LEYENDAS EN LA SOMBRA

CAPITULO 7 "DECISIÓN"

Nadie se  ha dado cuenta todo lo que se puede observar desde las sombras, cuantas historias se descubre y que verdades o falsedades se presentan.  Estaba allí en el silencio mas profundo, no pretendía matar a nadie mientras nada raro pasará. Pensé en ocultarme para esperar el momento de que ellos se fueran o tener un lugar por el cual salir. No se que horas fueron, supongo que era temprano. Escuche sonar las pistas de un detestable reggetón, eso significaba que venían en son de fiesta o algo similar. Me di cuenta que el plato principal eran las jóvenes, típico en los jóvenes que en su temprana edad solo se despierte su instinto biológico o mejor dicho su animal interior y lo único que busquen es fornicar. Escuche mucha parafernalia en el que los chicos intentaban persuadir a las chicas. Algunas caían en el cuento de aquel lobo hambriento, por algunos momentos escuchaba el silencio suponía lo que siempre conlleva esas reuniones. La verdad, no me generaba gran impacto si las jovencitas y los jóvenes querían jugar al macho cabrio era su problema, el sueño empezó apoderarse de mi, "los maniáticos también duermen! En ese ático  había un mueble viejo en el cual me recosté, el machete con el que  mate lo tenia al lado por si acaso.   Cerré los ojos, no se como podía tener tanta paz después de todo lo que hice. La locura es peligrosa pues los sentimientos mueren y allí surge el poder de hacer lo que sea. 

Estaba llegando a mi quinto sueño, de pronto escuche el romper de unas botellas, me puse alerta. Me di cuenta que por los cimientos de madera no se reflejaba la luz de los bombillos de los sectores en  los que se suponía estaban los jóvenes. Escuche pasos que corrían con el sonido que representa el huir del miedo, abrí las puertas del ático. Las sombras cubrían el lugar, nadie se veía, me di cuenta en el reloj de la pared que eran las 2: 00 am, botellas regadas por doquier, algunas prendas de vestir por todo lado. Entre en la sala y allí encontré a tres jovencitas y tres jóvenes tirados desnudos como cerdos. Sus cuerpos dejaban ver la intensa orgía que realizaron. Fue tan repugnante que quise rebanarle la garganta a todos. Escuche entonces una conversación:

- Juan por favor. Te lo suplico por favor. 

La voz provenía de una de las habitaciones.  La puerta estaba cerrada y decidí poner mi oreja.

- Hermosa eres la única que no ha participado de este juego y eres la que mas me fascina. 

- Yo, jamas acepte esto. Déjame en paz. 

- Se que me amas, lo veo en tus ojos. Todos los chocolates, miradas, saludos me los aceptaste. 

- Juan estas borracho, yo solo te veo como amigo, y yo no sabia cual era la intención de esta reunión, la tonta de Luisa me convenció pero no me dijo la realidad. Alejate, no me toques. 

El joven cometió un grave error, y me refiero cuando creo que ella lo amaba y ella por no ver las señales y la de su amiga por creerse muy moderna. Una de las cosas mas peligrosas de la violencia es que nadie sabe al final quien sale perjudicado y resulta el que menos se piensa. Algo que no  soportaba era un abusador que  se excusa en el amor para hacer sus fechorías. Abrí la puerta muy lenta mente. El joven que tenia casi 23 años y la chica de 17 años, este se había ya bajado los pantalones y  una posición dominante ante la frágil y débil joven.  

Saque a relucir el machete que sin dar tregua corto el miembro del abusador que grito por el intenso dolor, la chica también del susto al ver a un psicopata con mascará y con un machete en mano. El joven cayo tendido mientras se desangraba poco a poco, me acerque con el machete y se lo puse en su cuello el cual corte lentamente para que la hemorragia fuese mayor. La joven salió despavorida, mi instinto quiso perseguirla para asesinarla pero antes terminaría con este gusano. Al verlo sin vida, me dirigí hacia la sala, pensé entonces que me estarían esperando los demás, me oculte  en uno de los closet. Como era de esperarse, entrarón y se horrorizaron ante la escena, tenían que tener precaución, el maniático también piensa o porque creen que en todas las historias está en el lugar preciso. No muchas veces sea contado desde la perspectiva del asesino. Es decir, nada cambiará ellos morirán. El ¿cómo? Será la sorpresa del momento, estaba allí en medio de la sala al lado del cuerpo sin vida, mientras escuchaba los gritos de horror de la joven. El ambiente estaba tenso, me escondí en el armario de allí, escena típica de terror. Cerré la puerta y entrelazado con las prendas que se tenía en este lugar. Escuché el abrir de la puerta, voces de horror se escucharon.

- Jueputa.... Juan, quieeeeen está hay.

La voz de un joven que hace unas horas escuche con prepotencia mientras demostraba toda su hombría machista para persuadir a su chica ahora temblaba como un cobarde.

- Llamemos a la policía.

- Noo, como se le ocurre. Me mataría mi padre donde se entere que utilice su cabaña para esto y para guardar drogas. Lo mejor será enterrarlo y que se enteré por otro lado.

- Camilo, ¿Qué estás diciendo? No somos criminales, debemos llamar. El asesino debe estar cerca.

Lo que ellos no sabían es que está más cerca de lo que creían, sus actos irresponsables, queriendo mostrar superioridad ante las féminas, errores graves que conllevan a la tragedia. Por un momento medite si los mataría, pero no estaba loco, solo me encontraba con situaciones que no tenía más remedio que la misma muerte. Si no hubiese terminado la vida de ese joven, esa chica hubiese sido violada sin remedio. Con secuelas psicológicas e incluso como suele pasar que embarazada de una situación que nada de amor tuvo y que esto genere gran rencor encontrar del bebe porque seguramente el desgraciado padre se escaparía y entonces ese bebe inocente sufriera los peores de manes de aquella mujer que guardaría en su interior un infierno difícil de curar. Y vivo en un país donde existen las mejores leyes para la protección y reparación de víctimas, pero jamás las han puesto aprueba. No digo que mi acto sea bueno, digo que evitó una tragedia en esa mujer que nadie detendría, la chica está llena de miedo por lo que paso, pero no sufrió algo peor y esto podrá superarlo más fácil que lo otro. Las palabras del joven que afirmaba abandonar el cuerpo de su compañero me daban entender que era de la misma calaña y que la chica que posiblemente era su novia era dos cosas o de la misma forma de pensar o un borrego bien atrapado por su lobo. "Julian soy yo, o mejor dicho, soy tu, toma tu machete y mata" Era claro que estaba bajo un trance mental tal vez era esquizofrenia pero todas mis deducciones me arrojaban a un solo accionar, no ser amable con estas conductas. Seré la mano derecha de la muerte y le enviare múltiples sujetos que no aporten nada ha esta vida.

El joven hablador se puso de espaldas del armario, escenario perfecto para abrirle la cabeza de un machetazo. Así fue abrí lentamente e inmediatamente lo ataque, cayó al piso desangrándose y el horror de todos se deslumbro, al paso que yo salía y tomaba de nuevo mi machete, los vi correr, salieron y se montaron en su carro perdiéndose de su lugar.