Capítulo 11

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Después de la caída que sufrió Myung y Nam el maestro les pido que ambos regresaran a la cabaña. Caminaban algo lento pues, la pierna de Nam se había torcido, en su piel se notaban algunos raspones, así que Myung puso el brazo de su compañero al rededor de su cuello y su mano la colocó en la cintura de Nam. No parecía nada grave, pero debía de doler bastante por las muecas que hacía cuando el profesor lo estaba revisando. Debo admitir que me sentí algo celoso al verlos tan juntos.

Sentí una mano posarse en mi hombro, haciendo que de un pequeño brinquito del susto. Miré hacia el dueño de la mano y pude ver a Gyu viéndome preocupado.

—¿Crees que se encuentre bien?

—Realmente no lo sé pero esperemos y que si

Vi que a Nam le costaba un poco caminar, pero lo que ví a continuación hizo que mis celos y enojo aumentarán, pues Myung se arrodillado para que Nam pudiera subir a su espalda y así llevarlo a la cabaña, lo único que hice fue observar como se iban, no podía hacer nada.

El maestro regreso con nosotros de nuevo nos advirtió que tuviéramos cuidado y que cuidaramos de nuestros compañeros, no quería que hubiera otro accidente, y asi continuamos con nuestro camino.

Salimos de la cueva por otro extremo, llevándonos a una extensión de terreno enorme con muchos pinos y algo de maleza. Esperamos a que estuviésemos reunidos todos fuera de la cueva, voltee a ver a Gyu, su mirada estaba perdida, parecía estar pensando en Nam, se le notaba su preocupación. Se nota que lo estima demasiado.

Pose mi mirada en el cielo, estaba rojizo, señal de que el sol se estaba ocultando. El tiempo se había pasado volando!

—Ya estamos todos aquí. Por favor, juntense con sus compañeros, es hora de irnos— y el profesor avanzó. Todos comenzamos a seguirlo

Caminamos por un largo tiempo, hasta que por fin llegamos a donde estaban las cabañas. El profesor nos dió una última indicación y nos dejó libres.

Me dirigí junto a Gyu a la cabaña pero antes de llegar alguien lo llamó

—¡Gyu! —ambos giramos y se trataba de Hoya que llegó a nosotros — vamos a comer, los demás quieren realizar una comida están invitados tu también Yeol— y me quedo mirando

Comenzaron a caminar y los seguí, llegaron al comedor y compraron ciertas cosas, yo compré unas golosinas para llevarle a Myung, en ese momento me acordé de el, aún seguía molestó pero también preocupado.

Me despedí de los amigos de Gyu y regresé a la cabaña, cuando entre no creía lo que mis ojos veían, Nam estaba sobre Myung, con sus brazos a los costados de Myung a punto de besarlo, de inmediato deje caer la bolsa que traía, ambos voltearon a verme lo único que hice fue huir de ahí.

Solos tu y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora