❧ Solamente tú ❧

¿Podrá ser que tú y yo...?

Melody

No sé como las cosas terminaron de esta forma, pero allí nos encontrábamos los dos, en la sala de mi apartamento... él estaba curando mis heridas, sin decir una sola palabra y el silencio que inundaba la habitación era infinita, lo único que se lograba escuchar, era el pequeño reloj que tenía colgado en la pared...

Flash back

-Hao...- Dije sorprendida mientras él me ayudaba a levantarme, por intentar luchar con ese sujeto, me había herido bastante, pero eso era poco, con lo que realmente hubiera podido suceder, esto no era realmente nada, por lo que estaba aliviada.

-Vi que... estabas en problemas, así que vine a ayudar- Desvió la mirada, él estaba mintiendo ¿acaso me había seguido después de nuestro corto encuentro? –Gracias...- Bajé la mirada –Debo irme a casa...- Intenté caminar, pero una molestia terrible en el tobillo hizo que gimiera del dolor, cubrí mi boca y tomé fuerzas para dar otro paso...

-No puedes irte caminando en ese estado, seguramente te has torcido el tobillo- Escuché la voz de Hao mientras se acercaba a mí –No pasa nada... puedo caminar, sólo he dado mal un paso- Mentí, sin embargo, él me tomó en sus brazos... y me llevó consigo a su auto -¿Q-Qué estás haciendo? Bájame...- Le supliqué, pero no me hizo caso, él me colocó con cuidado en el asiento de adelante, cerró la puerta y luego se pasó al otro lado.

- ¿Quién era ese idiota? Parecía que lo conocías- Empezó a hablar, se notaba un poco molesto...

-Ah... es un conocido- Me limité a responder, realmente no quería hablar del tema... - ¿Dónde vives ahora? – Me preguntó... después de darle la dirección, la velocidad con la que iba manejando aquel vehículo aumentó, me tensé mientras presionaba un poco fuerte el cinturón de seguridad...

Fin del flash back

Fue así como de la nada, los dos nos encontrábamos en esta situación, emití un gran suspiro después de recordar lo que había sucedido y al hacerlo pude notar como él había dirigido su mirada hacia mí nuevamente... esa mirada tan intensa que siempre lo había caracterizado me consumía por completo...

-Entonces ¿No piensas decirme quien era ese idiota? – Volvió a preguntar, presioné levemente mis labios y él se sentó a mi lado, al parecer tenía mucha curiosidad, fue así como empecé a contarle la relación que teníamos y el motivo por el cual había decidido no interponer alguna denuncia en su contra.

-Eres unta tonta, él ha llegado a este punto y tú por consideración ¿No has puesto la denuncia? Realmente eres una idiota- Empezó a regañarme, bajé mi mirada y me sentí un poco molesta ¿Por qué se interesaba tanto en eso?

-Ya no importa, de cualquier forma, él estaba borracho...- Le respondí.

- ¿Qué no importa? ¡De no ser porque yo estaba cerca...sino! - De pronto pude sentir cómo sostuvo mis hombros y yo dirigí mi mirada nuevamente hacia él, se notaba frustrado y molesto... -Hao, tú...- Murmuré con suavidad, de pronto él se separó de mí, al darse cuenta de la cercanía que teníamos -¿Por qué estabas en ese lugar? – Le pregunté.

-Yo, sólo iba de paso para el lugar donde vivo- Desvió la mirada, nuevamente, mintió... al parecer él no había cambiado mucho después de todo, sonreí levemente.

-Gracias por haberme ayudado-

Hao

Me encontraba sumamente molesto, frustrado y confundido ¡Esa niña tonta! Realmente no se preocupaba para nada por su seguridad, después de lo que sucedió... pareciera como si realmente no le importara absolutamente ¡NADA!.