-AU- "Thank you" (Abbacchio x Giorno) JJBA Vento Aureo

Parte 10

"The wall on which the prophets wrote is cracking at the seams."

–Buenas tardes, Doppio. –

–Oh, ¡Buenas tardes, Doctor Abbacchio, Buccellati! ¿Se les ofrece algo? –

"Upon the instruments of death the sunlight brightly gleams."

–Oh, discúlpenme. –

El pequeño hombre levantó la mano y apagó el estéreo que dejaba escuchar una hermosa melodía, ahora la sala estaba en silencio.

–Necesitamos saber si conoces a un hombre llamado Cioccolata, estamos seguros de que ha estado aquí, pero no recordamos su apellido, necesitamos contactarlo. – hizo saber el psiquiatra.

–¿El doctor Cioccolata? ¿Para qué lo necesitan? – cuestionó intrigado, pues era extraño que alguien recordase a una persona que se ha aparecido tan pocas veces por esos lares.

–Eh... - se quedó pensando durante varios segundos, hasta que el cuidador abrió la boca por él

–¡La última vez que vino nos llevamos bastante bien, y lamentablemente no pudimos preguntar por su nombre completo! Queríamos ver si podrías ser tan amable de proporcionarnos su número para volver a hablar, tenía muchos conocimientos sobre los pacientes que nos gustaría que compartiera con nosotros. –

–Oh, si es así, entonces con gusto les daré su número. – dijo con una sonrisa, completamente confiado.

Abrió una pequeña agenda en donde tenía anotados los números de los cuidadores, psiquiatras, enfermeras y médicos del hospital, y buscando por la inicial de su apellido, rápidamente encontró a su objetivo. No tardó mucho en anotar en un pequeño papelito el número del buscado, entregándoselo al Buccellati, después de todo, no habría nada malo en darle tal información.

–Muchas gracias, Doppio. –

–¿Hay algo más en lo que les pueda ayudar? –

–Eso sería todo, nos vemos luego. –

Se dieron la vuelta y comenzaron a caminar, ambos empapados en sudor debido a los nervios que les provocó el joven, debieron haber pensado con anterioridad lo que iban a decir, de eso estaban seguros, pero lo olvidaron por completo. La buena noticia es que habían conseguido el número de teléfono del doctor, "es bueno que Doppio sea tan pasivo".

Mientras caminaban pudieron escuchar como el chico volvió a encender el estéreo, dejando salir la misma canción que anteriormente sonaba.

Sin embargo, mientras ellos se alejaban, el joven de pelo violeta realizó una llamada.

[ ... ]

El guardia se dedicaba a observar las cámaras como era costumbre, tomando sorbos a su café de vez en cuando, completamente despreocupado de lo que le rodease. Fue sólo cuando comenzó a escuchar cierto ruido que se paralizó.

–Confusion. –

Cada vez se escuchaba más cerca, era una voz familiar, bastante reconocible, comenzó a sudar.

–Will be my epitaph. –

Sin embargo, no perdió la calma. No podía perder la calma.

Con un rechinido se abrió la puerta, iluminando con unos haces de luz la habitación. Una figura esbelta y algo baja se mostró, aunque no se podía observar bien su rostro el guardia ya estaba enterado de quien era.

–Doppio, ¿qué haces aquí? –

–El jefe me informó que tomaríamos las cintas XXX antes de tiempo, ¿te importaría dármelas? –

–Verás, la verdad es que fueron robadas. –

Hubo un silencio algo largo, el menor se quedó perplejo ante su respuesta, esperaba cualquier cosa del guardia, menos eso.

–...Eso es imposible, tú no permitirías eso. – tragó saliva, antes de continuar. -¿Sabes lo que el jefe te hará si descubre eso, cierto? ¿Qué lo has traicionado? –

–Estoy dispuesto a aceptar el castigo. –

–...Confiábamos en ti, Risotto. Tendré que hablarle de esto, lo siento. –

[ ... ]

–Ya veo...Si, está bien, iré tan pronto como pueda, adiós, Doppio. –

–... ¿Qué pasó, papá? –

–Alguien robó las grabaciones clasificadas de las cámaras de seguridad, es urgente que vaya ahora mismo al psiquiátrico. –

–Oh... -

–Vamos Trish, vístete, y lava las sábanas tan pronto como puedas. –