La vida de Áida: una chica... ¿Normal?

Planes y brazaletes

Desperté como cualquier otro día, me arreglé, desayuné y me fui para el colegio. No estaba pasando nada extraordinario pero sentía que algo estaba a punto de pasar. Llegué y no vi a Mike por ningún lado, lo cual se me hizo raro porque él casi siempre está a la entrada del colegio cuando yo llego con mis amigas. Pasaron las primeras clases y salimos al recreo.

Áida: ¿Por qué siento que algo pasará?
Aidania: Porque algo pasará -dijo muy pacito y casi ni la oí-
Áida: ¿Qué?
Aidania: Antes del almuerzo algo pasará
Áida: Sí, -dije interrumpiéndola- muchas cosas pasaran de aquí al almuerzo.
Aidania: ¡No! ¡No hablo de eso! Algo en serio importante va a pasar antes del almuerzo
Áida: Muy bien, creo que confiaré en ti

Y en esas me entra una video llamada. Al oir el celular lo saco del bolsillo y veo la foto de... ¿Mabel?
Áida: ¿Por qué Mabel está llamando?
Aidania: Debe ser algo importante
Áida: Mejor contesto. ¡Hola!
Mabel: ¿¡Áida!? ¿Qué haces en mi celular?
Áida: ¿De qué hablas?
Mabel: ¿Por qué llamaste?
Áida: Ehm... -dije algo muy confundida- fuiste tú la que me llamó
Mabel: Ah, seguramente se me marcó. ¡Ups!
Katy: ¿Con quién hablas? -dijo metiéndose como si nada-
Áida: ¡Ah! ¡Cierto! Nunca las presenté. Mabel, ellas son Katy, Karol, Emilia, Sol, Chiara y Jazmín; chicas, ella es Mabel, la chica no-demonio de otra dimensión
Mabel: ¡Sí, esa soy yo!
Mis amigas: ¡Hola Mabel chica no-demonio de otra dimensión!
Áida: Bueno, supongo que si no me necesitabas voy a colgar... -me disponía a hacerlo cuando...-
Mabel: ¡Espera! ¿Qué es eso?
Áida: Ah, ¿esto? -pregunté señalando un brazalete de la amistad-
Mabel: Sí, eso
Áida: Es un brazalete de la amistad que hicimos con Mike cuando éramos pequeños. -ese brazalete significa mucho para mí. Teníamos como cuatro años cuando ya éramos mejores amigos y, como símbolo de nuestra amistad, teniendo cuatro cortos años, a él se le ocurrió la gran idea de hacer estos brazaletes. Desde ese día supe que lo que tenía en frente mío era un verdadero y muy buen amigo y a decir verdad tenía razón. Mike siempre me apoya sin importar qué, siempre está ahí para mí y se que nunca me traicionaría. En cuanto al brazalete, los dos nos lo ponemos (casi) todos los días desde ese entonces-
Mabel: ¡Está lo máximo! -dijo devolviéndome a la realidad-
Sol: ¡Si quieres te podríamos enseñar a hacerlos!
Mabel: ¿¡En serio!? -preguntó ilusionada-
Chiara: Claro, ¿por qué no?
Emilia: El recreo es largo, tenemos tiempo.

Nos dirigimos al salón, sacamos lamnas, tijeras, pegante, botones, pepitas brillantes y muchos hilos de muchísimos colores. Le dijimos a Mabel que sacara lo mismo y ella lo hizo. Llegamos al salón y el resto del recreo estuvimos haciendo brazaletes con Mabel. Bueno.... casi. Como dije antes, el que yo tengo lo hice con Mike hace nueve años y mis amigas no tenían ni idea de cómo hacerlos, así que estuvimos gran parte del recreo intentando descifrar cómo hacer los brazaletes. Al final lo logramos y ahora cada una tiene uno, así que yo tengo dos y Mabel aprendió a hacerlos. Mabel seguramente pensó que el recreo se estaba acabando porque colgó rápido y se fue. Nosotras nos quedamos en el salón y en eso llega Mike.

