Almas De Fuego (Todoroki x Reader) Pausada

Bajo la luz de la Luna Llena, Una Cita & una Confesión

Los días transcurrieron de la siguiente forma:

De lunes a viernes: recibía clases en la mañana como una estudiante normal, en la tarde los alumnos que estaban en residencias se iban con Tamaki, Nejire y Mirio. Los conocía a ellos de la primera vez que abuelo nos obligó a dar clases en una escuela, pero no resulto como quería, se podía decir que éramos buenos amigos. Bakugou y Todoroki, tomaban sus clases adicionales con Gran Orca. Mientras tanto mis tardes la pasaba junto a mi hermano, entrenando al resto de los chicos que quedaban, ya que nos lo habían pedido. Querían hacerse más fuertes, luego de que no recibieron una residencia como los otros.

El fin de semana: generalmente Dai pasaba por mí y me llevaba a alguna cita, en la cual a veces se colaba Tomoe y terminaba siendo una cita de grupo. A pesar de que aún no me sentía completamente cómoda alrededor de Dai, el ambiente entre nosotros se había aligerado y tenía que admitir que el vampiro se estaba esforzando. Habíamos tenido varias y entretenidas cita, que iban desde visitar las montañas, ir al cine y al teatro, comer en restaurantes de lujo, reuniones familiares y pasear juntos por los diferentes parques de la ciudad. Los medios estaban felices con todo el material que le estábamos dando todos los fines de semana y por su puesto el mismo Dai lo estaba. Su aptitud había mejorado, tanto conmigo como con su familia y ahora podía entender perfectamente a lo que se refería Asuna. Intentaba mostrar mi mejor cara cada vez que nos reuníamos, tal vez ya me estaba acostumbrando a esto. En realidad no era tan difícil, era sencillo estar con Dai. Era todo un caballero cuando se lo proponía y no habíamos tenido ningún problema hasta ahora.

Esta vez me había enviado todo lo que se suponía que tenía que usar para nuestra siguiente cita. Un vestido blanco clásico, con adornos dorados bordados a manos en el área de la cintura que resplandecía como oro, unos zapatos dorados de tacón, una pulsera y zarcillo de oro. Me vestí y me puse un poco de maquillaje sencillo, de un tiempo acá había vuelto a usar maquillaje, decidí usar un labial rojo ya que tanto mi maquillaje como la vestimenta iban bastante sencillos. Deje mi cabello suelto. Ya era de tarde, Dai pasaría a las 6pm por mí.

En la sala de estar varios chicos estaban compartiendo y charlando. A penas me vieron los varones se quedaron mirándome absortos y algunos se sonrojaron, me sorprendió ver que uno de los sonrojados consistía ser Katsuki... el cual no me había lanzado un insulto en todo este tiempo, más bien había disminuido sus insultos para todos.

— ¡Eres tan hermosa, (T/N)- chan! — me dijo Ochako aplaudiendo mientras Tsuyo asentía.

— ¡Oh, (T/N)!.. Ese vestido es tan bonito. ¿Es de ese diseñador nuevo verdad? — Momo toco la tela en la falda.

— La verdad es que no tengo idea. Dai lo envió.

— Tu prometido es tan atento. — agregó Mina, mientras las demás chicas se acercaban y decían comentarios similares. Hagakure daba vueltas bailando alrededor mío, según ella de lo bonita que estaba. Menos mal que es invisible, porque si no nos marearía. — quisiera poder encontrar un prometido tan apuesto, atento y rico como él.

— Voy a buscar algo de beber. Tengo sed. — les dije, mientras me retiraba a la cocina y ellas se quedaban hablando sobre mi vestido, zapatos y demás.

En la cocina había alguien buscando algo en la nevera, no pude ver quien era para pedirle que me pasara una botella de agua así que me acerque a la puerta de la nevera. <<Toc, Toc>> di unos toquecitos a la puerta. La persona que estaba dentro de la nevera se enderezo y para mi sorpresa un Todoroki Shoto se me quedo viendo perplejo.

— ¡(T/n)! — logro decir.

Aún me sentía confusa, con lo que me dijo ese día "No te cases, espérame, me hare más fuerte y digno" . Sus palabras habían resonado una y otra vez en mi cabeza desde ese día, en realidad no sé cómo se supone que lo tenía que esperar o cuánto tendría que esperar o cuánto pudiera esperar. A pesar de eso, había intentado no pensar mucho en eso, porque siempre que lo hacía me volvía loca. Mi relación con Shoto había cambiado también desde ese día, la distancia que había antes se había reducido significativamente y ahora nuestra relación parecía un poco más a la de antes. Siempre me saludaba, estaba pendiente de mí y era bastante amable, de vez en cuando hablábamos un poco, pero yo intentaba evitarlo porque cada que estaba cerca de él me ponía a pensar en que había dicho y quería acribillarlo con preguntas que sabía que no iba a contestar. <<Aquí es donde se quejan y se preguntan: ¿Pero por qué no le preguntas?. Es que ya lo hice y no me contesto, prácticamente se hizo el que no escuchó o puede que no escuchara. La verdad es que nunca se sabe con él. A lo mejor y yo estoy pensando demasiado>> . La verdad agradecía que la relación entre nosotros hubiera mejorado. Lo miré, seguía mirándome con sus ojos brillantes sin decir nada mientras sostenía un refresco desde el lado interior de la puerta de la refri, lo cual me estaba empezando a poner nerviosa. Si no hubiera cargado rubor en mis mejillas, tal vez se hubiera notado mi sonrojo por tan directa mirada.