Brian está filosófico y le contagia a Wonpil.
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Mientras daban un paseo, observaban las flores de cerezo que estaban creciendo en muchas zonas de Corea por el comienzo de la primavera, esa estación del año en la el color se expande, borrando los tonos oscuros y grises que venía dejando todo el invierno.
Los dos amigos se sentaron en un banco para descansar un rato y continuar hablando después de una larga charla que había abarcado la mayoría de la caminata que llevaban.
Se hizo el silencio cuando Wonpil notó a su hyung mirando al horizonte, pensativo, quizás sin nada dentro de su cabeza, pero eso era un misterio, descubrir en lo que Younghyun pensaba. Así que Wonpil mantuvo el silencio durante un breve tiempo más, sintiéndose cómodo de hacerlo, hasta que decidió romperlo y seguir conversando con su querido Hyung.
- Hyung - le llamó con un tono sereno y calmado, llamando la atención del mayor haciendo que girara su cabeza a mirarle con unos ojos relucientes.
- Dime Wonpil-ssi - respondió a la llamada del pequeño con gran interés.
- ¿En qué estabas pensando? ¿En alguna canción? - preguntó Wonpil, con gran curiosidad por lo que le rondaba por la mente a su hyung.
- Exactamente no. Estaba pensando en el amor - dijo claramente sin rodeos y de forma poética.
- ¿Qué es el amor para tí? - volvió a hacer una pregunta Wonpil, queriendo descubrir hasta que puntos llegaba Brian de filosofía en esos momentos, ya que los tenía muy a menudo, pero no era capaz de averiguar lo profundos que podían llegar a ser sus pensamientos.
- ¿El amor? ¿Para mí? - volvió a dirigir la mirada al horizonte, ahora pensando en su respuesta cerrando levemente los ojos, como para ver imágenes que se le venían a la cabeza al pensar en el amor.
- Verás Wonpil, el amor es un concepto tan complejo que no sé si voy a poder explicarlo como realmente lo siento yo - volvió a abrir los ojos y cruzó la mirada con la del más pequeño, haciéndole aún estar más curioso por su respuesta.
- Es un sentimiento que tienes hacia tantas personas y cosas... Es como cuando quieres tanto a alguien que quieres compartir tu tiempo con esa persona, y conocerla cada día más, hacer que se convierta en algo imprescindible en tu vida, sin tú realmente saberlo. Es ese sentimiento que tienes cuando no quieres que la gente que amas sufra o estén tristes, y harías lo que fuera por devolverles su preciada sonrisa, para que vuelvan a brillar sus rostros de felicidad y no tornarse de tristeza. También es eso que a veces sentimos, miedo, al pensar en que en algún momento todo se puede acabar y de alguna forma se irán de nuestras vidas por el motivo que sea; pero mientras eso no ocurre, existe un miedo que nos dice que si lo que amamos se va, es como si nos quitaran un pedazo de nuestra persona, ya que somos quienes somos por todo lo que vivimos, y ahí entran las cosas que amamos - paró por un momento de hablar con la mirada perdida en el cielo del atardecer, y respiró hondo, queriendo continuar con su respuesta a la pregunta de Wonpil, aunque le interrumpiera ligeramente con otra pregunta.
- ¿Eso es el amor para tí, Hyung? - se le quedó mirando asombrado por el profundo corazón que tenía el chico con el que estaba sentado al lado en ese preciso instante.
- Es un pequeño resumen - sonrió levemente - no puedo expresarlo por completo, aunque me gustaría hacerlo - volvieron a cruzar miradas.
- Con eso me sirve perfectamente - le devolvió la sonrisa al más mayor - el amor es realmente bonito si lo miras de esa manera - añadió Wonpil.
- Lo es, aunque tenga sus cosas malas como todo - se encogió de hombros.
- Yo tengo ese sentimiento hacia todos los miembros de Day6 - sonrió Wonpil tímidamente al decir la verdad sobre aquello.
- Yo también Wonpil, yo también - esbozó otra amplia sonrisa - y con Myday igual - mantuvo esa sonrisa pensando en todo lo que le habían dado las personas que les apoyaban diariamente y les deseaban todo lo bueno en este mundo.
Wonpil, feliz, observó la puesta de sol que estaba teniendo lugar en el cielo, ahora con unos colores rojizos y morados. Lo miraba al igual que su hyung, ambos con ese sentimiento de amor que siempre llevaban con ellos, y más después de la charla filosófica de esa tarde.
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