Mike: ¡No me digas que estás haciendo brazaletes sin mí!
Áida: Mike, sí viniste
Mike: ¿Por qué no vendría?
Áida: No lo sé, es que no te vi esta mañana y me preocupé
Mike: Y aún así no llamaste
Áida: ¡Perdón! Es que estábamos en video llamada con Mabel y le estábamos enseñando a hacer brazaletes de la amistad.
Mike: ¿Con quién?
Áida: ¡Con Mabel! -se veía confundido-
Todas: ¡La chica no-demonio de otra dimensión!
Mike: ¡Ah, esa Mabel!
Áida: Sí, esa Mabel -nos quedamos en silencio-
Aidania: ¡Pregúntale!
Áida: ¿Qué?
Aidania: ¡Que por qué no trajo comida!
Áida: ¿¡Qué!?
Aidania: ¡Vamos Áida! ¡Pregúntale que por qué no estaba esta mañana en la entrada!
Áida: Ah, cierto. Oye Mike, a todas estas, ¿por qué no estabas esta mañana en la entrada?
Mike: Ah, es que estaba hablando con los chicos
Áida: ¿Te refieres a Juan, Nico, y ellos?
Mike: No, ya sabes, "los chicos" -dijo dándome un pequeño golpe con el codo en mi brazo como si tuviera que entender lo que estaba pasando cuando claramente no lo hacía-
Áida: No lo capto -dije confundida-
Mike: ¡Vamos! ¡No finjas que no sabes de que hablo! -lo miré confundida. En serio no sé lo que está pasando- ¡Los chicos! ¡Tú sabes! Marco, Eric, Bruno...
Áida: Aaaah, esos chicos
Mike: ¿Acaso ya no les dicen así?
Karol: Meh, decidimos que eso solo era raro
Áida: ¿Y de qué hablaban o qué?
Mike: Nunca lo adivinarías, pero....

~flashback a esta mañana narrado por Mike~

Estaba como casi todas las mañanas esperando a Áida en la puerta del colegio. En eso llega Bruno y me pide hablar con él un segundo, a lo que yo digo que sí. Caminamos un poco, hablando de cosas no muy importantes, hasta que llegamos a un punto donde estaban Nico, Juan, Pedro, Ramiro, Marco, Eric, Richard, Mateo y Jorge. <Okey, ¿ya estamos todos?> preguntó Bruno mientras mis amigos y yo nos mirábamos desconcertados y los demás asentían.
Richard: Okey, ¡Marco! ¡Comienza!
Marco: ¡Siempre me toca comenzar a mí!
Richard: Lo sé.
Marco: ¡Argh! Muy bien. Entonces, nos reunimos aquí porque queríamos invitarlos a una pijamada mañana
Nico: Por mí estaría bien
Juan: Sí, ¿por qué no?
Ramiro: Creo que es una buena idea
Pedro: Claro, cuenten conmigo
Mike: Sí, conmigo también, pero ¿por qué?
Richard: ¡Por una simple razón! Marco...
Marco: ¡Nope! ¡Le toca a Mateo!
Mateo: Sí, creo que es justo. Bueno, pues lo que pasa es que lo estuvimos pensando y creemos que ustedes son un grupo muy chevere y nos gustaría ser más amigos de ustedes y una pijamada nos pareció la forma perfecta de conocernos más
Mike: Bueno, eso explica prácticamente todo

Accedimos y cuando iba a volver a esperar a Áida, el timbre sonó y me fui a clase

~fin del flashback~

Áida: Bueno, eso explica mucho. ¡Así que mañana tienen pijamada!
Mike: Sí, así es
Chiara: ¡Qué delicia!
Jazmín: Oigan, ¡deberíamos hacer lo mismo!
Emilia: ¡Dale! ¡Gran idea!
Katy: ¡Podría ser divertido!
Sol: ¡Sí!
Karol: Estoy dentro, pero ¿quién pone la casa?
Áida: ¡Yo! Le puedo pedir a mis hermanas usar el cuarto grande. ¡Es perfecto para pijamadas!
Emilia: Listo, ya tenemos casa. Entonces mañana nosotras vamos a tu casa...
Mike: Y yo voy a la de Bruno....
Todos: ¡Hecho!