Quedate conmigo (pucca y garu)

Incomodidad

Garu se quedo en silencio por unos segundos, mirando fijamente a la pelinegra, después de unos segundos finalmente respondió.

-e esta bien, debe ser raro pedir algo como eso, después de tantos años que no nos vemos...- dijo en seco.

-yo...- Pucca fue interrumpida

-regresare a la junta, salí sin autorización de nadie, no deben están contentos, pero te veré esta noche- dijo Garu con una sonrisa, Pucca solo asintió con la cabeza.

-Si- respondió esta, enseguida Garu se marcho dejando pensando a la pelinegra.

*salio de una junta importante, solo para recibirme* pensó Pucca sintiéndose mal.

-¿porque no le dijiste lo de Leo?- pregunto ching saliendo de la fuente.

-¿estabas escuchando todo?- pregunto Pucca un poco consternada.

-no sabia para donde ir, así que me escondí en la fuente- dijo ching un poco avergonzada.

-yo se lo iba a decir, pero me interrumpió y se fue- dijo Pucca de forma seria.

-bueno, ¿pero se lo dirás no?- pregunto ching sentándose a un lado de su amiga.

-claro que si- respondió Pucca con una pequeña sonrisa.

-chicas!- se escuchó una voz femenina desde muy lejos.

Al voltear, Pucca y ching vieron a la prima de Garu, Sora.

-Sora!- exclamó ching, Pucca sonrió de oreja a oreja al recordar a la prima de Garu.

-¡que bueno volver a verlas!, pasaron tantos años- dijo mientras tomaba posición frente a las dos amigas.

-ni que lo digas- con testo Pucca con una sonrisa a lo que Sora se sorprendió un poco.

-¡hablas!, bueno, así sera mas fácil conversar contigo- dijo con una sonrisa la chica- y dime ¿Garu ya te dijo?- pregunto la chica con cara de emoción esperando una buena respuesta de parte de Pucca.

-¿que cosa?- pregunto ella confundida.

-ya sabes... Pedirte matrimonio - dijo ella con la una mano en su rostro sonrojante.

-etto...- Pucca no sabia que decir, se sentía intimidada ante la atenta mirada de Sora.

-¡NO ME DIGAS!, mejor que sea una sorpresa- dijo esta mientras imaginaba una boda entre Pucca y Garu.- sabrás que el se ha esforzado mucho para mantenerse libre, además de rogar a la familia que esperaran por ti. La unión de los dos clanes por medio de Garu y la otra mujer no me agradaba, pero ahora que estas aquí, todo cambiara- dijo esto ultimo con un suspiro.

Ching se sentía incomoda, además de sentir que estaba forzando a Pucca a casarse con Garu. Por lo que no le agrado mucho aquel comentario.

Mientras que Pucca se sentía igual, se sentía atada ahora a el, lo que le hacia recordar cuando eran niños, comenzaba a sentirse muy mal.

-pero bueno, Garu esta ocupado, ¡así que les mostrare la aldea!- dijo Sora mientras tomaba las manos de Pucca y ching y la levantaba para salir.- primero debemos ir a comprar algo de ropa, esa es demasiado informal para este lugar- dijo mientras veía los atuendos de las dos chicas.

-¡COMPRAS!- dijeron las tres al unísono.

La aldea era fantástica, estaba rodeada de montañas bañadas de árboles marrones, cuyas hojas caían tapizando el suelo. El sol que comenzaba a esconderse pintaba las nubes de colores rosados, algo típico de una película de amor.

-me gustaría estar aquí con abyo- dijo ching mientras danzaba al ritmo de las hojas.

-lo se, es bellísimo- dijo Pucca con una sonrisa mientras observaba el lugar tan vivo, los niños jugaban, las jóvenes parejas paseaban tan enamoradas, que su vibra se sentía en todo el lugar, simplemente era hermoso.