menos darle un beso de mañana al chico malo, el castaño se decidió por levantarse. Pero al hacerlo, encontró el mismo resultado que tuvo hace un rato atrás. Su columna le dolía demasiado, además de poder sentir esa incomodidad ardiendo por su trasero. El moreno podía recordar como había gritado, gemido y tenido mil y un orgasmos por la noche de pasión de Hyuk y el, pero en esos momentos, el moreno solo quería dejar pasar esos recuerdos, y pensar que nunca pasaron, solo para olvidar el dolor que tenía en ese instante en su cuerpo.
Al pasar un rato de intentos fallidos, el moreno finalmente se pudo su cuerpo, caminando lentamente a donde estaba toda su ropa, tomándola y poniéndosela con cuidado y sin prisa, después de todo, llegar a clases un poco tarde, no le hacía mal a nadie.
-Hyuk -le llamó Donghae, mientras le rozaba con la yema de sus dedos la mejilla del rubio, admirando con todo su corazón esos rasgos finos del mayor, revoloteando mariposas en su estomago cada vez que pensaba en sus labio con los de él, además de poder sentir su corazón palpitar más rápido al momento de ver los rasgados y oscuros ojos del mayor abrirse, dando a conocer el sueño que tenía por la inyección de sangre que tenía por su iris.
-Donghae -le respondió con la voz totalmente ronca por el reciente despertar.
-Me voy a la escuela -Le habló el muchacho, viendo como el mayor tocaba su mano y la alejaba de su rostro.
-Como quieras. -murmuró, dándose vuelta en la cama, y estirando las sábanas hasta tapar todo su cuerpo.
Esto le calló a Hae como un balde de agua fría, y le ayudó a recordar que ellos no tenían ni una relación, solo eran... eran... eran... nada. Eso, eran nada, ¿cómo podían ser algo si Hyuk siempre había dicho que no eran nada?... ¿no?.
Al llegar a su casa, después de un largo trayecto, su cuerpo quedó agotado en su sillón principal, sobándose la espalda como pudiera y tratando de olvidar el dolor que sentía, pero volviendo a recordar esa noche de pasión, y volviendo a colocársele las mejillas completamente rojas por como se había dejado llevar. Hyuk si que sacaba lo peor y lo mejor de Donghae.
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BAD BOY - (EUNHAE +18)
FanfictionDonghae era un chico tranquilo, con buenas notas, bueno en el deporte, y sus radiantes ojos derretían a cualquiera, ya sea hombre o mujer; era el popular en la escuela que se encontraba. Pero,al momento de la muerte de su padre, el y su mamá tuvi...