Deseos

236 22 2
                                    

Narrador Omnisciente

Cuando llegó Tomoe, Shoto se contentó esperanzado de que llegases en cualquier momento; esa alegría se fue tornando poco a poco en confusión mientras escuchaba atento lo que decía tu hermano. Shoto estaba feliz de que estuvieses viva, pero escuchar todo eso de que eras peor que Tomoe en conjunto de la mirada de <<Lo siento>> que le lanzó el chico zorro, no le hizo gracia. No le agrado la idea de imaginarte con un harem como tu hermano.

Los chicos no comprendían como podías cambiar de personalidad repentinamente. La verdad es que estaban bastante confundidos, simplemente no sabían cómo funciona eso de ser kitsune y mucho menos como trabaja ese mundo nuevo en donde existen seres sobrenaturales, cosas como magia y dioses. Todos fingían e intentaban entender, pero una parte de ellos estaba turbada por el asunto. Lo que les importaba a todos era que estabas bien y que seguirías con ellos en el curso.

Shoto tenía sentimientos muy contrariados. Enojo. Desinterés. Felicidad. Envidia. Ganas de buscar un montón de ajo y tirárselo en la cara al príncipe vampiro o quemarlo en una hoguera. A pesar de que estuvo una buena parte de la conversación, entre Tomoe y Dai y tuya con los chicos, sin saber que hacer, tomo una decisión en base a lo que le parecía lo correcto y fue a tu habitación para comunicártelo, aunque no fuese necesario.

He venido a hablar contigo... — dijo el bicolor con una cara sombría, quien pensó que era mejor decirte lo que te tenía que decir de frente.

— ¿Sobre?— dijiste bostezando. — Shoto, ¿No prefieres venir mañana?, ya es tarde quiero descansar.

— No. — sentenció serio.

El heterocromático se sentía raro desde que abriste la puerta, pero ahora esa sensación aumento más por lo que puso una expresión curiosa. No entendía lo que estaba sucediendo. Sentía una especie de calidez de brisa fresca de verano y rayos de sol en el invierno, con un aroma a bosque virgen y flores silvestres. Como si solo verte fuese reconfortante.

— Mañana no puedo. Entiendo que estés cansada por tus actividades. — <<Auch>> pensaste, su tono de voz al decir "actividades" te dejo claro a que se refería. — pero solo puedo venir hoy. —dijo brusco aunque algo confundido por sentirse tan en paz y bien, ya que estaba molesto contigo.

Lo miraste con los ojos un poco abiertos, sabías que él estaba enojado contigo, se le notaba, tenía todo el derecho a estarlo. Había escuchado todas esas posibles cosas que estuviste haciendo, pudiendo haber acudido a él (aunque no sabías si estaba enojado por eso, se te hacía algo difícil saber que estaba pensando Todoroki) , pero no lo hiciste, no lo hiciste porque el abuelo te lo prohibió, el director lo pidió explícitamente que no te metieras con alumnos y piensas que fue lo mejor, está muy baby. << Si me va a plantar. Tiene todo el derecho. >> era en lo único que podías pensar.

— Está bien, pasa. — suspiraste.

Al entrar en tu habitación Shoto empezó a sentirse aún más extraño, ya no solo le producías calidez y paz. Ahora se te quedo mirando embelesado pensando miles de cosas que no tenían nada que ver con lo que él hacía allí. Atracción hacia a ti como si fueses un imán. Las sensaciones de Shoto se incrementaron, cada vez se sentía más cálido e íntimo sin saber porque, quería estar más y más cerca de ti. Como si te necesitara. Intentó olvidar esos pensamientos recordando que era lo que iba a hacer allí.

Caminabas hacia tu cama cuando el chico toma tu brazo, repentinamente...

— ¡Aquí! — dijo algo tenso, con una gota de sudor recorriendo su mejilla. — Aquí esta bien.

Almas De Fuego (Todoroki x Reader) PausadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora